Un año de narrativa en Canarias

A MODO DE INTRODUCCIÓN

No están todos los que deberían de estar pero sí aquellos que leímos y que conocimos a lo largo de un año que tan productivo ha resultado para las letras canarias. Nuestro objetivo es pues visualizar este fenómeno insólitamente fértil en unos tiempos donde la crisis parece indicar lo contrario. A vista de pájaro, y a modo de ráfagas, proponemos un repaso urgente a lo más destacado, a nuestro juicio, del 2013. Meses en el que hemos asistido al nacimiento de nuevas apuestas editoriales, a la consolidación de la novela de género en el archipiélago; a la publicación de novedades firmadas por escritores veteranos y noveles dentro y fuera de las islas; a encuentros y festivales literarios. También, desgraciadamente, a las ausencias de escritores muy vinculados con las islas como José Luis Sampedro y el senegalés El Hadji Amadou Ndoye; así como del abogado y escritor Miguel Ángel Díaz Palarea; Ricardo Lezcano y el profesor Enrique Fernández Caldas. Y aunque no tuvieron vinculación con la literatura: Vicky Penfold, José Pedro Pérez y el empresario Roberto Gutiérrez, entre otros.

HECHOS

* El Día de las Letras Canarias estuvo dedicado a José de Viera y Clavijo, de quien se celebró con una serie de actos austeros su centenario así como el proyecto de publicar  su obra completa en Ediciones Idea, trabajo que coordina el profesor de la Universidad de La Laguna, Rafael Padrón.

* En septiembre de este año se desarrolló con éxito de público la primera edición de Periplo. Festival Internacional de Literatura de Viaje y Aventuras en el Puerto de la Cruz. Se celebró también las segunda y tercera edición de Santa Cruz, ciudad leída con paneles diseminados por la capital tinerfeña en los que se reprodujeron fragmentos de novelas y cuentos y poemas escritos por autores nacidos y/o residentes en las islas, así como LuchaLibro, un original concurso de improvisación literaria. Tuvimos la suerte de asistir a un nuevo encuentro de NNegra de Arona, que en esta ocasión estuvo dedicado a la presencia de las escritoras en el género negro y criminal y tiene lugar el XVIII Festival Internacional del Cuento de Los Silos.

* Desaparece en Tenerife, tras acoger tres ediciones, el Salón Internacional del Libro Africano (SILA) que se traslada –en una maniobra confusa que genera mucho ruido en los medios locales– a la capital grancanaria, donde se desarrollan su cuarta y quinta edición.

* La revista La Página celebra la publicación de su número 100. Mientras, en TEA Tenerife Espacio de las Artes se exhibe hasta el 13 de abril la exposición Syntaxis: una aventura creadora en la que se repasa los diez años de esta publicación.

* Abrimos antes de Navidad botellas de vino espumoso cuando Alexis Ravelo obtiene el XXVII Premio Ciudad de Getafe con La última tumba, novela que publica Edaf. También cuando Javier Hernández Velázquez resulta finalista con Un camino a través del infierno en el Premio Internacional de Novela Negra L’H Confidencial. En el territorio de la novela policíaca, José Luis Correa publica Blue Christmas (Alba Editorial), última entrega de la serie protagonizada por su peculiar detective privado Ricardo Blanco.

* Se quiso encerrar la Feria del Libro en las dos capitales canarias entre cuatro paredes aunque al final, afortunadamente, venció la sensatez en este archipiélago tan poco acostumbrado a la sensatez.

* Aún nos preguntamos las razones que provocaron que la Fundación CajaCanarias no revelara este año los nombres del jurado del Premio de Novela Benito Pérez Armas, dotado con 12.000 euros y la publicación de la novela ganadora, que recayó En el reino de los cielos, de Silvia García.

