A vueltas una vez más con el Cine Víctor

La excusa del Cabildo de Tenerife no deja de ser peregrina, o surrealista en una islas tan surrealistas como son estas en las que habitamos. La excusa del cierre anunciado del Víctor (aunque yo prefiero hablar de abandono de la gestión) porque le cuesta (habrá que recordarles que nos cuesta a todos los contribuyentes) 100.000 euros anuales, no tiene ningún valor cuando me consta que no ha habido ningún tipo de negociación con los dueños de la sala para evitar su condena.

 

Lo más triste del caso, y lo que pone de manifiesto el calibre intelectual de quienes gestionan la cultura desde determinadas administraciones públicas locales, es que no se les cae la cara de vergüenza ante tamaño disparate cultural, protegiendo sus conciencias con el escudo de Tenerife Espacio de las Artes (TEA), centro al que flaco favor le han hecho al relacionarlo con la disparatada decisión de cerrar (espero que provisionalmente) el Víctor.

 

Hace años escribí en el Diario de Avisos un artículo elogioso con el Cabildo tinerfeño cuando anunció que con el dinero de todos nosotros iba a abrir una sala que había permanecido cerrada tras finalizar su etapa como cine comercial. Cuatro años después condeno su decisión de dejarlo en la cuneta e ignorar con una arrogancia que la verdad no debe de quitarle el sueño al espontáneo movimiento ciudadano que ha surgido para expresar su indignación, su decisión de protagonizar una de las más nefastas decisiones que en materia cultural se han realizado en esta comunidad autónoma.

 

Partiendo de la base que se lo han hecho muy mal desde el Cabildo, recurriendo a excusas tan peregrinas como la de que contamos con el TEA, TEA… es necesario que quienes han perpetrado tamaño disparate reflexionen sobre ello y busquen (no busques, como me han dicho, aunque me romperé la cabeza para encontrar alternativas) soluciones. Soluciones para salvar una sala que asiste a su cierre definitivo con estrenos de alfombra (apolillada) roja como será el que acoja el próximo 19 de diciembre con Guarapo, de Santiago y Teodoro Ríos, cineastas que no han dado todavía su versión con respecto al futuro de este cine. Cine que acogió hace ahora veinte años el estreno de esta película que habla de ricos y pobres. O de caciques y campesinos en la Gomera de los años 40.

 

Caciques y populacho.

 

En fin, ¿no les parece demasiado actual el tema de esta película?

No Responses to “A vueltas una vez más con el Cine Víctor”

  1. geatenerife Says:

    Hace apenas un par de horas, me encontré de regreso a casa con un grupo de personas, en la puerta del Cine Victor que son artífice y motor de un movimiento espontáneo de ciudadanos (populacho), al que por supuesto me adhiero, contra el cierre del Victor. Decidí quedarme un rato a conocerlos y de paso informarme un poco más de las acciones que se podian llevar a cabo para mostrar la repulsa ante esta decisión tan desafortunada y que pone de manifiesto el nivel cultural de nuestros dirigentes (caciques), que parecen olvidar que hemos cambiado de siglo, que pagamos impuestos de forma cívica para el mantenimiento de una sociedad avanzada que se merece unos gestores culturales de mentes abiertas para el momento de la historia de nuestra ciudad en el que nos encontramos. Tenemos tranvia (que se cargó un punto emblemático de encuentro), tenemos un Auditorio, obra impresionante donde las haya, ( de dudosa acústica y dificil accesibilidad), y bueno, no quiero que me tachen de pesimista pues tambien hay que valorar la rentabilidad de dicha inversiones…..!!!!!!.

    Parece ser que un local con la historia y el diseño que tiene el Cine Victor no puede ser recuperado y seguir siendo el distintivo de una ciudad culta y avanzada. La cultura, se puede ubicar, ya veremos donde, total para lo que hay que ver en ese Cine, y el local, pues la verdad, con esas dimensiones y su situación ofrece un sinfín de posibilidades muchísimo más rentables para algunos, pero seguro que no para los contribuyentes.

  2. Nicolás Says:

    Lo que está pasando con el Víctor es un mal que se extiende sobre este tipo de salas. Este es el momento crítico en que parece que forman parte más del pasado que del presente. Sin embargo, en veinte o treinta años, poder ver películas en una sala como esa, tener una sala como esa en la ciudad, va a ser todo un lujo y un orgullo. No se trata de nostalgia del cine. Hay que verlo como una apuesta de futuro.

  3. Pedro Marquez Says:

    Me parecen muy acertadas las palabras de Nicolás. Sería un lujo tener ese lugar único como una ventana al pasado. Por cierto, me ha gustado mucho un articulo sobre el cine víctor que salió el lunes pasado en el Diario de Avisos. También se hablaba del Cine Atalnte ¿lo leyeron?

    No al cierre de esta magnifica sala.

    Todos podremos reanimarla…

    Buen trabajo de concienciación desde este blog.

  4. editorescobillon Says:

    El artículo al que haces referencia es del cieasta Miguel Morales, uno de los pocos que se han mojado con respecto al futuro de la sala. Gracias por tu comentario.

  5. NARUTO Says:

    Me temo que el próximo año vamos a tener que gritar mucho.

    NO AL CIERRE DEL CINE VÍCTOR!

    NO AL CIERRE DEL GUIMERÁ!

    NO AL PARÓN CULTURAL!!!

  6. editorescobillon Says:

    Cuánta razón tienes Naruto, ¡¡¡más madera, que es la crisis!!!

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