Ha muerto Bill
Ha muerto Bill. O el Pequeño Saltamontes de la mítica serie de televisión Kung Fu (¡cuánto influyó en mi generación las deventuras de ese joven monje shaolin en el oeste americano!). O el hijo mayor del gran actor John Carradine. En fin, que ha muerto David Carradine. La estrella del cine de bajo presupuesto. El Cole Younger de Forajidos de Leyenda o el piloto Frankenstein de La carrera de la muerte del año 2000.
Ha muerto, en definitiva, Bill. El personaje que dio título a la hasta ahora mejor película de Quentin Tarantino (Kill Bill). La veo esta noche seguro. A modo de homenaje. Las dos entregas, aunque no salga en la primera.
Me quedó más solo todavía cinematográficamente hablando. Porque con la desaparición de David Carradine se nos va uno de los mejores protagonistas del cine que tanto me gusta. El de acción pura y dura, sin tonterías intelectuales: espectáculo con sabor a novela barata clásica. Con personajes cortados de una pieza. Aunque también tonteó con cineastas tan serios como Ingmar Bergman en El huevo y la serpiente o Hal Ashby en Esta es mi tierra. Que un tipo de su clase y de su porte era capaz de aguantar cualquier cosa. Aunque los aficionados lo prefiriéramos cuando hacía de las suyas en Cannoball o El desafío del Cóndor.
Se me fue. Se nos fue otro de los grandes.
Saludos rigurosamente de luto a este lado del ordenador.
Junio 5th, 2009 at 8:20
Comparto el luto, sobre todo por tantas noches adolescentes disfrutando del monje. Un hermoso adiós a Carradine, si es que los “adioses” pueden ser hermosos!!!!
Junio 5th, 2009 at 10:22
Comentaba en la oficina que no sólo hizo de Kwai Chang Kaine, sino de su nieto en una secuela de la serie realizada 20 años después. Es una pena, Eduardo, que no pudiese ponerte los videos en los que se ve al que de hecho era el mismo monje shaolin, que ya no recorría el oeste, sino una gran ciudad. Como Bill, Carradaine lo hizo tan bien que está presente en toda la primera parte, aunque no se le vea. En fin, una gran pérdida.
Junio 5th, 2009 at 22:57
Me encanta ver a este señor en pantalla, hasta cuando me sorprendí al verle en “El huevo de la serpiente” en mi adolescencia, y es curioso, porque fue David Carradine el que me contagió la enfermedad llamada Bergman.
Junio 6th, 2009 at 11:36
Fue el más grande. O por lo menos uno de los más grandes. El rey de la serie B.
Junio 9th, 2009 at 17:25
No es por polemizar, pero lo de Kill Bill como la mejor peli de Tarantino… no sé, no sé… no soy muy cinéfilo pero no pude terminarla… tanto Reservoir Dogs como Pulp Fiction me mantuvieron en vilo y casi sin pestañear… creo que Tarantino no ha vuelto a hacer una película como esas….
Junio 9th, 2009 at 17:42
Pues ya ves… A mi Reservoir dogs me pareció un pestiño postmoderno y Pulp Fiction violencia refinada para espectadores no iniciados. Kill Bill, sin embargo, es una ópera fantástica, casi un musical. Y un sentido y emocionado homenaje al genial Carradine.
Junio 10th, 2009 at 13:52
Kill Bill es como un videoclip de más de 4 horas…
Junio 10th, 2009 at 15:29
Jejeje, es usted un provocador. De todas formas, y como errar es de humanos, le recomiendo a usted que vuelva a ver la que sin duda, a título personal, es la mejor película de ese caballero: Kill Bill.
Junio 11th, 2009 at 9:58
vaaaale, lo intentaré, habiendo dormido antes, para que no me venza el sueño
Junio 11th, 2009 at 12:10
Hágalo. Y disfrútela.