Mariano Mayer: “Las vanguardias han muerto”

Esta entrevista se realizó hace unos meses, cuando todo parecía tranquilo, cuando suponer lo que ahora estamos viviendo sonaba a chiste o al guión de una mala película de ciencia ficción. Durante la conversación con el poeta y comisario independiente Mariano Mayer (Buenos Aires, Argentina, 1971) se habló de muchas cosas aunque la charla se centró en su último trabajo Fluxus escrito. Actos textuales antes y después de Fluxus (Caja Negra, 2019,) una de las primeras antologías de textos Fluxus publicadas en español y que recoge ensayos,
entrevistas, conversaciones y piezas textuales que revelan las motivaciones generales de este movimiento en relación al arte de acción y sus intereses por extender el concepto arte-vida.

La publicación destaca los aportes teóricos y experienciales de más de treinta artistas vinculados a Fluxus como Esther Ferrer, Juan Hidalgo, Alison Knowles, La MonteYoung, Pauline Oliveros, Benjamin Patterson, Yoko Ono, Allan Kaprow, Oscar Masotta o Mieko Shiomi.

- ¿Qué lo lleva a trabajar en un libro de estas características?

“Fue un encargo de Caja Negra, una editorial joven que me propuso que hiciese una antología de textos Fluxus lo que me tomó mi tiempo ya que deseaba estudiar con objetividad la posibilidad de armar un libro con estas características. Desde un principio, el reto me pareció atractivo pero me di cuenta a medida que iba adentrándome en él que tenía poco que aportar a la gran cantidad de libros y catálogos que existen sobre Fluxus hasta que, fruto de las investigaciones y tras encontrar material textual muy valioso y diverso, pensé que sí que había un camino que llevaba a la confección de un libro”.

- ¿Cuál fue ese camino?

“Como Fluxus unificaba tantas cosas distintas –disputa teórica y creación artística; poner en escena textos para generar partituras o piezas de danza e incluso inventar metodologías para generar otras maneras de trabajar con la realidad junto a una reflexión teórica del happening, el arte conceptual y cómo experimentar con ese tipo de ideas– ese material me pareció lo suficientemente atractivo para incluirlo en el libro”.

- ¿Qué lugar cree que ocupa Fluxus en la Historia del Arte?

“Pienso que un lugar interesante porque nace en un momento en el que los artistas demandan mitos, estamos a finales de los años 50, fin y comienzo de una década en el que se ubican estas prácticas que cuestionan qué ideas de las vanguardias se querían llevar adelante. Ellos apostaron –y con bastante claridad– por demoler el mito romántico de las vanguardias”.

- ¿Y cómo lo hacen?

“Lanzando un basta ya a la creatividad y al show por encima de la obra que fue tan determinante en los movimientos artísticos anteriores. Hay un inicio interesante a partir del letrismo y el situacionismo, allí se encuentra ese caldo de cultivo de pensar otros modos de relaciones. Es un momento de gran tensión porque hay gente que tiene ideas de constituir un grupo y por otro lado una cantidad enorme de integrantes que no tiene intención de constituirse en grupo sino de crear un tipo de obra y experimentar ciertas prácticas a solas o con otros que hace poner en marcha e ir hacia adelante al movimiento. También me parece ejemplar la noción del no listado, Fluxus nace sin nombre, se organiza sin tener una idea de nombre que los concentre y sin listado ni manifiesto”.

- Surge de manera espontánea.

“Surge de manera espontánea y sin intención de grupo ni de línea estética. Sus componentes participa de experiencias muy similares y elaboran trabajos de manera colectiva: músicos que empiezan a deconstruir la idea de la música. Artistas que vienen de las artes escénicas, de la danza, de la escultura, del cine, la pintura… Lo que ocurre es que estos elementos empiezan a intoxicarse y se ponen a hacer obras juntos en los talleres como el que tenía Yoko Ono en Nueva York”.

- Creo que la música fue muy importante para Fluxus.

“La música es muy importante pero sobre todo la idea de la nueva música y la organización de festivales en los que colaboran otros artistas. Todo fluye sin nombre hasta que en 1963 en un encuentro que se celebra en Alemania organizado por George Maciunas junto con otros artistas de música de acción, comienza a sonar Fluxus aunque el nombre ya estaba dando vueltas y se había pensado para los contextos mundiales donde iba a instalarse como Europa, Norteamérica y Asia que son los bloques más importantes en los que se produce lo que se entiende como Fluxus. Se desparrama también por otros sitios pero no con la misma intensidad que los continentes mencionados. La eclosión surge cuando en la primera revista importante del movimiento, que diseña Maciunas y en la que colaboran músicos y poetas, perciben que las piezas que contiene la publicación hay muchas partituras que se pueden interpretar”.

- Pero ¿cuál es el origen del nombre?, ¿por qué Fluxus?

“Existe mucha rumorología pero casi todos coinciden en que el nombre lo da Maciunas cuando abrió el diccionario y se encontró con esa palabra. Una palabra que iba muy bien con la idea de transformación, de recorrido. Maciunas fue una persona que no estaba bien de salud y mantuvo de alguna forma un vínculo con la enfermedad muy particular a lo largo de su vida. La mayoría coincide en darle la paternidad del nombre y no resulta difícil pensar que fue así ya que ninguno tuvo idea de grupo salvo Maciunas. Sin Maciunas no hubiera existido –como existió– la idea de Fluxus en cuanto a la representación de un modo de hacer las cosas que empieza y nunca termina si bien cuenta con unas características que implica una metodología que se puede reconocer gracias a la enorme labor de Maciunas”.

