‘Rodajes en Canarias 1951-1970′

Lunes, Diciembre 3rd, 2012

En su generosa labor compiladora Joseph Vilageliú es el único especialista que se ha preocupado por contabilizar el número de publicaciones que a este lado siempre inestable del Atlántico se han dedicado a estudiar y analizar el cine rodado aquí. En Canarias.

Imagino así que en esta lista, ya imprescindible para todos aquellos que quieran trabajar sobre una realidad que todavía suscita debate, Vilageliú habrá añadido el último volumen que nos aproxima a lo que ya casi nadie cuestiona como una realidad.

Me refiero al volumen editado recientemente por la Filmoteca Canaria Rodajes en Canarias 1951-1970, un ejemplar que prolonga y continúa el trabajo emprendido hace unos años con Rodajes en Canarias 1896-1950 y en el que se recogen todos los títulos en formato largo, medio y cortometrajes que se han filmado en las islas así como los proyectos que nunca pudieron ver la luz pero de los que se dio cumplida información en la prensa de su tiempo. 

Cruzando los dedos para que la experiencia se repita con un tercer y necesario volumen que llegue hasta nuestros días, esta nueva entrega que notaría las producciones rodadas en el archipiélago entre los años cincuenta hasta principio de los setenta del pasado siglo es un interesante libro que debe ser entendido como fuente de estudio e ideal para especialistas y curiosos que tienen inquietudes por conocer la insólitamente rica historia de películas rodas en las islas.

Coordinado por Enrique Ramírez Guedes, Rodajes en Canarias 1961-1970 presenta sin embargo algunas modificaciones con respecto al primer volumen, editado en 2004.

Como explica Guedes, se ha apostado en esta ocasión por centrar los contendidos “exclusivamente en las producciones que han tenido lugar en territorio insular, suprimiéndose los apartados que trataban de las realizaciones sobre Canarias rodadas fuera del archipiélago y las películas de directores canarios rodadas también fuera de las islas.”

Se ha apostado además por presentar las entradas por géneros “y no atendiendo solo al criterio cronológico”, estructurando el volumen en las categorías de Ficción, Documental, Noticiarios y Amateurs.

Personalmente, el capítulo más atractivo es el dedicado a largometrajes de ficción porque se recogen títulos ya conocidos Moby Dick, Tirma, El reflejo del alma y Hace un millón de años, entre otros, con cintas bélicas alemanas como La estrella de África (Alfred Weidenmann, 1957), sobre las experiencias en combate del as de la aviación alemana durante la II Guerra Mundial, Hans Joachim; extravagantes cintas de espionaje, S.O.S. Pacífico (Guy Green, 1959) y peplum, o películas de romanos, Ulises contra Hércules (Mario Caiano, 1962).

También rarezas, como los musicales pop Días maravillosos (Sidney J. Furie, 1964) y la española Escala en Tenerife (León Klimovsky, 1964) con, respectivamente, Cliff Richard y el Dúo Dinámico (Manuel de la Calva y Ramón Arcusa) como protagonistas.

En cuanto a los proyectos que nunca fueron realizados me llama poderosamente la atención el anuncio de lo que pudo haber sido una adaptación de La isla y los demonios, novela de Carmen Laforet, así como de El señor de las moscas, que intentó levantar el productor Sam Spiegel y que su director, Peter Brook, rodaría en 1963 con gruón del propio autor de la novela, William Golding.

Para los aficionados al cine, no solo con las islas como escenario, Rodajes en Canarias 1951-1970 es un libro de referencia y consulta imprescindible. Repletos de títulos poco o nada conocidos y muy preciso en su información.

Felicidades a la Filmoteca Canaria, y al equipo de colaboradores que ha participado en su elaboración, por este trabajo del que se han editado seiscientos ejemplares.

Saludos, hace demasiado frío, desde este lado del ordenador.

Flechazos (Bernal Díaz del Castillo)

Miércoles, Septiembre 5th, 2012

Ya he intentado explicar que hay libros que me llaman en silencio y que cuando reparo en ellos su voz retumba dentro de mi cabeza con el mismo efecto devastador de una bomba nuclear.

