Mundo bizarro: las intrépidas adaptaciones al cine de las novelas de Alberto Vázquez Figueroa

INTRO

A parte de don Benito Pérez Galdós no creo que haya escritor canario más adaptado al cine que Alberto Vázquez Figueroa.

Amado por unos y detestado por otros, la producción literaria de este narrador tinerfeño debe de figurar sin embargo con letras destacadas en los escasos tanteos que en España se ha hecho en el género de la aventura pura y dura. Sobre todo en los primeros títulos de su carrera, con novelas aún tan potentes y eficazmente resueltas como son Como un perro rabioso, Manaos y Tuareg, libros en los que su supo combinar con habilidad aventuras bizarras en tierras exóticas con un entretenido, y osado para la época, discurso denuncia.

Escritor al que muchos no consideran escritor por su portentosa capacidad de sacar títulos y más títulos mientras otros pierden el tiempo contemplando a las musarañas, y que en su momento contó con el favor del público al situarse algunos de sus libros en la lista de los más vendidos, en este post pretendemos aproximarnos a las adaptaciones cinematográficas que se han realizado sobre sus historias, algunas de las cuales estuvieron firmadas por cineastas de la solvencia de Richard Fleischer, el rebelde Monte Hellman y el artesano Enzo G. Castellari, así como protagonizadas por actores de la dimensión de Michael Caine, Jason Miller y Peter Ustinov, entre otros. 

Antes de repasar las películas basadas en las novelas de Vázquez Figueroa, tenemos que señalar que el escritor colaboró como guionista en varios proyectos y que en dos ocasiones incluso se puso tras las cámaras para dirigir Oro rojo (1978) y Manaos (1979). El primero una historia original para el cine y el segundo adaptando una de sus novelas de mayor éxito.

Dicho esto, les invitamos a que se adentren con nosotros en el fascinante, chiripitifláutico, bizarro mundo cinematográfico del maestro Alberto Vázquez Figueroa.

LA LISTA

 

 

El perro (Antonio Isasi-Isasmendi, 1976).- Antes de leer ninguna novela de Vázquez Figueroa, autor que descubrí por mediación de un entusiasmado amigo, probé a ver esta película en un cine de la capital tinerfeña (¿fue el hoy desaparecido Rex o quizás en el Numancia?) recibiendo una mezcla de emociones que iban desde el más rancio orgullo regionalista –porque el filme estaba basado en una novela de un escritor que había nacido en el mismo territorio que este apuntador– y, por otra parte, porque este largometraje de evasión estaba interpretado por Jason Miller (a quien había visto años antes como el padre Karras en El exorcista), que se pasa casi todo el metraje que dura la cinta perseguido por un perro que solo tiene un solo objetivo en su perruna cabeza: darle caza. Junto a Miller comparte protagonismo la atractiva, la grandiosa  Lea Massari.

Ashanti (Ebano) (Richard Fleischer, 1978).- No es una de las mejores películas de Richard Fleischer. De hecho, creo que con esta película inició el declive de una prodigiosa carrera como director que tocó techo con la incómoda y todavía feroz Mandingo (1975). Compruebo, descompuesto, por eso, que Ashanti (Ébano) no ha superado la prueba del tiempo, aunque si se la ve con ojos bondadosos tiene su no sé qué. Es decir, una película de acción y aventuras sin mayores quebraderos de cabeza. Lo mejor de esta película sobre trata de esclavos continúa siendo el impresionante reparto de viejas glorias que participan en ella, como el incombustible Michael Caine, Beverly Johnson, Peter Ustinov, Rex Harrison, Kabir Bedi (¡el Sandokán televisivo!), Omar Shariff y William Holden.

Manaos (Alberto Vázquez Figueroa, 1979).- Manaos no pasará a la historia del cine aunque no creo que fuera ésta la pretensión que circuló por la cabeza de su director y guionista. Con todo, es un título recomendable para cinéfagos con estómago indestructible, algunos de los cuales podría incluso a animarse a leer una novela en la que, sin embargo, Vázquez Figueroa supo moverse muy bien. Pienso, de hecho, que Manaos es uno de los mejores títulos de su carrera como escritor. La cinta la protagonizan sin ponerle demasiada convicción los atractivos galanes latinos Fabio Testi y Jorge Rivero y la explosiva Florinda Bolkan.

