Circo goyesco

Lo de los Goya es lo de menos en esta 25 edición de los Premios Goya. Aquí lo que interesa es ver juntos a Álex de la Iglesia en su nueva encarnación de Juana de Arco junto a la ministra de Cultura, la señora Ángeles González Sinde. Una señora que solo sonríe. La misma sonrisa todo el rato. Una mueca más que sonrisa la de la Sinde.

Abucheos, antes que entre en el Teatro Real, de unos doscientos manifestantes en contra de la Ley que no lleva su apellido pero que ya se conoce popularmente como Ley Sinde.

Comienza la gala tensa, aunque Andreu Buenafuente que oficia de presentador intenta quitar hierro al asunto. Pero ni con esas.

Veo el espectáculo del cine español y me doy cuenta que no es el mayor espectáculo del mundo. Ora sainete, ora esperpento, lo mejor de la gala se produce cuando se nota improvisación, como la que genera eso que llaman Jimmy Jump, un catalán que cuando puede reclama sus minutos de gloria metiéndose allí donde no lo llaman. Hubo espectadores que lo insultaron.

Allá ellos, Jimmy Jump.

Sigo viendo la gala. Y me entusiasma que la tinerfeña Tatiana Hernández recoja el galardón por su diseño de vestuario en Lope, descafeinado biopic sobre el Fénix de los Ingenios. Los demás canarios que optaban al Goya en otras categorías se van a casa sin nada. Una pena.

Aunque llama la atención la derrota de Ciudadano Negrín por tratarse de una cinta respaldada y promocionada por el tontuno Gobierno de estas islas tontunas. No convenció a los académicos este retrato confuso y algo paleto sobre el señero y también polémico político grancanario.

La gala no se me hace larga –pese a las opiniones que he leído por ahí– aunque la retransmisión en directo deja bastante que desear. En especial cuando se rinde tributo a los profesionales que nos dejaron el año pasado. Claro que hay que tener en cuenta que al realizador le iba más el morbo, el duelo en el O.K. Corral entre la Sinde y el de La Iglesia. Las cosas como son.

La fiesta tensa del cine español continúa.

“Quiero dedicar un trocito del Goya a… y también a mi familia…” repiten y repiten los ganadores. Tatiana Hernández con un acento que no le conocía hasta ahora… Marcando C y rotundas Z… ¡muchacha!

A medida que avanza el asunto el realizador de la gala multiplica  los planos de Álex de la Iglesia y de la Sinde incluso más que el de los propios nominados. Ya saben, para que el respetable disfrute viendo como encajan el fracaso los que no se llevan el dichoso premio.Para hacer sangre también roba planos de la Iciar Bollaín, del Gerardo Herrero y de algunos otros que han puesto el grito en el cielo por el cambio de rumbo del hasta el domingo 13 de febrero presidente de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España…

Redoble de tambor (que suenan imaginarios en mi cabeza) porque se anuncia el discurso de Álex.

Silencio en la sala.

Las cámaras apuntan a la Sinde. También a la Leire Pajín (Santiago Segura dice que se quedó impresionado con su cara de culo, y la verdad es que no le falta razón).

Si pinchan el enlace pueden leer completo las palabras del ya ex presidente de la Academia de Cine. Me quedo con algunas ideas que no deberían ser revolucionarias pero que a buena parte del sector sí que se lo parece:

* “No podemos olvidar lo más importante, el meollo del asunto. Somos parte de un Todo y no somos nadie sin ese Todo. Una película no es película hasta que alguien se sienta delante y la ve. La esencia del cine se define por dos conceptos: una pantalla, y una gente que la disfruta. Sin público esto no tiene sentido. No podemos olvidar eso jamás.”

* “Dicen que he provocado una crisis. Crisis, en griego, significa “cambio”. Y el cambio es acción. Estamos en un punto de no retorno y es el momento de actuar. No hay marcha atrás. De las decisiones que se tomen ahora dependerá todo. Nada de lo que valía antes, vale ya. Las reglas del juego han cambiado.”