Soy, así, de los que creen que existen libros que parecen que te estuvieran esperando, callados, humildes, como si formaran parte de tu vida sin que lo supieras hasta que, por una casualidad que no existe, reparas en ellos y los coges y hueles y lees hasta embriagarme en una suerte de gozosa fortuna que tiene algo de carnal y quiero pensar sexual…

Y entonces comprendo que el tiempo que he ido dilatando el encuentro mereció la pena porque el libro estaba ahí, esperando el momento en el que todos los elementos se confabularan para hacerme no sé si más feliz pero sí al menos para contribuir a que no renuncie a esa palabra que es esperanza mientras me sumerjo en sus páginas porque, lo que antaño intuí podía resultar un fastidio, ahora se ha transformado en un sendero repleto de luces que iluminan las oscuridades que llevo por dentro.

Me pasó con Viaje al fin de la noche, de Louis-Ferdinand Céline, un autor que se puso de moda en unos tiempos universitarios que se difuminan en mi memoria y que la mayoría de los que hablaban –no recomendaban– su lectura sospecho ahora que no lo habían leído aunque se empeñaran en demostrar lo contrario.

Intenté por aquel entonces, lo juro, meterme en aquel texto que me parecía confuso y mal escrito. Para colmo de males, con el prejuicio de que su autor, Céline, fuera un señorito francés que no dudó en colaborar con los nazis y en pronunciar frases desafortunadas en contra de los judíos que iban desfilando día y noche hacía los campos de exterminio.

Pasado el tiempo, y relativamente malherido, encontré un ejemplar de aquel Viaje al fin de la noche y lo que antaño me resultó inconexo pasó a ser por obra y gracia de los dioses algo tan transparente como el agua.

El ejemplar que aún duerme en mi biblioteca está subrayado a lápiz, a veces incluso con una breve anotación en la que se puede observar unos signos de exclamación.

Algo parecido me sucedió durante un viaje por esa misma Grecia que hoy todos los ciudadanos de la Unión Europea pronuncian con boca pequeña.

Me llevé en aquel itinerario turístico La Iliada y La Odisea y Zeus, aunque prefiero pensar que fue Atenea, me contaminaron el alma  para descubrir alborozado que, efectivamente, los dioses cuando quieren caminan entre nosotros y que la novela de aventuras no sería verdad si no se hubiera escrito el fantástico viaje de vuelta a casa que emprende el astuto de Ulises.

El descubrimiento de otros libros, más que autores, se lo debo así a la casualidad y en ocasiones, raras, la verdad, a libreros inspirados y a amigos que, como Ezequiel Pérez Plasencia, me hizo fijarme en un autor, Joseph Roth, con el que desde entonces no dejo de reencontrarme, o Fiódor Dostoievski, un escritor al que me acerqué con el natural recelo de enfrentarme a sus voluminosas novelas…

El paso de la vida me ha mostrado así que mi corazón continuará latiendo mientras mi apetencia por la lectura –compulsiva y excéntrica, lo admito– no me abandone cuando la enfermedad decida tomar la carcasa que es mi cuerpo y aplatane todavía más ese pedazo que unos llaman alma y que en mi caso debe de encontrarse en alguna parte que hasta el momento desconozco.

Toda esta introducción viene a colación porque esa misma sensación que pretendo describir sin fortuna es la que siento ahora mismo con un ejemplar publicado en la colección Austral hace más de veinte años y que encontré –no fue fruto de la casualidad sino del flechazo– en una de mis habituales correrías por el Rastro de la capital tinerfeña.

Se trata de Historia verdadera de la conquista de Nueva España, de Bernal Díaz del Castillo, o la crónica de un testigo directo de uno de los episodios más gigantescos que han emprendido mis antepasados a los que reconozco y no renuncio, sobre el sometimiento de lo que hoy se conoce como Méjico.

El ejemplar que poseo es un volumen en el que se nota las huellas del tiempo, impreso con letra muy pequeña y que supera las quinientas páginas.

