El lado poético de Pedro Juan Gutiérrez

Tras la publicación de Trilogía sucia de La Habana, el nombre de Pedro Juan Gutiérrez resonó, más que sonó, en la república de las letras en español. Conjunto de relatos impíos, crudos, también golfos y alguno hasta cruelmente divertido, los libros que han ido apareciendo del autor han supuesto una agradecida corriente de, más que fresco, enrarecido aire en el panorama literario que se escribe en esta lengua en la actualidad.

Las novelas y los cuentos de Pedro Juan Gutiérrez reflejan cómo vive el pueblo cubano, y reproduce con atinado sentido del oído, el habla coloquial cubana del barrio de Centro Habana, centro de operaciones y fuente de inspiración en la literatura del escritor, que refleja en sus historias a través de una variopinta galería de personajes que protagonizan tragicomedias que muestran sin ningún tipo de pudor la existencia miserable e indigente de sus protagonistas, aunque el escritor no renuncia a añadir entre tanta violencia larvada y la que termina por explosionar, un poso de ternura que desconcierta, así como un lirismo que Pedro Juan Gutiérrez explota y desarrolla en su obra poética, hasta ahora prácticamente desconocida en España, y que con la publicación de La línea oscura (Verbum) se pretende poner fin.

Seleccionados por el propio autor, los poemas que reúne este libro dan una visión de conjunto de la composición poética de Pedro Juan Gutiérrez, y permite observar cómo ha ido evolucionando como poeta en unos versos que abordan las mismas constantes de su narrativa, y que el mismo escritor y poeta resume en: furia y miedo… Elementos que combina con el sexo, otro de los grandes temas que aparecen reiteradamente en su producción literaria.

Poesía oscura e intimista, La línea oscura para los seguidores de Pedro Juan Gutiérrez es un afortunado descubrimiento que nos revela a un escritor que también tiene cintura para moverse en todos los géneros literarios sin imposturas, ya que si algo destaca en su literatura es la honestidad con  la que escribe tanto su descarnada prosa como descarnada poesía para contar lo que ve (y de la que da constancia en su narrativa) como lo que siente (que vuelca en su poesía).

¿Sufre algún tipo de desdoblamiento cuando escribe en uno u  otro género?

Pedro Juan Gutiérrez dice que no. Un no rotundo, que el lector comprobará cuando se enfrente a su trabajo poético. Una poesía que, como sus novelas y cuentos, a veces resulta brutal, cruda, muy oscura como ya nos advierte en el título de esta antología personal que recoge sus versos, para nada dispersos, escritos entre 1994 y 2014.

Así que merece la pena conocer y disfrutar con el alma en vilo la poesía de un escritor que escribe con lo que lleva dentro del corazón,  y no con lo que debe de dictarle la cabeza. Ahí, probablemente, resida la verdad que rezuma su obra y que conmueva y convenza con forma de canción o como relato ácido de una realidad que, como la ciudad a la que tanto ama y que ya es un personaje más de sus libros, La Habana, se desmorona.

NOTA: Pedro Juan Gutiérrez presente este viernes, 3 de junio en la librería Lemus, La Laguna, La línea oscura y su última novela, Fabián y el caos.

Saludos, es casi la hora, desde este lado del ordenador.

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