De William Burroughs al universo de Digital 104

CON LOS DIENTES LARGOS

William Burroghs es uno de los escritores más interesantes y oscuros de la Beat Generation y, a mi juicio, el mejor de entre todos ellos porque su obra, extravagante y muy personal, solo puede despertar odios y pasiones encendidas. No admite el término medio.

Por inclasificable, son bastante escasas las adaptaciones cinematográficas que el cine se ha atrevido a llevar a pantalla de novelas de este comedor de opio aunque para muchos de sus lectores –que los tiene como quien ahora les escribe–  sea una referencia no ya por su trabajo literario, poderoso y embriagador, sino también por su postura  honesta y reveladoramente radical sobre el consumo de sustancia narcotizantes.

Ediciones Escalera, una de las escasas editoriales españolas a las que merece la pena seguir el rastro porque se ha especializado en recuperar clásicos de la literatura underground, presenta ahora Blade Runner: una película, de William Burroughs, un libro que, como la mayoría de los libros de Burroughs plantea numerosas cuestiones: ¿Es un tratado de cine?, ¿una novela?, ¿acaso un guión cinematográfico?.

Blade Runner, una película sirvió también para que uno de los coguionistas del Blade Runner de Ridley Scott, Hampton Fancher, tomase el título prestado para una cinta que, por cierto, celebra en 2012 su treinta aniversario y que, como todo aficionado que se precie sabe, está inspirada en ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? del visionario escritor Philip K. Dick.

No he tenido oportunidad de leer Blade Runner, una película, de William Burroughs pero tras devorar en una de esas etapas invernales que caracterizan mi tránsito por esta vida novelas como Yonqui, El almuerzo desnudo –que David Cronemberg adaptó rigurosamente al cine en una película que aún no ha perdido su capacidad de fascinación–, Nova Express o Las últimas palabras de Duth Schultz, intuyó que en este texto que según su traductor, Daniel Ortiz Peñate, es un “collage aleatorio”, se darán todas las constantes que han hecho eterna la literatura de ese gigantesco escritor estadounidense.

En la nota promocional de Blade Runner, una película, se informa:

- ¿De qué trata?

Del colapso de la sociedad occidental por una gestión corrupta de la Sanidad y el florecimiento de una medicina underground capaz de puentear la burocracia y las farmacéuticas.

- ¿Qué es un Blade Runner para Burroughs?

Un distribuidor clandestino de fármacos, drogas y equipamientos médicos. El mayor garante del nuevo orden.

- ¿En qué época transcurre la acción?

El libro propone un viaje fragmentario por el tiempo entre 1914 y 2014.

- ¿Y la ambientación?

Nueva York en ruinas, túneles convertidos en canales, perros salvajes, yonquis, el nacimiento de una nueva era.

-¿El estilo?

Cut-up en su máxima expresión.

¿Alguien da más?

CINE CANARIO EN EL AGUERE ESPACIO CULTURAL

Con la que está cayendo que una iniciativa independiente y ambiciosa como el Aguere Espacio Cultural esté dando la vara en La Laguna solo merece nuestro mayor reconocimiento.

Y más cuando su abanico de ofertas se está abriendo a todo tipo de expresiones culturales, entre otras el cine con un ciclo que se inicia este martes, 7 de febrero, y que bajo el título de Noche de realizadores canarios, se inaugura con varias producciones de Digital 104, a las 20.30 horas siempre y cuando –cosa insólita pero loado sean los dioses reivindicable– se abone tres euros por entrada.

La sesión incluye cinco trabajos de Digital 104, los cortometrajes Amanece, dirigido por Jairo López y protagonizado por los actores José Luis de Madariaga, Fátima Hernández y Natalia Ruiz Zelmanovitch; Off (Domingo J. González, 2006), una historia claustrofóbica y de suspense con Javier Martos, Miguel Ángel Granados y Miguel Ángel Rábade como intérpretes; Acto primero (Jonay García, 2007) con José Hervás, Javier Martos y Soraya González del Rosario como protagonistas; Algo que aprender (Eugenia Arteaga, 2009); película que obtuvo, entre otros premios, el de Mejor Cortometraje Internacional en el Sexy Paris Film Festival (Francia) y el Eroticorto al Mejor Corto Erótico en el XIII Festival Internacional de Cortometrajes La Boca del Lobo (Madrid); e Insecto (2007), una obra colectiva hecha a cuatro manos en donde los componentes de Digital 104 adaptaron el poema homónimo del palmero Leocadio Ortega.

Por otro lado, Aguere Espacio Cultural acogerá el 9 de febrero la presentación de El jardín barroco, la última y más reciente producción de Digital 104.

Se trata de un trabajo grabado por Jairo López como reflejo de una intervención en el espacio Museo Conca (Sala Conca), que llevó a cabo el polifacético artista Roberto García de Mesa durante varias sesiones y a lo largo de dos semanas de noviembre de 2011.

El jardín barroco es una versión de 48 minutos que se exhibe en el marco del II Festival de Creación Escénica Contemporánea EALC – Pasan Cosas 2012.

Saludos, hermanos y hermanas, desde este lado del ordenador.

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