Está escrito en un embriagador castellano antiguo que traduzco en mi sesera con una actualidad placentera que me obliga a avanzar y avanzar en el relato porque estoy ante una obra de insólita y de desarmante objetividad en la que su autor –tenía ochenta años cuando redactó sus recuerdos como soldado y aventurero– describe con estilo seco, castrense, unos acontecimientos que hizo temblar a la misma Historia.

Y quizá sea debido a ese estilo seco y contundente con el que Bernal Díaz del Castillo quiere rendir homenaje a los hombres que acompañaron a Cortés en aquella campaña, anotando las escaramuzas, batallas, enfermedades y derrotas que salpicaron lo que no deja de ser una gigantesca aventura, la clave de un libro en el que no hay ánimo de reivindicar héroes sino mostrar el esfuerzo titánico de un grupo en el que no hubo un solo protagonista.

Casi parece, en este sentido, como si Bernal del Castillo quisiera dejar constancia que lo que se hizo no fue obra de un solo hombre, Hernán Cortés, sino de los hombres que acompañaron a Cortés.

Por eso se me antoja Historia verdadera de la conquista de la Nueva España una lección de periodismo tal y como lo tenía entendido en mi cabeza antes de que la cruda realidad me enseñara que es otra cosa…

Y hago cábalas mientras me pregunto ¿cómo demonios nadie, nadie, acometió la ambiciosa tarea de transformar lo que dictan estas páginas en un guión que tuviera la misión de traducir en imágenes lo que fueron capaces de hacer mis antepasados en territorio inhóspito, despiojándolo, tal y como lo despioja Bernal del Castillo, de leyenda?

Historia verdadera de la conquista de la Nueva España es un libro, en definitiva, con el que recupero mi compromiso de honor con los volúmenes que me hacen pensar qué grande es la literatura.

También mi atolondrado asombro de que un lector en 2012 aprenda a comportarse como persona a través de las experiencias que vivieron sus semejantes pero en el siglo XVI.

Una experiencia narrada con humildad, que no hace queja de los sufrimientos y tragedias que padecieron mientras conquistaban lo que era un Nuevo Mundo.

Un relato, en definitiva, de hombres que solo sabían caminar dando pasos hacia adelante.

Bernal Díaz del Castillo falleció en la indigencia.

Dejó solo a sus hijos este fascinante relato a modo de herencia. Iconsciente él, y eso lo hace más grande todavía si cabe, del formidable legado que nos dejaba a quienes hoy nos consideramos sus legítimos descendientes.

Leo en voz alta sus páginas mientras recorro los largos pasillos de mi mansión. Y cuando cierro la boca solo puedo agradecer haberme topado con este ejemplar usado una mañana soleada de domingo en el Rastro de la capital tinerfeña.

Hago el signo.

Bajo la cabeza con humildad y susurro la palabra sagrada:

Gracias.

Saludos, ni un paso atrás, desde este lado del ordenador.

Para apuntar en la agenda…

Martes, Marzo 27th, 2012

NO DEJEN DE IR

La segunda sesión del foro Enciende La Tierra convertirá el Espacio Cultural de CajaCanarias, en Santa Cruz de Tenerife, en un espacio de pensamiento y diálogo que invitará a la sociedad a reflexionar sobre la primavera árabe. Sami Naïr y Dima Khatib debatirán este martes, 27 de marzo, sobre lo que supuso este despertar social, a partir de las 20 horas. Este debate, con entrada gratuita hasta completar aforo, estará moderado por Lourdes Santana, directora regional de Cadena Ser en Canarias.

CORTO CANARIO EN TEA

Tenerife Espacio de las Artes acoge este miércoles, a las 20.30 horas, el estreno del cortometraje Veneno, un trabajo dirigido por Jonay García (Santa Cruz de Tenerife, 1979), producido por Digital 104. Veneno está escrito por Eugenia Arteaga y lo protagonizan Aida Folch y Pepo Oliva. La película propone una interpretación “peculiar en el género fantástico”, al contar la historia de una joven que sufre una extraña enfermedad que convierte su sangre en veneno. La entrada para ver esta cinta, de 24 minutos de duración, es libre hasta completar el aforo del Salón de Actos y previa retirada de las invitaciones en la taquilla del centro. El filme, en el que también intervienen los actores Severiano García, Juancho Aguiar, Armando Jerez y Gustavo Rodríguez, se rodó en agosto de 2011 en la Residencia Universitaria Parque de las Islas de la Universidad de La Laguna.

