Mayor Tom, llamando a la Tierra

Hace tiempo que no sale y ha tomado una decisión trascendental, lo que en el imaginario de nuestro protagonista es como unir el hambre con las ganas de comer. Está flotando, porque ha dejado de lado un miedo que ya duraba demasiados años, pese a que su estado financiero se resienta por el golpe de sus acciones y sus hechos.

Así que lo vemos en el concierto que Youssou N’Dour ofrece la plaza del Auditorio. Y se encuentra a un montón de gente que ya creía muerta. Y de fondo la banda sonora de ese extravagante grupo africano. Y mira al mar y mira el escenario y mira a viejos y viejas amigos y amigas y  se da cuenta que todo ha cambiado. No sabe si para peor o para mejor.

De repente Youssou N’ Dor habla desde el escenario, y espera casi un discurso político donde mencione África y Canarias que también es África, geográficamente hablando como se cansan de recordarnos, pero esquiva el asunto. O lo más probable, no tenía la pretensión de reclamar la africanidad de la islas y todas esas cosas. Y piensa, este tipo que estaba confuso, que del viejo continente venimos todos los monos y monas que dicen llamarse hombres. Y que esta especie endemoniada es capaz de fabricar relojes suizos como la de darle al mundo a Miguel Ángel tras siglos y siglos de sangre, sudor y lágrimas (forma parte de un diálogo crudo e irónico de El tercer hombre, una de esas películas que se llevaría a una isla desierta aunque no tuviera dvd ni televisor) y sonríe con el ruido de los tambores de fondo.

Al día siguiente, cuando abre los ojos, recibe otros regalos que le llegan al alma. José, un amigo de la isla que tiene justo delante, le llama para anunciarle que el próximo lunes inicia una vuelta al mundo que espera dure un año. Otro, Ezequiel Pérez Plasencia, le envía un pequeño texto donde rinde homenaje a Juan Carlos Onetti (Infierno paradisíaco.- “Cuando entonces, hace hoy un quindenio, había un infierno tan temido o más que el de Dante, el viento nos hablaba bien claro y los adioses estaban libres de adjetivos. Pronto llegó la gusanera para recordarnos nuestro destino y reposo final. Fue cuando se percibió que desde su gran arte y su cama usted disparaba con munición engendrada en el fracaso y el desamparo. Odio, infamia y voluntad de hacer sufrir han sucumbido a esta inexpugnable reserva de amor que son sus páginas, un outsider, uno de esos escritores que escribían historias de plomo en el corazón con una sencillez aplastante“).

Y mira a un lado y al otro, y piensa que Sartre tenía toda la razón del mundo: el hombre está condenado a ser libre. Lo que no dijo el autor de La náusea es que esas cadenas no pesan sino que flotan.

En fin, saludos hoy un poco trascendentales a este lado del ordenador.

5 Responses to “Mayor Tom, llamando a la Tierra”

  1. Nicolás Melini Says:

    Que Canarias es Africa, geográficamente hablando. Hiriente aclaración. Absurdidad. Casi surrealismo. Paradoja del destino que haga falta aclarar lo evidente. La de tonterías políticas que han tenido que suceder, tan falazmente, para requerir esa aclaración. Para que esa aclaración sea pertinente. Para que algo así parezca esclarecedor, y nos dilucide algo olvidado, obviado, “ocultado”, durante tanto tiempo. Jossou N’dour es un tipo listo. Para qué va él a incidir en algo que es tan evidente. Y para qué pretender que un pueblo que se quiere una cosa se dé cuenta de que también es otra. Y desde mucho antes, desde siempre. Yossu N’dour es un tipo muy listo: el cliente siempre tiene la razón, y si su razón le insulta o menosprecia, entonces, lo mejor es no mentarla.

  2. Eve Harrington Says:

    KAVAFIS

    Cuando partas hacia Itaca
    pide que tu camino sea largo
    y rico en aventuras y conocimiento.
    A Lestrigones, Cíclopes
    y furioso Poseidón no temas,
    en tu camino no los encontrarás
    mientras en alto mantengas tu pensamiento,
    mientras una extraña sensación
    invada tu espíritu y tu cuerpo.
    A Lestrigones, Cíclopes
    y fiero Poseidón no encontrarás
    si no los llevas en tu alma,
    si no es tu alma que ante ti los pone.
    Pide que tu camino sea largo.
    Que muchas mañanas de verano hayan en tu ruta
    cuando con placer, con alegría
    arribes a puertos nunca vistos.
    Detente en los mercados fenicios
    para comprar finos objetos:
    madreperla y coral, ámbar y ébano,
    sensuales perfumes, -tantos como puedas-
    y visita numerosas ciudades egipcias
    para aprender de sus sabios.
    Lleva a Itaca siempre en tu pensamiento,
    llegar a ella es tu destino. No apresures el viaje,
    mejor que dure muchos años
    y viejo seas cuando a ella llegues,
    rico con lo que has ganado en el camino
    sin esperar que Itaca te recompense.
    A Itaca debes el maravilloso viaje.
    Sin ella no habrías emprendido el camino
    y ahora nada tiene para ofrecerte.
    Si pobre la encuentras, Itaca no te engañó.
    Hoy que eres sabio, y en experiencias rico,
    comprendes qué significan las Itacas.

  3. editorescobillon Says:

    Gracias Eve, no sabes cuánto me ha emocionado ese poema de Kavafis. Un abrazo muy fuerte a este lado del ordenador.

  4. Nicolás Melini Says:

    Bellísimo.

  5. una amiga Says:

    Espabila, chico. Y sigue con el blog, no me falles.

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