Recuerdo que entonces…
Todos los años sale a la luz un libro que suelen leer los que no leen y que evitan los que todavía pueden presumir de quemarse los ojos ante las páginas abiertas de un libro. Es un fenómeno editorial, al que me acerco bastante años después de su resonante éxito de ventas y, probablementem película, por franco intetrés. Conocer cuáles han podido ser los resortes que animaron a sus editores ha apostar por ésta y no por aquélla otra novela.
Los casos ya se cuentan por centenares. Recuerdo que entonces sonaba El código Da Vinci, y mucho más tardes las nosécuántas sombras de Grey, sadomaso para pijos me comenta una amiga que, en su día, fue seguidora del culto a Historia de O. Relacionadas con la II Guerra Mundial, se publicaron El niño el pijama de rayas, que resulta tremendamente original para que el lector empatice con elholocausto, o la matanza de judíos y otras razas y tenendeicas en los campos de exterminio de esa naciòn tan civilizada como es Alemania; La cocinera de Himler, donde lo más destacale es cómo su autor no deja de denunciar el colaboracionismo de Jean paul Sartre (qué náusea) con los nazis en la Francia ocupada y alguna más que ahora mismo se me escapa…
De momento es pronto para averiguar que novela será la que devorarán miles de lectores el año próximo aunque 2018 se ha contentado con algún título que todavía resuena en las catacumbas de los que no presumen de contar con una librería en casa. Porque sí, hay gente que presume de no contar con una librería en casa, de no leer porque no tiene tiempo, ni siquiera el periódicol. A mi me llena de pena porque es como si alguien me dijera que no vive porque espera a la muerte… Pero así son las cosas, y así todo ese mundo que nos rodea y que vive al margen del real, que no es que sea muy especial pero al menos es eso que te mantiene, que construye tus hábitos, ya sabes, ¿np? y si no loo sabes noe s tiempo ni lugar para explicarlo…
Saludos, es lo que hay, desde este lado del ordenador