NUEVO LIBRO DE CECILIA DOMÍNGUEZ LUIS

El Hotel Nivaria, en La Laguna, será escenario también este miércoles, 28 de marzo, de la presentación de Los niños de la lata de tomate, de la escritora tinerfeña Cecilia Domínguez Luis. El acto, que comenzará a las 18.30 horas, lo introducirá el escritor Pablo Martín Carbajal.

ARONA NEGRA, EN MAYO

El Patronato de Cultura del Ayuntamiento de Arona prepara la sexta edición de la Novela Negra de Arona, que se desarrollará del 9 al 11 de mayo en este municipio del sur de Tenerife. El año pasado, entre otros invitados, participaron en sus jornadas el escritor Lorenzo Silva y el librero Paco Camarasa, responsable de la librería Negra y Criminal en Barcelona, toda una institución para los amantes del género.

Y EL VIERNES…

Ediciones Aguere y Ediciones Idea acaban de publicar –dentro de su colección Fantasía y Ciencia Ficción– Aislados, la nueva novela de Félix Díaz. Esta obra se presenta el viernes, 30 de marzo, a las 19.30 horas, en el Ateneo Miraflores de Santa Cruz de Tenerife, radicado en la calle Miraflores, nº 3. En el acto, intervendrá, junto al autor, el director de Ediciones Aguere, Ánghel Morales García y el escritor y abogado, Javier Hernández Velázquez.

No tengo dinero, no, no, no…

Jueves, Mayo 26th, 2011

I.- DIÁLOGO DE SORDOS

MILAGROS LUIS BRITO, consejera en funciones de Educación del Gobierno de Canarias (rugiendo como una leona): “¡¡¡Esta será una edición mucho más austera, pero muy digna porque sus contenidos han sido bien hilvanados y rebosan una gran canariedad!!!”

Maribel Oñate, concejal en funciones de Culura del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife (pegando la boca al micrófono mientras se limpia lágrimas que no resbalan por sus ojos): “Nos hubiera gustado darle un mayor apoyo económico a este evento, pero no hay presupuesto en el área de Cultura para ser más generosos.”

Remedios Sosa, de la Asociación de Libreros de Tenerife (tragando saliva mientras mira a un lado y al otro): “Este año nos encontramos con los preparativos muy avanzados y no pudimos tener el control, pero desde aquí pido que se cumplan los acuerdos logrados por la confederación nacional del gremio que nos permiten una mayor capacidad de decisión.”

Cristóbal de la Rosa, coordinador en funciones de Cultura del Cabildo de Tenerife (apretándose el nudo de la corbata): “Es importante que el sector de los libreros se mantenga unido en un momento en el que las reglas del mercado las imponen los bestseller.”

II.- Y PESE A TODO…YO ERRE QUE ERRE

No tengo costumbre de comprar libros en la Feria del Libro pero me gustan las ferias del libro.

Desde hace unos años la que se celebra en la capital tinerfeña se ubica en el parque García Sanabria, espacio que probablemente sea uno de los rincones más tranquilos y hermosos de esta capital de provincia tan necesitada de rincones hermosos pero no tranquilos porque Santa Cruz de Tenerife es sinónimo de ciudad tranquilidad por aburrida.

Pese a todo, reconozco que espero con mucho interés año tras años (erre que erre no confundir con ere que ere) el programa de actividades que vertebra la Feria del Libro de Santa Cruz de Tenerife, actividad cultural que cumple ahora su XXIII edición.

Será porque siempre alimento esperanzas que me quiten de la cabeza las, por norma general, inquietantes y profundas decepciones que me han producido en anteriores ediciones.

La Feria del Libro, que año tras año ha ido a menos no ya por la crisis sino por mimetismo e incapacidad de sus organizadores por reiventarla e inyectarle imaginación (lo mismo pasa con el cine subencionado canario) ha presentado el menú de actividades de 2011 con el mismo entusiasmo que antaño.