* Ediciones Escalera publica Off the Road, de Carolyn Cassady con traducción de Ana Lima y Alexis Ravelo y Thalía Rodríguez nos ofrecen la versión en español de El viento y la sangre, un feliz descubrimiento de un oscuro escritor policíaco, M. A. West, y que se editó en la colección Negra, en Navona Editorial. Mario Domínguez Parra presenta, entre otros trabajos, su traducción al inglés de poemas de Miguel Ángel Galindo y la profesora Elena Sánchez Hernández se ocupó de la traducción y edición de Generaciones (Siníndice Editorial) de Rachel Korn.

* 2013 fue también el año del parto lento y difícil de dos proyectos editoriales: Neys Books y Attikus. Attikus ya iniciado su singladura con la publicación on line de la novela El destino de las palabras, de Santiago Gil. El escritor Luis León Barreto presentó en la Nueva Asociación Canaria para la Edición (NACE) su última novela: Carnaval de indianos.

* Se produce el cese de Alberto Delgado como viceconsejero de Cultura al transformarse el departamento en Dirección General de Cultura, al frente ahora de Xerach Gutiérrez Ortega.

* El poeta y escritor Roberto García de Mesa presenta en el teatro Guimerá, en Santa Cruz de Tenerife, el libro El teatro de vanguardia en Canarias (1924-1936). El editor y escritor Ánghel Morales reunió algunos de sus artículos de opinión en el volumen La voz de Ánghel (colección La quinta columna, Ediciones Idea) y la escritora Elena Morales da a conocer la trilogía Somos solidarios (Minitextos para sonreír, Minitextos para comprometidos y Minitextos de amor y lujuria) en la que colaboraron 87 escritores, y que destinó el dinero recaudado en ventas a causas humanitarias y fines sociales a través de las ONG Cruz Roja Española, Amnistía Internacional y Ayuda en acción.

* La colección Letras Hispánicas (Cátedra) publica El espejo de tinta, de Andrés Sánchez Robayna.

* El escritor y periodista Juan Cruz presenta en 2013 Viaje a las islas Canarias (Aguilar); Especies en extinción (Tusquets) y Jaime Salinas. El oficio del editor (Alfaguara). Alberto Vázquez Figueroa, Bimini (Martínez Roca) y Sabas Martín regresa con El farallón (Huerga & Fierro) a su isla Nacaria, territorio legendario y “cifra y resumen de Canarias”, donde denuncia las prospecciones petrolíferas que se hacen en su mar insular y las nefastas consecuencias que ocasiona.

* Entre otros volúmenes de cuentos, pudimos leer Ellas tampoco saben por qué, de María Gutiérrez; ¿Quién cuidará de mis guardianes?, de Alba Sabina Pérez; Breves atajos, de Agustín Díaz Pacheco; Cuentos para ser leídos antes de dormir, de Jesús Villanueva; Hari Maguada, de Carmen María Reyes Santana y El rastro de la mujer caracol, de Alain Barreto Hernández.

* Se publican los tres primeros volúmenes de Historias de guanches, obra gráfica de Juan Carlos Mora en la que se reinterpreta en clave de cómic y a todo color  la vida de Beneharo. El Mencey de Anaga; Bencomo. El Mencey de Tahoro y Bentor. El heredero.

* En cuanto a poesía, Rafael José Díaz publica La crepitación. Poesía reunida (1991-2006);  Iván Cabrera Cartaya obtiene con Creencias de verano el VI Premio de Poesía Antonio Gala y MAPFRE Guanarteme publica Para ser recitado al viento sibilante seguido de Sangre de eclipse (2013),  de Cabrera Cartaya y Sergio Barreto. Agustín Gajate propone Achicaxna xaxo agual. Palabra de momia paria, 110 poemas y nueve silencios escritos en la lengua de los primeros pobladores de Canarias con su correspondiente traducción al español. Daniel Díaz Bernal obtiene, por otro lado, el Premio de Poesía Pedro García Cabrera que convoca la Fundación CajaCanarias con El tiempo de los lemures y Víctor Álamo de la Rosa presenta El equilibrista y los jardines. Como desafío y grito de supervivencia, los animales de Zoo.0 presentan Poeta hermafrodita, entre otras acciones poéticas. No quisiéramos olvidar, aunque se publicara en 2012, La mentira del agua y Alfabeto celoso (obra completa), de Julián Herraiz, voz poética de la década de los cuarenta que rescataron del olvido Luisa Chico Pérez, Fermín Domínguez Santana y Javier Rivero Grandoso. El libro está publicado en la colección Ministerio del aire de Ediciones La Palma.

