Javier González de Durana estrena blog en la ‘web’ del Museo Cristóbal Balenciaga
Tal y como informamos hace uno días, Javier González de Durana retoma su afortunada etapa bloguera tras el cierre no anunciado de El baile y las cadenas, bitácora participativa que gestionó durante su etapa al frente de TEA Tenerife Espacio de las Artes.
La nueva aventura virtual que inicia de Durana se aloja en la web del Museo Cristóbal Balenciaga .
Desde el remoto archipiélago canario le envíamos un fuerte abrazo y recomendamos su inclusión en la lista de favoritos.
Saludos, cortos de momento, desde este lado del ordenador.
Septiembre 15th, 2011 at 22:52
…eso, eso, que “vuelva a casa”…
Septiembre 15th, 2011 at 23:04
Más que Pablo debería haber firmado como ET, lo digo por aquello de “mi caaaasa…”
Septiembre 17th, 2011 at 8:34
Muchas gracias por la difusión y por ese abrazo, Eduardo. Con este “La Fuite des Heures”, nombre de un perfume inventado por Balenciaga, pretendo seguir la estela de “El baile y las cadenas”, si bien con una orientación más vertida hacia la creación de moda, pero estrechamente ligada al arte (de la cual la moda forma parte) y el pensamiento cultural. Si echas una mirada en el blog – bueno, tú o cualquiera de tus lectores-, verás que el último post se refiere al vestuario de “La piel que habito”, reciente peli de Almodóvar, con el lanzaroteño Paco Delgado al frente y la colaboración de Jean Paul Gaultier. La semana que viene colgaré otro que relaciona, ¡oh sorpresa!, los dibujos negros del pintor tinerfeño Julio Blancas con algunos vestidos negros del diseñador japonés Issey Miyake, gracias a un diálogo que ha establecido la tienda Making Things, de Madrid, y aprovechando la primera expo del genial Julio en Madrid, en la Galería Nieves Fernández.
Como ves, Eduardo, no me desvinculo de Canarias, mal que le pene a Pablo, a quien recomiendo que para olvidarme, ya que no sabe hacer rentable un negocio por incompetente, al menos se beba las botellas a su disposición y coja una ola que lo lleve hasta la Antártida y allí, como Frankenstein, se disuelva entre los hielos eternos.
Un abrazo largo desde este lado del Atlántico. Nos veremos.
Septiembre 17th, 2011 at 11:46
Un fuerte abrazo, Javier.