O lo que es lo mismo, una rutinaria exposición de actos que, de verdad, poco anima a quien ahora les escribe a estar presente en alguno de ellos.

Y todo pese a recordar a Tomás Morales, a quien se le dedicó el ya controvertido Día de las Letras Canarias cuando desde la casa con más jeta (que no gesta) de Canarias –el Parlamento de chiste regional– votó por unanimidad que don Blas Cabrera fuera el homenajeado en 2012.

Me pregunto –inocente que es uno– si alguno de los escritores indignados entonces recordará en sus presentaciones literarias aquel desaguisado que a día de hoy continúa sin solucionarse.

¿Cómo quedó lo de Pancho Guerra?

¿Habrá cacerolada?

III.- AUSENCIAS

Detecto que en la rueda de prensa no se destaca la presencia de ningún escritor nacional por esta tierra triturada en pactos post electorales y tampoco la ya tradicional visita de Alberto Vázquez Figueroa para firmar ejemplares de sus últimas novelas.

No obstante, tengo la esperanza de encontrármelo por el García Sanabria porque entiendo que una Feria del Libro de Santa Cruz de Tenerife no sería una verdadera Feria del Libro de Santa Cruz de Tenerife sin contar con Alberto Vázquez Figueroa.

IV.- NOVEDADES. ¿NOVEDADES?

Entre las novedades de la XXIII edición que se inaugura este viernes, 27 de mayo hasta el domingo 5 de junio, está lo que se ha denominado como Media noche en blanco.

La cosa consiste en que la Feria permanecerá abierta hasta las 23.30 horas los sábados 29 de mayo y 4 de junio.

Es una pena que precisamente esta iniciativa caiga en Sabbath y que no pueda hacer horas extras en el parque para ver si la cosa funciona pero espero de veras que resulte productiva para la ciudadanía y libreros y que dé algo de vida a una capital que muere en soledad como es la que habito.

O creo que habito.

¿Habito en este cementerio o soy víctima de una cruel broma del destino?

Despierta, chacho.

V.- ALGO DEL PROGRAMA

Este mismo viernes la Feria del Libro acogerá a las seis de la tarde en la carpa institucional –eso implica pues que con media hora de retraso porque estamos en Canarias–  la presentación del libro Erich el zurdo, de Domingo Luis Hernández, que correrá a cargo del escritor Daniel Duque.

Después, Mariano Gambín dará a conocer Ira Dei, interesante novela de misterio sin pretensiones que transcurre en La Laguna y que presentará su autor junto a la periodista Doris Martínez.

A las 19.30 horas, música con el Quinteto Fagotes, del Conservatorio Superior de Música, en el escenario central.

La primera jornada de la Feria concluirá con la presentación del libro Harraga. Novela Negra, de Antonio Lozano, que contará además de Lozano con su editora, la valiente Verena Zech.

En una nota de prensa se destaca que “las novedades editoriales isleñas y los autores canarios serán los auténticos protagonistas de la edición 2011 de la Feria del Libro de Santa Cruz de Tenerife” y que alrededor de cincuenta títulos recientes serán presentados “además de dar a conocer proyectos editoriales”.

Lo que me parece muy bien porque si es así pondrá de manifiesto que, pese a este revival del 29 que vivimos, el sector editorial en Canarias está aguantando el temporal.

Otra cosa es que sea verdad.

Saludos, en fin y desde el fin, desde este lado del ordenador.

Un homenaje necesario y otros apuntes de (in)cierta actualidad

Jueves, Mayo 5th, 2011

EZEQUIEL PÉREZ PLASENCIA, EN EL RECUERDO

La Cátedra Pedro García Cabrera ha organizado una mesa redonda en memoria de Ezequiel Pérez Plasencia bajo el título Malditos y benditos: el tránsito existencial y literario de Ezequiel Pérez Plasencia, que se celebrará el viernes 20 de Mayo, a las 19 horas en el Ateneo de La Laguna. Actuará como moderador Francisco Tovar.