* Víctor Conde, álter ego literario de Alfredo Moreno Santana, publica La ópera de la mente (Scyla eBooks); He oído a los mares gritar mi nombre (Dolmen Editorial); Miniaturizados (Hidra) y es antólogo de Los Monstruos del mar (Nowtilus). Mientras, en la colección G21 Narrativa Canaria Actual se publicaron los títulos El centro del gran desconocido, de Eduardo Montelongo; Julia y la guillotina, de Jonathan Allen; Si hubieras estado aquí, Cecilia Domínguez Luis; El peso del tiempo, de Gerardo Sánchez; Cinco mujeres que no subirán al cielo, de Juan Andrés Herrera y Mujeres en la encrucijada, de Javier Marrero.

* Ediciones Idea recupera al escritor Ángel Sánchez con la publicación de Calibán. Y Carlos Álvarez reedita La pluma del arcángel (Hora antes Editorial), una novela histórica por la que el escritor obtuvo el Premio Benito Pérez Armas en 1998. Novela histórica es también 1797. Piratas del Atlántico (Centro de la Cultura Popular Canaria), de Luis Medina Enciso y El judío que quiso ser ario (Éride Ediciones) de Enrique Reyes. Y en Ediciones Aguere/Idea se publican los thrillers El envío turco, de Pilar Escalona, La fortaleza del tiempo, de Edward T. Riker,  y La piel de la Lefaa, de Juan R. Tramunt; Con esta misma sintonía se edita Los privilegiados del azar (Chiado Editorial), de Carlos Alberto Felipe Martell. Se publica también El samurai desnudo (Editorial ERDE), de Manuel Pérez Cedrés; Paté de foie (Los 80 pasan factura), de Guillermo Alemán; Caídos del suelo (colección Narrativa, Baile del Sol Ediciones), de Ramón Betancor; Yo maté a Rajoy (colección Serie Negra, Baile del Sol) de Juan Carlos Pérez; … En el aire queda de Damián H. Estétevez y Las gaviotas y el buitre, de Diego I. Ramírez, las dos en Ediciones Aguere/Idea.

* Coinciden además dos novelas en cuyo título se confiesa que se ama a las mujeres. El hombre que ama a Gene Tierney (La Página Ediciones), de Daniel María; y El hombre que se enamoró de Sasha Grey (Cultiva Libros), de Antonio Lorenzo Gómez Charlín. Daniel María obtiene el Premio Joven Promesa Periodismo Cultural; Agustín Ravina Pisaca presenta Mi Habana en el recuerdo, obra en la que se narra cómo dos emigrantes canarios logran prosperar en Cuba antes del triunfo de la revolución castrista. Sonia Díaz Oval debuta en Ediciones Idea con Entre bambalinas.

* El Gobierno de Canarias, a través de su Dirección General de Cooperación y Patrimonio Cultural, organiza el ciclo literario Entre palabras. Se produce el I Encuentro de Joven Crítica Canaria, que tiene lugar en n la Sala Domingo Pérez Minik de la Biblioteca Pública del Estado de Santa Cruz de Tenerife.

Somos conscientes que faltan muchos más títulos, pero su ausencia es involuntaria. Nuestra intención es la de orientar y ofrecer una selección de las diez novelas que, a nuestro juicio, resultaron de las más atractivas del 2013.

¿POR QUÉ ESTOS TÍTULOS?

