Perdone usted que no me levante

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La política es el arte de buscar problemas, encontrarlos, hacer un diagnóstico falso y aplicar después los remedios equivocados.” (Groucho Marx)

La Opinión de Tenerife publica hoy, domingo, 6 de febrero, una interesante entrevista con el viceconsejero de Cultura del Gobierno de Canarias, Alberto Delgado. Les invito a que la lean (basta con pinchar el enlace), ya que quien les escribe confiesa que algunas de sus respuestas le han dejado descolocado y más frío que un iceberg a la deriva. Algo previsible, no obstante, porque a medida que pasa el tiempo no termino por visualizar ni entender a nuestro actual responsable en la materia.

¿ENTONCES…?

Está claro que vivimos en época de vacas flacas. Y cuando digo lo de vacas flacas me refiero en especial a eso que llaman Cultura porque siempre es el primer área que sufre recorte en sus presupuestos por aquello de la contención del gasto. Lo que sí llama de forma notable la atención es que, entre otras cosas, Alberto Delgado confiese en esta misma entrevista con una ingenuidad que desarma, que se enteró de la suspensión de Mueca “por la prensa” para acto seguido limpiarse las manos de tan espinoso asunto añadiendo que nadie del Mueca habló con él.

Todavía.

“No se han dado este tipo de movimientos y yo tampoco puedo salir a la palestra como si fuera el abanderado de los defensores de la cultura”, comenta.

Y yo pienso, porque últimamente no hago otra cosa que la de pensar, que esa es precisamente una de las muchas acciones que se espera de usted precisamente por el cargo que ocupa: ser el primer “abanderado” de la famélica legión de los que son defensores de la cultura. Sobre todo cuando tiene muy claro (como lo tenemos muy claro quienes nos preocupamos por estos temas sin responsabilidad ni influencia política alguna) que Mueca “si este año se deja de hacer, no estoy tan seguro de que se pueda recuperar el próximo año.” (La negrita es nuestra).

Y PESE A TODO

En contra de lo que puedan pensar algunos, y pese a sobresalientes desaciertos como la de permitir todavía que en las ya tristemente famosas (des)comisiones de nuestro audiovisual figuren miembros –ahora sin voto pero sí con voz– de la Acepa (cuando muchos de los proyectos presentados a esas (des)comisiones son de gente de esa misma asociación), la gestión de Delgado no ha sido todo lo mala que algunos pudieran pensar. Es más, creo que ha sido lo suficientemente buena para que, culturalmente hablando, los efectos de la dichosa crisis no hayan resultado demoledores en las islas.

Todavía.

El actual viceconsejero tiene madera, además, de mediador. Papel que debe continuar explotando en unos días tan poco aciagos como son los actuales. Ello implica que sí debe de abanderar a los defensores de la cultura sin salirse de su sitio. Y al mismo tiempo, el de garantizar que está ahí, no encerrado como muchos sospechaban en una extraña torre de marfil.

¿SINIESTRAS LISTAS NEGRAS?

Se le pregunta al Viceconsejero en la entrevista si es verdad eso de que en su departamento existan listas negras de artistas y creadores críticos. Y Alberto Delgado responde una vez más con argumentos digamos que ingenuos porque, destaco del texto, “lo primero que me dijo Paulino Rivero (al ser designado en el cargo) es que hay que atender a todo el mundo. Eso es también lo que a mí me pide cuerpo”.

Y pone como ejemplo al escritor canario Luis León Barreto, al parecer una de las voces discordantes, porque pese a sus arremetidas: “sus libros están en Madrid y algunas de las obras traducidas son suyas” gracias al Gobierno de Canarias; así como a todos aquellos que si bien han presentado proyectos como no salen adelante, se han dedicado a alimentar con rencor el mito de la caza de brujas.

Y no, que no veo yo al señor Delgado todavía como una especie de siniestro senador McCarthy.

El Viceconsejero habla: “Todos creemos que nuestro proyecto es el mejor, pero claro, el problema es cuando hay tres ideas mejores a la tuya. Entonces es cuando se habla de listas negras. Si es que muchas veces traemos hasta profesionales de fuera de Canarias para que valoren los proyectos, con el fin de que no se puedan crear suspicacias. Y aún así se hablan de listas negras”.

Y finaliza el buen hombre: “Yo puedo hacer una lista muy grande de gente crítica con este Gobierno actual y que sin embargo están participando con nosotros en proyectos conjuntos. Cuando quieras podemos hacer esa lista. Hay personas que nos han criticado mucho incluso a través de los medios de comunicación y que han recibido nuestro apoyo en algunos proyectos.”

Lo que me hace plantear, y lo escribo de veras con la humildad del sencillo aprendiz:

¿Podría confeccionarnos esa lista un día de estos y presentarla en oficiosa rueda de prensa?

Uy, mucho me temo que no.