Por otro lado, el sábado 26 de mayo Ezequiel Pérez Plasencia volverá a ser recordado en un acto que los amigos que conoció en Cartagena tienen previsto celebra en el Casino de la ciudad a las 20 horas. En este encuentro participarán los escritores Juan de Dios, Joaquín Piqueras e Ignacio Borgoñós, entre otros. Durante el acto, cuya escenogarfía incluirá máqunas de escribrir y fotografías de algunos de los escritores que amó Pérez Plasencia, se anunciará la creación de un premio de relatos que llevará el nombre del recordado escritor tinerfeño.

CICLO DE CONFERENCIAS EL LUGAR ESCONDIDO

El Círculo de Bellas Artes de Tenerife inicia este viernes, 6 de mayo, a las 19.30 horas, el ciclo de conferencias El lugar escondido, en el que participarán once especialistas para “ofrecer una visión contrastada de los grandes temas que afectan al patrimonio arqueológico de Canarias”, explica el catedrático de Prehistoria de la Universidad de La Laguna, Dimas Martín Socas, director del programa. Abrirá el ciclo el catedrático de Arqueología de la Universidad de La Laguna, Antonio Tejera Gaspar, galardonado con el Premio Canarias de Patrimonio Histórico 2011, quien hablará sobre las momias guanches. Estas charlas forman parte del proyecto que El lugar escondido, que incluye también una exposición colectiva que actualmente puede verse en el Círculo de Bellas Artes y que recoge obras de veinte artistas, entre otros, Martín Chirino, Lola Massieu, Gonzalo González, Pedro González, Jane Millares Sall, y Tarek Ode.

ESTREMÉCETE…

El martes 10 de mayo se pondrán a la venta la segunda edición del volumen Estremécete. La infancia del pop rock tinerfeño de Antonio Reyes, una publicación de 192 páginas que propone un recorrido de los acontecimientos musicales relacionados con el pop rock tinerfeño entre 1959 y 1970, año por año. El trabajo cuenta con unas 300 fotografías y 19 gráficos en los que, a modo de árbol genealógico, se da cuenta de los miembros de los distintos conjuntos y su movilidad de unos a otros grupos, así como el nacimiento de los mismos. El libro, que también contiene un índice onomástico con 1.170 entradas, está editado por Los 80 pasan factura y cuenta con el patrocinio del Gobierno de Canarias.

PRESENTACIÓN DE EL AÑO SE LA SECA EN MADRID

El Espacio Canarias en Madrid acoge el viernes 6 de mayo a las 20 horas la presentación del libro El año de la seca, de Víctor Álamo de la Rosa. El acto contará además de con la presencia de su autor, con el escritor peruano Jorge Eduardo Benavides, quien presentará el acto. El año de la seca (título reeditado por Tropo Editores, su primera edición data de 2001) también será presentado en sociedad el jueves 12 de mayo en la MAC, en la capital tinferña, a las 19 horas. En esta ocasión será el escritor Juan José Delgado el encargado de su introducción. 

Saludos, estúpidamente cansado, desde este lado del ordenador.

‘Riqui Raca 1-0. Cuentos del fútbol canario’. ‘Il buono, il brutto, il cattivo’

Martes, Mayo 3rd, 2011

Destacados escritores como Albert Camus y Ezequiel Pérez Plasencia nos enseñaron que el fútbol –fúrgol– no tenía que ir a la contra de la gimnasia mental. Ambos dos, entre otros tantos, resultaron personas que amaban la literatura y el fútbol porque entendieron que se trata de  las dos mitades de una naranja a las que juntas se exprime mejor el jugo.

La literatura ha indagado en varias ocasiones en el universo del balón con relatos de cierto calado. Sin embargo, el llamado deporte rey no disfruta aún de una traducción definitiva en pantalla grande pese a que intentos loados y loables hay.

Por eso, quizá ahora que los norteamericanos empiezan a tomar interés por ver enfrentarse a veintidós jugadores en pantalones cortos en un terreno de juego, si el cine por fin rendirá justicia al fútbol.

Historias humanas, de competición, éxito y fracaso se encadenan en el terreno de juego donde tanto los deportistas que corren detrás del balón como los hinchas en las gradas cuentan con una historia detrás. En ocasiones llena de luces y en otras (y quizá por ello resulten las más interesantes) repletas de sombras.