- La estrategia del pequinés (Alrevés Editorial), de Alexis Ravelo.- porque este año ha sido el año de Alexis Ravelo, del que leo en 2013 Morir despacio (Mercursio Editorial), cuarta entrega de su peculiar investigador ocasional Eladio Monroy; Las estrategia del pequinés, título en el que se aparta de la tendencia negrocriminal en la que se ha escorado el género en España, y novela dura y contundente, feroz y despiadada por la que pululan personajes del arrollo, marcados con el signo de los perdedores; y La última tumba (colección Voz y tiempo, Editorial Edaf) con la que obtuvo un más que merecido XXVII Premio Ciudad de Getafe.

- Un camino a través del infierno (M.A.R. Editor), de Javier Hernández Velázquez.- porque el escritor rompe con su producción anterior y presenta un título repleto de guiños y sano (¿sano?) sentido del humor, claves de eso que denomino literatura pulp pop. La novela propone además una historia en la que se mueve como pez en el agua su protagonista, Mat Fernández, un personaje modelado con la forma de Mike Hammer más que de Lew Archer. Un detective de gatillo fácil y muy orgulloso de vivir en provincias.

- Sorimba (Editorial Puentepalo) María Jesús Alvarado.- porque ha sido uno de los escasos títulos leídos este año que va por otros derroteros, que se preocupa en reivindicar el mundo rural en una isla, El Hierro, donde todavía es posible oler el perfume de la naturaleza. Sorimba es un título raro si quieren entre tanta literatura urbana. Otra forma de entender la realidad que nos rodea.

- Isla nada (Tropo Editores) Víctor Álamo de la Rosa.- porque Víctor Álamo de la Rosa pone punto y final a su ciclo narrativo de Isla Menor. Pulveriza el universo que, hasta ahora, caracterizaba su producción narrativa y despierta la curiosidad del lector en descubrir por dónde irán sus próximas aventuras literarias. Sexo y naturaleza salvaje son solo algunos de los elementos con los que juega el escritor en la despedida amarga de su territorio imaginario, muy próximo al de su isla natal, El Hierro.

- El zahorí del Valbanera (colección: Narrativa, Baile del Sol Ediciones), de Juan Manuel García Ramos.- porque el escritor reivindica la figura del emigrante canario con emoción y distancia. El protagonista de la novela está inspirado en uno de los abuelos del escritor y, al mismo tiempo, es un relato en el que se describe lo que fueron capaces de hacer aquellos hombres y mujeres que aprendieron a vivir en tierras extrañas que terminaron haciendo suya. Como explica el autor de la obra, El zahorí del Valbanera huye de idealizar a su personaje protagonista aunque, destaca, “la emigración siempre es rebeldía”.

- Johanna (colección: Sitio de Fuego, Baile del Sol Ediciones) de Eduardo Montelongo.- porque leo una atractiva historia de piratas. Libre y sin prejuicios, que me sabe a La isla del tesoro, de Robert Louis Stevenson; La taza de oro, de John Steinbeck y a El negrero de Lino Novás. Una novela, en definitiva, que hace transportar al lector a otros mundos, a navegar por los mares y a desembarcar en islas y continentes que están por conquistar.

- Pasa la tormenta (colección: Serie Negra, Baile del Sol Ediciones), de Tomás Felipe.- porque logra algo insólito: fusionar dos géneros aparentemente diferentes como son la ciencia ficción y la novela policiaca. El resultado final es una divertidísima historia que transcurre en una futurista Las Palmas de Gran Canaria dividida en sectores. En uno de ellos viven pobres que son muy pobres y en otro ricos que son demasiado ricos. De fondo, un caso de triste actualidad: la emigración irregular.

- Si hubieras estado aquí (colección: G21 Narrativa Canaria Actual, Ediciones Aguere/Idea), Cecilia Domínguez Luis.- porque recupera al territorio de la narrativa a una escritora que articula un drama familiar y generacional dando voz a sus protagonistas a través de diarios, blogs… Confesiones privadas que se revelan a un lector que se siente incómodo en su papel de voyeur.

