Los 100 mejores documentales del rock, según Xavier Valiño
Si hace unas semanas comentábamos en estas mismas páginas la aparición de Las 100 mejores películas del rock (Efe Eme, 2022), hoy hacemos lo mismo con Los 100 mejores documentales del rock (Efe Eme, 2022), ambas obras del crítico y especialista Xavier Valiño y libros que se complementan.
Ya destacamos en la ocasión anterior que se prodigan sobre todo en el mercado especializado español los volúmenes que tratan de recoger en sus páginas lo mejor y también lo peor del rock, el jazz, la literatura, y si es de género mejor, porque acotan la inabarcable cantidad de cintas, discos, obras de artes, libros que se han escrito a lo largo de la Historia. Estos trabajos tienen de hecho el objetivo de sintetizar un conocimiento que solo es terreno abonado para sabios y completistas, pero también para aficionados con una idea fija en la cabeza, ser conscientes que han visto o leído o escuchado hasta la fecha lo que sus aficiones le han proporcionado a lo largo de una existencia de total entrega.
Escrito así suena un poco complejo pero el lector, el público potencial al que van dirigidos estos libros trata, precisamente, de satisfacer su consumismo de aficionado sediento con trabajos en los que se parcela según los criterios de su autor lo mejor y lo peor de cada casa. Son, en este sentido, guías que nacen, precisamente, para orientar a los aficionados en la densa selva de la música clásica, el jazz, el rock así como el cine en toda su rica variedad de géneros como sucede en el terreno literario.
No sé que libro publicó primero la editorial Efe Eme, si este de Los 100 mejores documentales de rock o el dedicado a las películas en clave de ficción pero en el prólogo del primero se explican algunas dudas que planteamos cuando comentamos Las 100 mejores películas de rock, y era nuestra sorpresa de que su autor no hubiera incluido ninguna película española pese a que el género, sin disfrutar de grandes filmes, sí que cuenta con atractivos y a su manera revolucionarios trabajos.
La razón que esgrime el autor del texto es que no se encuentran demasiados filmes que se hayan ocupado en el cine español por reflejar no solo en clave de ficción sino también en el género del documental la posible historia de este género musical en un país que hasta el día de ayer no salía de la copla ni el pasodoble. Por otro, el autor de este compendio, de esta especie de vademecum cinematográfico y rockero, sí que mezcla géneros y tendencias como hizo en el libro anterior aunque ahora eso es una aplastante verdad ya que da prioridad a largometrajes documentales que se ocupan sobre todo de la música rock, que la relación es amplísima por lo que este proceso de selección, de escoger lo que estima mejor en un campo excesivamente amplio, logra como consiguió con el título anterior que uno note en falta títulos y descubra por otra parte otros que desconocía. Y es que ésta y no otra es la función de estos libros con espíritu completista, la de hacer que el lector especializado, o no, conozca trabajos que hasta ese momento desconocía.
El libro comienza en la década de los años 60 y finaliza con un amplio puñado de documentales que se han realizado y estrenado entre 2011 y 2021. El primer largometraje documental del que se hace eco es The T.A.M.I. Show y el último The Velvet Underground. La obra ofrece además un recorrido apasionado en ocasiones sobre este centenar de trabajos que contribuyeron a potenciar el aura de leyenda que arrastra la música rock y, capítulo a capítulo, cronológicamente, el interesado se puede hacer una idea de las modas, los gustos y las apetencias que década tras década ha ido transformando un género musical aunque, curiosamente, en el periodo que va de 2011 a 2021 muchos de estos documentales han mirado atrás para contar y en otros casos recontar la historia de grupos y bandas no necesariamente reconocidas.
Los 100 mejores documentales de rock incluye en sus páginas desde historias en la que se cuenta el ascenso y descenso de conjuntos que marcaron época así como grabaciones en directo que por su manera de estar realizados han pasado a la historia como Stop Making Sense, un filme dirigido por Jonathan Demme y con Talking Heads como protagonistas y clásicos indiscutibles del cine documental rockero: El último vals, de Martin Scorsese, un cineasta que ha vuelto a este mismo género en otras ocasiones.
En el libro aparecen documentales que ha recogido la vida y los conciertos de muchas de las bandas que han hecho historia en la música rock como The Beatles, Rolling Stones, Jimi Hendrix, David Bowie, The Doors, Joy Division, The Clash y Bob Marley, entre otros pero se dejan también muchos solistas y grupos que, como es mi caso, hubiera añadido quitando otros que sí comenta Valiño en este catálogo. Cuestión de gustos, inevitable en volúmenes de esta clase, listas que como ya se dijo no suelen dejar contentos a casi nadie.
Entre los filmes que aparecen se hace mención por razones obvias a los documentales que registraron conciertos que han entrado en la leyenda como Woodstock y Monterrey. También ese potentísimo recital que fue Concierto para Bangla Desh, una iniciativa de George Harrison y el primer gran concierto que se organizó en favor de una buena causa.
Saludos, rockanlodeando, desde este lado del ordenado