Tuareg (Enzo Castellari, 1984).- Cineasta fogueado en el espagueti western (fue director de Keoma, un clásico del subgénero) y más tarde lo que le echaran encima, como la cinta bélica Aquel maldito tren blindado que tanta gracia le hizo a Quentin Tarantino, Castellari lograría uno de los mayores éxitos de su carrera con Tuareg, probablemente la novela de más éxito de Vázquez Figueroa. Su protagonista fue Mark Harmon, un actor de televisión a quien recuerdo más encarnando al atractivo y siniestro asesino en serie Ted Bundy en el telefilme Deliberate Stranger y como coprotagonista de la serie Navy, investigación criminal que como Tuareg en Tuareg. Un título, no obstante, que hay que ver como lo que es: un western al dente. Solo que las planicies del oeste americano que fueron recreadas en su día en la rocosa geografía de Almería es sustituida aquí por las arenas eternas del desierto del Sahara.

Iguana (Monte Hellman, 1988).- Promesa del cine independiente norteamericano, la carrera como realizador del rebelde Monte Hellman visualiza muy bien su descenso como director en la industria de Hollywood. Algo que resulta insólito, sobre todo si tenemos en cuenta que Hellman fue un cineasta muy reivindicado por la crítica especializada y casposa por títulos como Carretera asfaltada en dos direcciones (1971) y Gallos de pelea (1974). No he leído Iguana, pero por lo que me informó en su momento el amigo deslumbrado por los libros de Figueroa, se trata de un título que pedía a gritos su adaptación al cine. Iguana de Hellman, como otras producciones basadas en las novelas del escritor tinerfeño, tuvo una errática carrera comercial y cuenta la historia de un marinero deforme que se ha convertido en rey de las islas Galápagos.

Océano (Ruggero Deodatto, (1989).-  Firmada por Ruggero Deodatto, el director de esa obra maestra del cine macabro que es Holocausto caníbal, si por algo se recuerda Océano es por la polémica que suscito en su momento en el aún incipiente mundillo cinematográfico de las islas cuando el Gobierno de Canarias le asignó “aleatoriamente la cantidad de 400 millones de las antiguas pesetas”. La serie, cuya carrera comercial fue, digámoslo con palabras suaves, casi nula, circula ahora en una edición dvd. Coproducida además de por el Gobierno Canario por un grupo italiano en el que se encontraba el ya fallecido Giovanni Bertolucci, no confundir con el cineasta italano del mismo apellido, Océano estuvo protagonizada por un excelente reparto de grandes secundarios del cine internacional como Irene Papas, Martin Balsam, Senta Berger, Marisa Berenson, Ernest Borgnine y Mario Adorf, entre otros actores… canarios. La serie se rodó en Lanzarote y Venezuela y narra las peripecias de los Perdomo, una familia conejera que se ve obligada a emigrar huyendo de la pobreza. Cabe reseñar, que se intentó repetir años más tarde la misma operación con la anunciada y frustrada adaptación al cine de una de las novela más mediocres del escritor tinerfeño, Ciudadano Max, pero que se frenó el proyecto cuando el Gobierno de Canarias a través de su Consejería de Turismo –dirigida entonces de Miguel Zerolo– optó por destinar los 1.700 millones de pesetas que había previsto para la puesta en marcha de la Televisión Canaria en un concurso audiovisual al que acudieron, como a un panal de rica miel, productoras que brotaron de la noche a la mañana ante la llamada del dinero, poderoso caballero. El concurso, que se conoció entre las gentes del gremio como Zeroloto, al final repartió la cifra entre 71 proyectos, muchos de los cuales todavía estamos esperando ver. La historia de este escándalo me anima a que algún día escriba el post que se merece ya que tengo la teoría de que ahí, precisamente ahí, se encuentra en parte el origen de todos los males que ha venido caracterizando desde entonces las políticas audiovisuales que dicta el Gobierno canario.