- La Casa Lercaro (Roca Editorial), Mariano Gambín.- porque el escritor termina su ya conocida trilogía de La Laguna, Ira Dei, manejándose con comodidad por el thriller con un lenguaje sencillo, al servicio de una historia donde lo que importa es la acción. En su último título planean así fantasmas, ladrones de altos vuelos y el compacto círculo de protagonistas de las dos entregas anteriores dispuesto a resolver ¿su último misterio?

- La felicidad amarga (Ediciones Irreverentes), Pablo Martín Carbajal.- porque se trata de un relato de descubrimiento que propone un sutil e introspectivo itinerario por el pasado de su protagonista. A modo de muñecas rusas, el escritor va revelando  con delicado pudor las interioridades de su personaje para concluir en un final en el que pone de manifiesto lo que significa el dolor de la victoria. O lo que es lo mismo, aceptarse cada uno como lo que es.

(*) Este artículo se publica este domingo, 29 de diciembre, en El Perseguidor, Diario de Avisos. En el blog hemos podido actualizar datos que omitimos, involuntariamente, en la versión de papel. Como en ediciones pasadas, agradecemos aportaciones para hacer más exacto lo que solo ha pretendido ser un balance de un año, insistimos, insólitamente productivo en las letras canarias.

Saludos, la esperanza me mantiene, desde este lado del ordenador.

19 Responses to “Un año de narrativa en Canarias”

  1. Maite Lacave Says:

    Muy oportuno, estaba a punto de preguntarte como se llama el libro de Juan Manuel Gracía Ramos sobre el Valbanera. Gracias

  2. admin Says:

    Gracias por visitarnos. Un abrazo.

  3. Iván Cabrera Cartaya Says:

    Hola Eduardo, me ha gustado mucho. Solo, y no quiero ser yoísta ni egocéntrico, te anoto en poesía la edición de “Creencias de verano” (2013), VI Premio de Poesía Antonio Gala, de Iván Cabrera Cartaya; y “Para ser recitado al viento sibilante” seguido de “Sangre de eclipse” (2013), editado por MAPFRA Guanarteme con motivo de las actividades del Día del Libro, que es un libro con poemas míos y del poeta Sergio Barreto. Un fuerte abrazo y lo mejor para estas fiestas. Es normal que se queden títulos y a mí se me olvidan otros seguro, pero espero que sus autores dejen por aquí los nombres de sus obras para completar el inventario.

  4. A.BARRETO.HERNÁNDEZ Says:

    ¿¿ https://www.facebook.com/lamujercaracol ??

  5. admin Says:

    Estimado Iván, tienes toda la razón. Corrijo en el blog rápidamente el olvido involuntario.

  6. Rafael-José Díaz Says:

    Estimado Eduardo: yo, que tampoco soy yoísta ni laísta, quiero hacerle llegar la siguiente observación. Me encanta que mencione usted, ¡y en primer lugar!, la publicación de mi poesía reunida. No deja de asombrarme, sin embargo, que esta información venga bajo el título general “Un año de narrativa en Canarias”. Estimado amigo: la poesía no es parte de la narrativa, no es un subgénero narrativo. Así que: ¿por qué no haber titulado su artículo “Un año de literatura en Canarias”? Creo que trata usted muy injustamente a la poesía (en general) en este recopilatorio de acontecimientos. Esto es lo primero. Lo segundo es que mi libro, que se siente entrañablemente bien entre los poemas guanches-amazigh-beréberes del cuate Gajate y, cómo no, entre las “bellesuras” de poemas de Víctor Álamo de la Rosa, poeta a su pesar y eximio novelista de la nada, mi libro, dígole, no se publicó en 2013… sino en diciembre de 2012. Este nimio detalle exige, por mor de la fidelidad cronológica, que mi libro sea extraído de esa variada y generosa lista confeccionada por usted y que sufra así, me temo, el desengaño de no verse más en tan buena compañía o compaña como la descrita. Por último, y aunque no es un asunto que tenga demasiado que ver con esta entrada suya, permítame la pedantería de plantearle la siguiente cuestión: ¿por qué, si en las dos ediciones anteriores de “Santa Cruz leída” se incluyó en los paneles rambleros a narradores vivos, jóvenes y guapos, en cambio, para esta tercera edición coordinada por usted, solo ha tenido usted a bien escoger a poetas muertos, muchos de ellos excelentes, pero cuya difunta circunstancia podría hacer pensar a nuestros jóvenes lectores callejeros de Santa Pus que la poesía es algo muerto, un mundo de palabras muertas escritas por muertos para lectores muertos? Un saludo y feliz 2014.

