Una afortunada corriente de aire fresco: nuevo libro de Nicolás Melini

No sé si es el mejor halago que le puedo brindar a las novelas y relatos del escritor Nicolás Melini (Santa Cruz de La Palma, 1969) pero a mi juicio lo que más me gusta cuando leo sus historias es que no me parecen canarias. Ni siquiera españolas.

Será, pienso, que cuando me adentro en algunos de sus libros siento que estoy leyendo a un escritor que no necesita de patrias para su ubicación. En sus novelas, cuentos y poemas, Melini trasciende fronteras y se convierte en escritor sin banderas.

Me sumergí por primera vez en su mundo (bastante próximo al mío pese a sus notables diferencias) a través de su potentísima novela El futbolista asesino, un relato que sigo considerando afortunadamente inclasificable y que despertó en mí esa llama espontánea que como lector me exige, al terminar una obra que me gusta, aquello de “quiero más”.

Pasado el tiempo, porque esta es prácticamente la palabra que mejor se ajusta al seguimiento que hago con la literatura de Melini, leí La sangre, la luz, el violoncelo, y más tarde su impresionista e impresionante Cuadros de Hopper, que considero, a mi modesto entender, el mejor de sus títulos publicados hasta la fecha y que me supo –aún tengo ese sabor en la boca mientras escribo estas líneas apresuradas– a texto con ecos no ya del genial pintor norteamericano Edward Hopper sino del mismísimo Raymond Carver. Sólo que de un Carver con señas de identidad propias, como si su autor, Melini, hubiera cogido de ese gran narrador de las soledades humanas el marco para describir sus particulares historias de desarraigo y pequeñas traiciones cotidianas en forma de poemas.

Otros de sus títulos son Historias sin cariño de Remedios quiero besarte y Adonde marchaba. También Cuadernos de mis mayores, textos que espero encontrar un día de estos si los dioses que viven dentro de los libros me conceden esa oportunidad.

Viene a cuento esta extensa introducción para anunciar que el escritor acaba de publicar un nuevo libros de cuentos, y que bajo el título de Pulsión de amigos ha sido editado por KRK Ediciones en su colección Tras 3 letras.

El escritor venezolano Juan Carlos Méndez-Guédez ha escrito sobre Pulsión de amigos: “Sólo los grandes escritores son capaces de crear el vacío: un vacío seductor, terrible y hondo que antecede y se expande a partir de cada uno de sus textos. Nicolás Melini excava alrededor de estos doce relatos verdaderos abismos en los que la mirada se extravía la obra de Nicolás Melini: para encontrar en sí misma desconocidos vértices del goce y del dolor.

Los cuentos de Melini extraen de lo real pequeños trozos, segmentos de subterránea intensidad, y los colocan en medio de la blancura de la página como irritantes manchas, como intrigantes imágenes que el lector condensa y completa.

Literatura de primera línea, Nicolás Melini confirma en este libro que es uno de los mejores cuentistas de lengua española de este siglo que comienza. Porque sólo los grandes autores como él son capaces de armar un libro como este: fuego líquido, chispazos, quemantes resplandores, epifanías terrenales conectadas a un paisaje insular ajeno a la mitificación o a la visión adántica, pero próximo a la lucidez vital, al desgaste, al horror y al placer devorador que significa la existencia.”

Así que ya lo saben, y no olviden supermineralizarse.

Saludos, esperando a que caiga en mis manos Pulsión de amigos, desde este lado del ordenador.

5 Responses to “Una afortunada corriente de aire fresco: nuevo libro de Nicolás Melini”

  1. Timanfaya Says:

    Sr. Rojas: ya que nos habla usted de escritores canarios permítame por un instante hablar del mayor escritor que habitó entre nosotros. Como bien sabrá se ha desatado una polémica acerca de la situación fiscal de José Saramago (sí, ese al que el Gobierno de Canarias ninguneó una vez muerto porque en vida nunca regaló halagos al desgobierno que sufrimos desde hace décadas en desgraciadas siete islas). Fallecido el escritor, es decir sin capacidad de defensa, se ha publicitado su situación fiscal con titulares que equiparan al Nobel portugués con personajes de la ralea de Mario Conde, Ruiz Mateos o el tal Fabra. Esta campaña de difamación ha encontrado apoyo en periódicos canarios que pese a la cercanía de las fuentes no se han molestado en contrastar la información, o al menos ofrecer la versión de las partes en conflicto. Es decir, a ejercer periodismo con todas las garantías deontológicas…

    Dicho esto, me permito recomendarle a usted y a todos sus lectores que lean el artículo que uno de los periodistas más reputados de este país, Ramón Lobo (El País), ha publicado a cuentas de la mala praxis informativa realizada, una vez más, por esos periódicos canarios a los que se les llena la boca de espuma (que a veces vomitan a discreción) pero que, mire y lea, dejan esta profesión y a estas islas a nivel del barro.

    Aquí le dejo el enlace con el artículo de Lobo, recomendando también la lectura de los comentarios dejados por sus lectores. Sobran palabras… espero su análisis. Suyo afectísimo, desde la isla de los volcanes.

    http://www.ramonlobo.com/2010/07/21/impuestos-personajes-y-escritores/

  2. Timanfayawhat Says:

    Un gran escritor Melini, como muchos que hay en las islas, que se han liberado de esa supuesta “insularidad”; me atrevo a decir que es un escritor del tamaño de Carver o Mc Ewan; y si no me creen, al tiempo…
    Celebro por mí como letor y por Canarias en general este nuevo libro de Melini en KRK, que meapresuraré a comprar en cuanto lo vea en las librerías, y claro que lo voy a regalar a mis amigos. Gracias por la recomendación, señór García Rojas.

    (pd. me parece, señor Timanfaya, que este post no s el lugar para querer dilucidar los intríngulis ficales que pudo haber dejado elseñro Saramago; me parece una falta de respeto para el autor del post, para el tema de que se habla y para los lectores que queremos leer literatura, que usted quiera introduicr una discusión sobre Saramago que no tiene cabida aquí. Escriba un post en algún blog suyo sobre esto y el que quiera ocuparse de esto, que vaya a alí comente. Pero no moleste con semejantes zarandajas a los que queremos leer literatura de verdad y no nos interesa el faranduleo editorial. Gracias.)

  3. admin Says:

    Estimado Timanfaya le agradezco mucho su comentario y el enlace que añade. No obstante, y viviendo en islas como éstas, era de esperar. Y es que no salimos de la puñetera Caverna.

  4. Ezequiel P. Plasencia Says:

    Enhorabuena a Nicolás Melini, a quien no conozco personalmente pero comparto su admiración por la obra de Hopper (también del agrado de Antonio Muñoz Molina) y Carver (me quedo con “Catedral”), por su amor tenaz a buena literatura… Un saludo, suerte y paciencia.

  5. salustio Says:

    Enhorabuena Melini.

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