Archive for the ‘Sin categoría’ Category

Hasta pronto, Donald Sutherland

Viernes, Junio 21st, 2024

“¿Qué me parece que mi hijo Kiefer y mi nieta Sarah se dediquen a hacer cine y televisión? Que son competencia. No tengo intención de retirarme en un futuro cercano”.

“Mis hijos tienen nombres tan raros porque corresponden a los apellidos de algunos de los directores con los que he trabajado. Kiefer, por Warren Kiefer; Roeg, por Nicolas Roeg; Rossif, por Frédéric Rossif; y Angus Redford, por Robert Redford. A Angus intenté llamarlo simplemente Redford, pero todo el mundo me decía que no podía ponerle a un bebé un nombre así. Lo intenté durante meses, pero al final le añadimos el Angus”.

Palabra de Donald McNichol Sutherland (Saint John, Nuevo Brunswick; 17 de julio de 1935-Miami, 20 de junio de 2024)

Ha muerto Donald, pero no el pato que habla de manera ininteligible sino el formidable actor que lo mismo hacía de bueno como de malo. En ocasiones rizando el rizo y sin caer en la parodia pero casi casi capaz de crear personajes tan en la frontera que separa lo serio de la caricatura como su Attila de Novecento, que es esa gran película sobre Italia y las luchas que mantuvieron fascistas y socialistas cuando el siglo XX todavía presumía de una lozanía que echarían a perder los dos conflictos mundiales que estallaron en su seno y se expandieron –por obra y gracia de la onda expansiva– al resto del planeta.

Si me preguntaras que no vas a hacerlo cuál es la película de la que guardo mejor recuerdo del actor te respondería sin dudarlo que La invasión de los ultracuerpos que recuerdo haber visto en el cine Víctor de la capital tinerfeña cuando los cines eran eso mismo: cines.

Conocía de antes a la estrella mediana porque brilló con luz propia pero sin la intensidad de otros compañeros de generación vaya uno a saber por qué. Igual fue porque su físico no le acompañaba. O sí porque no resultaba demasiado guapo pero le salía de dentro un atractivo animal que cuando se esforzaba pone los pelos de punta. Ahí está su versión de camisa negra desatado en esa especie de Lo que el viento se llevó que es Novecento, donde además de cantar canciones como Giovinezza, no se cansa de darle palos a los campesinos más que para imponer orden porque disfruta de la violencia desatada. A mi me gusta más como villano porque me resulta más creíble que su Attila el que interpreta en Revolución, esa olvidada película de Hugh Hudson (Carros de fuego) en la que Al Pacino busca desesperadamente a su hijo mientras las trece colonias se levantan contra el poder de la Gran Bretaña. En este largometraje de tonos grises, brumosos, Sutherland interpreta a un sargento con matices. Es malo porque es inglés pero también tiene algo de bueno cuando intenta proteger al hijo preso de Pacino del deseo libertino de los aristócratas oficiales a los que sirve.

Como secundario es uno de los doce “voluntarios” de Doce del patíbulo y volvió a ponerse el uniforme en M*A*S*H que es una película que crece en vez de decrecer con el paso del tiempo. Repite como soldado en Los violentos de Kelly, donde comparte escenas con Clint Eastwood, que lo dirigiría muchos años después en esa comedia que es Cowboys del espacio, y en la que Sutherland explota su mejor perfil para el humor interpretando a un jubilado que no ha perdido su entusiasmo por rodearse de mujeres. Rodeado de mujeres esta en Casanova, a las órdenes de Federico Fellini, un filme que para mi ilustra muy bien cómo pudo ser ese maestro del amor. Ese tipo que compartía lechos mientras el cuerpo le aguantó.