  7. admin Says:

    Estimado Rafael, efectivamente, es un repaso –y muy general–a lo que narrativamente se ha producido en las islas. Creo que es la tercera ocasión en que elaboro una lista de esta clase en este su blog.
    Lamento la duda que le asalta y de la que soy único responsable. Sé que poesía no es narrativa. Y pequé por osado en ofrecer unas breves pinceladas de lo que se ha publicado este año en este género literario.
    Le agradezco, por otro lado, que me tire de las orejas y recuerde que su libro es de 2012 aunque le informo que hay otros títulos que se citan en el post–estos sí de narrativa– que fueron publicados en el que aún sigue siendo oficialmente el año pasado pero que leí o tuve conocimiento de ellos en 2013.
    Por último, Rafael, imagino que si hay nuevas ediciones de Santa Cruz, ciudad leída se incluirán poemas o fragmentos de poemas de poetas que aún están entre nosotros… Pero ¡ay! por ahora solo sé que no sé nada. Todo es incertidumbre aunque gracias a poetas como los que se reproducen en los paneles de esta tercera edición y de poetas que afortunadamente están vivos como usted, me he dado cuenta que la poesía no es algo muerto a pesar de que muchas de estas palabras estén escritas por gente que sí está muerta.
    Un abrazo y que tenga –tengas– también un feliz 2014.

  8. Rafael-José Díaz Says:

    Gracias, amigo Eduardo, por tus cariñosas palabras. Eran las mías solo un par de pillas apostillas. Desde luego, están más vivos algunos de esos poetas muertos que muchos de nuestros actuales poetas vivos. Y no diré más, que luego todo el mundo se me echa encima. Claro que la poesía está viva, pero la de verdad, un poema de Nicanor Parra, otro de Enrique Lihn, otro de Jorge Teillier (la poesía será chilena o no será), etcétera. Pero no las paparruchadas que algunos quieren hacer pasar por poesía. No, no daré nombres en esta ocasión. Bueno, pues lo dicho: sin taxis y a las locas, digo: que lo pases muy bien y que 2014 sea un año bueno de verdad.

  9. admin Says:

    Rafael, te deseo lo mismo. A pasarlo bien y que 2014 sea un año bueno de verdad.

  10. Iván Cabrera Cartaya Says:

    Añado otros tres nombre de grandes poetas chilenos a la lista de Rafa: Raúl Zurita, Óscar Hahn y Diego Maquieira, por no citar a Gonzalo Rojas. Sí, parece que en el siglo pasado la poesía fue chilena o polaca, griega o portuguesa, o no fue. Gracias, Eduardo, por haberme incluido finalmente. Saludos a todos y buenas lecturas.

  11. De un lector canarión Says:

    Difusión cultural, paciencia, humildad, constancia, resistencia en las trincheras, honradez, vocación, tolerancia, respeto… Sr. Eduardo. Con semejantes valores, que lo sepa, jamás optará usted al Premio Canarias, aunque supongo que le da igual y por eso me gusta. Feliz año y gracias mil por su valioso trabajo periodístico y por creer en un “gatherheid” cultural, tan plural como necesario y posible en las islas.

  12. admin Says:

    De lector a lector, cosmopolitas y siempre en la carretera, gracias por tan generosas palabras.

  13. Miguel Aguerralde Says:

    Bonita y extensa relación. Yo le animaría, por qué no, a incluir en esta lista a talentos jóvenes como Macu Marrero, Paula Lizarra, Mélany Garzón, Leandro Pinto, Rayco Cruz o yo mismo, que, humildemente, he sacado dos novelas este año. Porque creo que a los analistas canarios les falta, en general, al hablar de literatos insulares, levantar un poco la voz para aupar a los que empezamos.
    Un abrazo y feliz 2014.