Saludos, sin que se me borre de la cabeza la gloriosa imagen de Juana de Arco, desde este lado del ordenador.

12 Responses to “Perdone usted que no me levante”

  1. Gil Blas Says:

    Muy mal eso de que nos puede elaborar una lista muy grande de críticos, no me ha gustado leer eso de la boca del viceconsejero, significa que vigilan, que apuntan nombres, que si no lo tienen ahora en cuenta grave, ya lo tendrán. Muy mal.

  2. bien Says:

    gil blas, he tenido la misma siniestra sensación. qué escalofrío

  3. Mario Domínguez Parra Says:

    No os quepa la menor duda.

  4. Setpemionito Says:

    Ningún escalofrío para mí. Yo percibí mucha torpeza. Y quizá no solo del entrevistado.
    Me preocupa, por repetido, que el político de algo tan pequeño como Canarias crea que su trabajo es esperar a que la gente le llame. Si Mueca no llama ¿para que va a intervenir? Quizá no sepa qué es Mueca, quién debería llamar, incluso ignore que quizá no llamen porque tienen motivos para no hacerlo. Por ejemplo, que consideren esa llamada una pérdida de tiempo.
    Y qué me dicen de su crítica a la improvisación y la falta de cabeza mientras sigue defendiendo eso denominado Septenio. Incluso creo percibir que criticar Septenio es considerado como algo malo. Uuuuuuh! Qué miedo.

  5. Septenionito Says:

    ¡Ups! Perdón. Escribí mal mi nombre.
    Un saludo de Septenionito

  6. buaxam Says:

    ¡¡Nos descubrieron…; por fin nos descubrieron!!
    Les Luthiers

  7. elintenso Says:

    Un mingafría este Alberto Delgado que diría un amigo. Vive en su torre de marfil, poco se puede esperar. Que no hable mucho.
    Nuevos proyectos? Ni mu. Alguien dirá es que no hay dinero. Desde cuándo para los nuevos proyectos se necesita dinero? Uy, quería decir nuevas ideas. Perdón.

  8. dulce Xerach Says:

    Alberto me comentó ayer que en no sé qué blog de este fin de semana le habían tachado de ingenuo.

    Pensé que sería este buen blog de Eduardo, que supongo recordará cómo me sucedió a mi lo mismo en mis primeras entrevistas en el Cabildo: cándida e ingenua fue lo mejor que me dijeron..

    Aprovechando esta anécdota recordé el libro “Elogio y Refutación del Ingenio” de Jose Antonio Marina, y ahora que lo he releído por encima no quería dejar de enviarles un parrafito que me parece que viene al pelo:

    “…la etimología señala el parentesco de las palabras “ingenio” e “ingenuo”. Ambas significaban “innato”, “natural”, aunque “ingenio” se refería a las habilidades no aprendidas, mientras que “ingenuidad” era la espléndida facultad innata de ser libre”.

    Con el tiempo parece que ambas palabras han pasado a ser casi antónimos pero creo que aunque ahora la relación original entre ambas palabras no aparezca explícitamente sigue vigente en nuestro “inconsciente lingüistico” colectivo.

    Yo lo veo así, y creo que Alberto es un buen tipo, que sabe lo que hace, que es Músico y lleva toda la vida gestionando cultura desde uno y otro lado de la barrera y que no es un político, sino un gestor. Se podrá equivocar muchas veces, como me equivoqué yo, pero es una buena persona que hace -con las circunstancias que tenemos- lo que puede ( tal vez siempre se puede hacer un poco más, pero creo que estamos en una situación muy muy complicada ).

    Lo de las listas, creo que los que han escrito aquí, algunos, lo interpretan de manera extrema. es cierto que Alberto no distingue entre ideas y colores políticos ni críticas -como tampoco lo hacía yo- a la hora de aprobar proyectos, ayudas, patrocinios, etc. Nosotros dos, Alberto y yo, sí que conocemos a otros que sí vetan, en otras instituciones publicas y privadas. Y el veto es algo que a ambos nos levanta el estómago.

    No creo que Alberto Delgado necesite que nadie lo defienda, y de hecho no suelo hacerlo pero hoy me apeteció escribir así en este blog que admiro.

  9. bien Says:

    personalmente, agradecido del comentario de Dulce Xerach.

  10. Arrabal Says:

    Puede tener razón Dulce Xerach en que ni ella ni Delgado vetan a nadie. Pero si es verdad que al menos ella promovió a sus allegados.

  11. elintenso Says:

    Ah, yo pensaba que se trataba de hablar de ideas de cómo sacar la Cultura en Canarias del agujero dónde la meten año sí y año también. Si se trata de hablar de allegados y mantenidos, me da que tengo que hablar muy poco. Nada.

  12. Rafa Says:

    Si ese es el tema que le pregunten a los asistentes y ponentes de “Desafios de la Cultura en el Siglo 21″. Eso si que fué acojonante.

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