Rottweiler (Brian Yuzna, 2004).- Este filme es resultado de ese audaz y extravagante proyecto llamado Fantastic Factory, que capitaneó en España Brian Yuzna, productor de la delirante y, oh yeahh, cult movie Re-Animator. Rottweiler nació como una nueva versión pero en clave de ciencia ficción de El perro, aunque viendo la película más que inspirarse en la novela de Vázquez Figueroa uno saca la conclusión como espectador que lo que se intentó hacer fue una versión canina de Terminator. Con todo, me parece un título a tener en cuenta porque, pese a todos sus peros, tiene su algo. Y si a este algo le unimos la parquedad de su presupuesto y que, entre otros actores, uno pudiera ver a ese monstruo de la pantalla que fue Paul Naschy, (o Jacinto Molina para los amigos), Rottweiler tiene su punto, qué digo punto, su dimensión cafre que la convierte en un título imprescindible en las adaptaciones al cine de las novelas de Alberto Vázquez Figueroa.

Saludos, ¡¡¡exigiendo veinte Premios Canarias a nuestro escritor más internacional!!!, desde este lado del ordenador.

5 Responses to “Mundo bizarro: las intrépidas adaptaciones al cine de las novelas de Alberto Vázquez Figueroa”

  1. el vino que tiene Ascensión Says:

    Alberto siempre será despreciado por los que van de genios canarios de la literatura porque se limitó a escribir novelas sencillas de entretenimiento, y llegó a ganar mucho dinero con ello. ¡Herejía! Yo diría que Alberto es el rey del folletín canario, y aunque su nivel literario no es que sea para asegurarle un puesto en la RAE, sí que es cierto que sus libros contienen planteamientos e ideas interesantes. Tiene mi respeto y mi admiración por eso.

  2. Mario Domínguez Parra Says:

    Sólo he leído “Tuareg”, pero este libro me atrapó de una manera brutal.

  3. admin Says:

    No sé, me da la sensación que parece que da miedo afirmar que a muchos le gustaron la lectura de algunas de las novelas de Vázquez Figueroa… Así que ¡¡¡Espabilad!!! ¡¡¡No tened miedo, yeahhh!!!

  4. Bene Says:

    He leído aproximadamente 30 libros de este escritor. Me gusto mucho, pero después de los libros de Cienfuegos (Colección con la que he conseguido enganchar en la lectura a 3 personas cercanas y que me he leído varias veces) hubo 2 o 3 novelas que no me gustaron demasiado y dejé de leerlos.

    Es posible que vuelva…

  5. Enio Alfonso Diaz Says:

    Me he leído muchos libros de AVF. El primero que devore fue Ébano, desde entonces, son muchos los libros de este escritor, que he leído, de corrido. Me he pasado hasta 2 días seguidos con un libro de AVF.
    Le podido ver las criticas que le hacen a este escritor, como el lo dijo, con la entrevista respecto a. 100 AÑOS DESPUÉS. -QUE SE VAYAN A LA MIERDA.
    AVF, nos pasea por los desiertos de África (Tuareg, Arena y Viento) o nos lleva a lo mas recóndito de las Islas Canarias (Fuenteventura) O cuando recorre los mares (Bora Bora)
    Sus novelas son de muy fácil lectura, sin palabreos rebuscados. Para MI, la mejor y mas fascinante novela de AVF, es. SICARIO. Nos lleva desde los barrios mas humildes de Bogota hasta las calles de Miami, pasando por todas las etapas de la producción de la Coca. Con la serie de CIENFUEGO, nos enseña muchas cosas del descubrimiento de América, con sus altas y sus bajas. No me resta mas que agradecerle a Alberto Vasquez Figueroa. Por sus excelentes libros. Que EL GRAN DIOS, le siga dando, mucha VIDA, para poder seguir disfrutando de sus creaciones.

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