  14. admin Says:

    Agradezco esos nombre aunque lamentablemente no he podido leer ni tuve conocimiento de ellos hasta su comentario. Espero que se acuerden de este su blog en 2014. ¡Un abrazo y feliz año!

  15. Rafael-José Díaz Says:

    Yo, estimado administrador, le ruego que incluya en su lista a una sobrina mía que acaba de ganar un premio de redacción en su instituto; si, además, puede incluir a un vecino que me ha dado a leer unos cuantos poemas finos, auparía usted, como se merece, a los que empiezan. Pues los que empiezan están ahí para que los aupemos; y quienes no aupamos no merecemos ni siquiera haber empezado. Un saludo, che.

  16. Mario Domínguez Parra Says:

    Eduardo, feliz año y gracias por la mención y tu generosidad. Un abrazo.

  17. admin Says:

    Mario un abrazo y gracias, en todo caso, a tí.

  18. El anónimo escribidor Says:

    Y digo yo: ¿el poeta Rafael-José Díaz, del que tengo el gusto de leer unos pésimos relatos en su blog, siempre es así? No sé si será buen poeta o malo, dejemos que pase el tiempo. Pero narrador, esa prosa poética llena de lirismo y de evocación, metafísica, oh, dios mío. En fin, voy a lo que voy: ¿es siempre tan pedante y desagradable? Y ¿a quién le importa su opinión? Me ha parecido de lo más desafortunado el comentario sobre la sobrina y el pretencioso -y fallido- juego de palabras con aupar. Dicho esto: ¿se ha leído a estos autores? Ah, no, claro, no son parte del establishment. Él decide quién es quién aupado en sus premios, traducciones, y demás. Es decir, que este señor, don Rafael, es como el nuevo Manuel Padorno, o el nuevo Agustín, o el nuevo Pedro Perdomo, o mejor aún, la nueva Pino, oh, no, aupémoslo: ¡es el nuevo Whitman! Pero esas hojas que se fuma el señor Rafael no son de tabaco, porque para saltar con su chiste de tertulia de pedantes y compadreo latino hay que tener poca clase, social, se entiende, la que tan bien explicaba Todorov. Bueno, le dejo porque entré por un casual a su blog, que leo de vez en cuando, y me tropiezo OTRO comentario infumable de este personaje. Y no te olvides de citar su libro y de ponerlo en tu próxima antología o tendrás que sufrirle más comentarios jococos y retóricos. Esta gente de dónde sale, de St. James, como poco.

  19. El anónimo escribidor Says:

    Por cierto, releyendo su artículo con paciencia: como decía mi adorado -y seguirá diciendo, espero que por muchos años- Don Eugenio Padorno: es la forma, hijo, la forma. De todas estas novelas reseñadas al final de su artículo, querido Eduardo, me falta conocer cuán talentosas son, qué calidad narrativa poseen, su tono, su dominio de la forma, etc. Porque poner a Gambín, a Ravelo y a alguno más porque escriben entretenidas historias es poner el listón bajo. No estoy molesto con usted porque es su blog y en su blog pone lo que usted quiere, pero solo digo que entre lo que le dijo el tal Aguerralde y la respuesta del nuevo Horacio de las letras canarias, no hay tanta distancia como pudiera parecer. En fin, un abrazo desde mi isla anónima y tenga usted buen fin de semana, pero un tirón de orejas a Horatino -por Jovino- por faltón hubiera estado bien. Ah: y todos esos poetas chilenos son mejores poetas, a todas luces, que Horatino, y ya solo por eso está bien que no lo aupen y le dejen con ese sufrido complejo de Hamlet que tiene respecto a Andrés Sánchez Robayna: Andrés es todavía mejor crítico literario que él por más que Horatino lo intente suplantar a base de acidez.

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