- ¿Qué tipo de textos escogió para el libro?

“Obras que mantuvieran un diálogo muy actual, que tuvieran algo que decir al arte actual y cuáles de sus artistas se caracterizan por su capacidad de continuar dialogando con el presente”.

- ¿Las vanguardias han muerto?

“Las vanguardias han muerto o felizmente ha muerto esa idea de vanguardia que se identifica con originalidad, espíritu creativo, un posicionamiento a un antes y un después. A la idea de demoler las ideas que se vinculan a otros periodos que estaban muy pegados a la modernidad. Se ha dejado de prestar atención a un arte que tuvo que ver con modos distintos, nuevos si se quiere. Me resulta interesante pensar que el arte no tiene que ver con lo nuevo porque hay otras disciplinas que se encargan de lo novedoso como la moda, por ejemplo. El arte no debe tener solo esas preocupaciones sino otras para enriquecer sus intereses”.

- ¿Qué queda de Fluxus?

“Pues los artistas vinculados al movimiento y que están vivos, Zag… Todos comparten prácticas y herencias e incluso siguen trabajando de la misma manera. Lo puedes observar en su vinculación con el arte correo, el arte postal y en el interés hacia el happening que hemos tenido en los últimos años y, cómo no, el arte de acción. Hay páginas activas donde permanentemente aparecen artistas que se vinculan a Fluxus y que organizan festivales y conciertos pero, personalmente, me interesa verlo más desde una perspectiva más próxima a la deconstrucción y no tanto como herencia”.

- Dos artistas que se sumaron al movimiento fueron Juan Hidalgo y Yoko Ono.

“Me interesa un primer momento de los dos ya que lo considero muy paralelo. Entiendo que han sido grandes escritores y que comparten la inquietud de cómo pasar a la escritura la libertad que han encontrado en el mundo del arte. Inventar formas con el uso escrito del lenguaje. Los dos son casos paradigmáticos y han influenciado muchísimo. Juan Hidalgo en el momento que publica el Juan Hidalgo de Juan Hidalgo (1961 y1991) ocupa un lugar que a mi me interesa por su valor. La otra cuestión es la inmediatez que caracteriza a estos dos artistas que parten de ideas muy sencillas que expresan con profundidad. Hay un equilibrio entre las formas de esa idea. De Yoko Ono me atrae sobre todo su libro Pomelo, una obra muy temprana y también su actividad como música que a mi me parece impresionante y que realizó antes de conocer a John Lennon y que continuó viviendo ya con él. Yoko Ono y Juan Hidalgo inician dinámicas que no vencen. En el caso de Yoko se cuenta con mucha obra donde elegir mientras que la de Juan Hidalgo resulta más compacta”.

- Usted es poeta y comisario. ¿Cuáles son exactamente las funciones de un comisario de arte?

“Del mismo modo que no hay modos de ser artista ni de producir artistas no hay un modo de hacer comisariado sino una idea de interlocutor y traductor que es muy importante. Es poder entrar en la obra del otro y comprenderla para lograr desde el diálogo una situación común. Esa sería la cuestión más epifánica del comisariado. Luego hay algo de apoyar la toma de decisiones del artista y, a partir de ahí, otras variables e intereses que son muy distintos y que van desde el comisario investigador al de tesis y aquel en el que la figura del comisario se desdobla con el fin de trabajar con otras formas de presión. Otro modo que reivindico mucho es acceder a las ideas o conocimientos del artista a posteriori” .

UN MOVIMIENTO

Mariano Mayer vino a las islas para impartir la conferencia Iconoclasia Fluxus, charla que formó parte del programa de actividades complementarias a la exposición Esther Ferrer que se exhibió a finales del año pasado en el Centro Atlántico de Arte Moderno (CAAM) en la capital grancanaria. Impartió también la conferencia en Tenerife, invitado por el Ateneo de La Laguna.
En su exposición, Mayer resaltó la originalidad crítica de Fluxus, un movimiento artístico de las artes visuales, la música, la literatura y la danza que tuvo su momento más activo en los años sesenta y setenta. “Fluxus se declaró contra el objeto artístico tradicional como mercancía y se autoproclamó como un movimiento artístico sociológico”, señaló.

Saludos, tiempo de amar, tiempo de morir, desde este lado del ordenador

2 Responses to “Mariano Mayer: “Las vanguardias han muerto””

  1. NICOLAS Says:

    CONVERSACION DE CUARENTENA EN UN PARQUE CULTURAL CERRADO MUCHOS AÑOS , ANTES DEL VIRUS.

    1º RAMON ANDRES. VER LIBROS EN ACANTILADO. ESCRITOS EN EL PAIS. Y ENTREVISTA EL CULTURAL. 10 ABRIL.
    2º CLAUDIA PIÑEIRO. ( NOVELA NEGRA). ALFAGUARA.
    3º REVISTA CONTEXTO O RABELION. IGNACIO ECHEVARRIA, GONZALO TORNE.
    4º ERNESTO CARDENAL. ( POESIA COMPLETA ). (E. TROTTA).
    5º IRENE VALLEJO. EL INFINITO EN UN JUNCO. ( SIRUELA ENSAYO ).
    ABRAZOS.

  2. admin Says:

    Infinitas gracias

    Abrazos

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