Nunca he sido un buen deportista y ni siquiera un buen aficionado al fúrgol.

Este deporte, los deportes en general, me resultan bastante indiferentes.

Sin embargo el fúrgol, inevitablemente, me ha acompañado a lo largo de lo que llevo de vida como si de una curiosa maldición se tratara.

Si la ocasión conspira para ello, confieso que veo partidos importantes –como el que se juega esta tarde– más por inercia social que por otra cosa.

De hecho, no soy partidario de ningún equipo en especial aunque debo de admitir que me fascina de manera irritante la puta cara que se gasta quien ahora entrena al Real Madrid. Quiero entender que ese personaje ha asumido el papel de Malo que asumió el recordado Lee Van Cleef en tantos espaguetis western.

En este juego de comparaciones podríamos decir que quien entrena ahora al Club de Fúrgol Barcelona podría ser como Clint Eastwood en aquel subgénero italiano que reinterpretó a la europea las claves del western.

No sé me ocurre quien podría ser el Feo de esta película. Digamos que el resto de equipos que forman la competición.

Como Eli Wallach en el Bueno, el Feo y el Malo… Descansa en él los numerosos acertijos que Sergio Leone intentó plasmar del perdedor que se resiste a serlo aunque al final todo, absolutamente todo le salga Feo.

RUBIO (Clint Eastwood): Hay dos clases de hombres: los que tienen una pistola cargada y los que cavan. Tú cavas.

Y el Feo –por perdedor que es Wallach en esta película– no tiene más remedio que cavar.

Les cuento todo esto en una semana que solo puedo interpretar a nivel periodístico como de fin de los tiempos con la Boda, el puñetero paro, el más que cuestionable rechazo a que Bildu se presente a las elecciones, las revueltas árabes, los partidos entre el Barcelona y el Madrid y la ejecución de Osama Bin Laden tan gratamente recibida en Occidente y cuyo anuncio ha sido tan bien diseñado mediáticamente por la Casa Blanca –mirad la fotografía en la que el presidente de los Estados Unidos rodeado de sus colaboradores asiste en directo a la operación llevada a cabo por los SEAL– de enterarme a destiempo de la aparición de una nueva antología de relatos escritos por canarios.

No, no se trata de Generación 21: Nuevos novelistas canarios.

Me refiero a la iniciativa que el poeta y ahora editor Ayoze Suárez (Nectarina) ha hecho posible y que lleva por título Riqui Raca 1-0. Cuentos del fútbol canario. Libro que no he tenido oportunidad de leer pero que prometo hacerlo un día de estos.

Lo que me ha llamado la atención de este volumen que reúne relatos de
Juan Cruz, David Díaz, Elsa López, Fernando G. Delgado, Víctor Bidart, Javier Mérida, José Rivero Vivas, Enrique Reyes, Antonio Carmona, Jesús G. Martín Perera y Álvaro Perdigón (en la banda de Tenerife) y de Samir Delgado, José María de Páiz, Víctor Ramírez, Rayco Cruz, Pablo Sabalza Ortiz-Roldán, José Luis Correa, Pedro Flores, Santiago Gil, Luis León Barreto, Leandro Pinto y Silvia Rodríguez (en la banda de Las Palmas) y con D. Aeberhard ejerciendo las funciones de árbitro, son las complicaciones con las que ha tenido que lidiar su autor para promocionar, vender y publicitar este libro.

La primera de ellas es la escasa colaboración del C.D Tenerife y la U.D. Las Palmas a este original y tan nuestro volumen balompédico.

Por otra, la indiferencia de muchos de los autores publicados en esta  antología de respaldar este volumen.

Y la tercera y última que el C.D Tenerife tras no apoyar el libro haya pedido unas perras al antólogo y editor por la utilización del nombre del Club unos meses después de haberse publicado el volumen.

RUBIO (Clint Eastwood): Dios no está con nosostros porque también odia a los idiotas.

Una buena razón, Rubio, para entender porque descendemos a 2ª B.

Y no lo dice Sentencia.

Saludos, otro martes muy raro, desde este lado del ordenador.