* “Intenet no es el futuro, como algunos creen. Internet es el presente. Internet es la manera de comunicarse, de compartir información, entretenimiento y cultura que utilizan cientos de millones de personas. Internet es parte de nuestras vidas y la nueva ventana que nos abre la mente al mundo. A los internautas no les gusta que les llamen así. Ellos son ciudadanos, son sencillamente gente, son nuestro público.”

* “Ese público que hemos perdido, no va al cine porque está delante de una pantalla de ordenador. Quiero decir claramente que no tenemos miedo a internet, porque internet es, precisamente, la salvación de nuestro cine.”

* “Sólo ganaremos al futuro si somos nosotros los que cambiamos, los que innovamos, adelantándonos con propuestas imaginativas, creativas, aportando un nuevo modelo de mercado que tenga en cuenta a todos los implicados: Autores, productores, distribuidores, exhibidores, páginas web, servidores, y usuarios. Se necesita una crisis, un cambio, para poder avanzar hacia un nueva manera de entender el negocio del cine.”

* “Tenemos que pensar en nuestros derechos, por supuesto, pero no olvidar nunca nuestras obligaciones. Tenemos una responsabilidad moral para con el público. No se nos puede olvidar algo esencial: hacemos cine porque los ciudadanos nos permiten hacerlo, y les debemos respeto, y agradecimiento.”

Cuando termina su intervención veo a Álex de la Iglesia como uno de los payasos tragicómicos de su Balada triste de trompeta. Aplausos y a continuación un recuerdo descafeinado al maestro Luis García Berlanga.

Casi parece un dramático fundido a negro.

La ministra Sinde parece que tiene la sonrisa congelada. Iciar Bollaín pone cara de no perdonarte la vida. Gerardo Herrero esconde su rostro entre las manos y Leire Pajín… bueno, insisto que Santiago Segura no iba tan descaminado.

Continúa el circo goyesco. Nuevos premios y nuevos agradecimientos. El macarra del  Segura aprovecha su intervención para autopromocionar su esperadísima Torrente 4. ¿Estupor entre los tiburones y sus rémoras del cine español?

Que les den…

Los premios continúan repartiéndose. Las dos cintas favoritas: Balada triste de trompeta y También la lluvia se quedan con galardones menores. Triunfa Pa negre, del siempre interesante realizador mallorquí Agustí Villaronga.

Buenafuente, el muy majadero, suelta una de las mejores bromas de la noche al afirmar que: “será cosa de verla”. No explica si yendo al cine o bajándosela por Internet.

A mi me parece genial. Una frase que resume el estado actual de ese cine español hoy dividido entre los que quieren que sea presente y los que se emperran en que continúe siendo pasado.

Termina la ceremonia de los Goya con Buenafuente que sube al cielo. Grita que allí podrá fumar sin que nadie se lo prohiba.

Grande Buenafuente.

A ver si aprenden los del cine español.

Saludos, aterrorizado ante lo que podrían ser unos Goyos del cine canario, desde este lado del ordenador.

6 Responses to “Circo goyesco”

  1. josepv Says:

    Muy buena su crónica, señor editor, lo mejor que he leído sobre la gala. Lo de sus goyos casi iguala al inigualable buenafuente.

  2. admin Says:

    Gracias Josep por tus generosas palabras. Yo imagino la ceremonia de los Goyos presentado por el anabolizado Manolo Artiles… igual hasta escribo un post sobre el asunto.

  3. Nando Parrado Says:

    Oye, ¿qué fue lo que dijo Karra Elejalde, que he visto que lo ponen a parir en algún medio? Yo vi la primera parte de su intervención, y aparte de tener pinta de colocado no le escuché ninguna barbaridad.

  4. admin Says:

    Estimado Nando, algún imbécil le ha reprochado que le dedicara el Goya, entre otros, a su gato. O el gato de su hija. Que ya no me acuerdo.

  5. Mariano Says:

    Karra es un genio de la interpretación. Aunque pareciera colocado, ese es su estado más presentable y lúcido. A mí me encantó verle, lo sentí rehecho, recuperado. Es un tipo conflictivo, con grandes subidas y bajadas, pero que cuando se pone al tajo…

  6. admin Says:

    Se pone al tajo, Mariano.

Escribe una respuesta