De nacionalista irlandés lo pueden ver en Ha llegado al águila, un peliculón que dirige John Sturges y hace más o menos lo mismo en la fabulosa El ojo de la aguja (Richard Marquand, 1981), al lado de Kate Nelligan, actriz que fue uno de mis primeros amores cinéfilos…

Junto a Sean Connery protagoniza El primer gran robo al tren, que dirige el también escritor Michael Crichton, un largometraje que a mi me sigue pareciendo estupendo por ellos dos y… Leslie Ann Down (otra de esas actrices que me hizo suspirar en mis mocedades). Tras el drama familiar Ordinary People (Robert Redford, 1980) aparece ya como actor de reparto en la monumental JFK y Llamaradas, entre otras. Dejándose ver a partir de entonces en películas varias pero como estrella invitada porque Donald quedaba bien donde lo pusieran. Es de los que daba una nota de prestigio al filme. Aparecía, soltaba su diálogo y desaparecía y el espectador tan contento. Además, el espectador se quedaba con la conciencia tranquila porque Sutherland dejaba heredero, su hijo Kiefer y su nieta Sarah, aunque no tengan ni la altura ni el nivel del padre y del abuelo.

Además de La invasión de los ultracuerpos a mi Donald Sutherland me toca el alma como ese profesor progre que fuma porros con sus alumnos en Desmadre a la americana (John Landis, 1978) y ya de viejito en la miniserie de Salem’s Lot, en la que interpreta al mismo personaje que James Mason en la primera miniserie original, la que dirigió Tobe Hooper.

Bien entrado el siglo XXI digamos que su carrera dejó paso a trabajos como secundario de prestigio que a protagónicos.

Su última película fue Miranda’s Victim que no he tenido el gusto de ver y que no sé si veré. El mejor homenaje que le pudo hacer es contemplar algunas de sus películas como protagonista. Klute (Alan J. Pakula, 1971) estaría bien. Es un policíaco de su tiempo que es lo mismo que decir que se trata de un gran policíaco (atmósfera oscura, personajes equívocos, diálogos que suenan como navajazos), la ya mentada Revolución, M*A*S*H y Casanova porque me gusta verlo trajeado al incómodo estilo XVIII. El mismo actor revelaría en una entrevista que si Fellini lo fichó para el personaje fue porque vio en él “los ojos de un pajillero. No sé cómo se enteró… Tuvimos una maravillosa y honesta historia de amor platónico”.

Y amor platónico es el que mantuvimos la mayoría de los espectadores que lo vimos en pantalla grande como pequeña. Hiciera lo que hiciera, salvo al histrión de Attila en Novecento, lo hizo bien. Y eso que no tenía pintas de bueno pero tampoco de malo. Si hacía una y otra cosa fue siempre por exigencias del guión. De hecho, y lo cuenta él mismo, hubo un tiempo incluso en el que podía rechazar un papel porque le resultaba “violento”. Las películas a las que dijo no fueron Deliverance y Perro de paja y sí, me cuesta pensar verlo a él haciendo el trabajo que hicieron después Jon Voight y Dustin Hoffman.

Pero en fin, el caso es que la vida de Donald Sutherland fundió a negro para convertirse no en leyenda pero sí en la estrella que fue, es y seguirá siendo por los siglos de los siglos. Y es que a veces, ahora que nadie nos lee, qué grande es el cine.

En las imágenes y comenzando por arriba, Donald Suherland en Desmadres a la americana, Casanova y La invasión de los ultracuerpos

Una relación con acento brasileño y canario

Jueves, Junio 20th, 2024

Thays Borges, de Brasil, y el canario Juanmi Mantero se conocieron en un Erasmus en Portugal, y fue allí donde se enamoraron y se comprometieron. Por desgarcia, su historia de amor se vio truncada por la enfermedad mortal que sufrió uno de ellos.

Esta conmovedora historias ha terminado por convertirse en un libro y un documental, Amor en paliativos (Canarias3puntocero) que se presenta este viernes, 21 de junio, a las 20 horas en Dharma Salud (Cabo Blanco, Arona). en un encuentro en el que se explicará el origen de la obra y la relación que unió a Thays Borges (Brasil, 1987) con el canario y farmacéutico de profesión Juanmi Mantero (1984). Por desgracia esta historia de amor tuvo un final amargo, cuando se le diagnosticó a Thais un cáncer colorrectal, que finalmente acabó con su vida de Thays.

Amor en paliativos (editado en Canarias3puntocero) narra esta historia real en una edición que incluye un álbum de fotos de la pareja y de la evolución y secuelas de la enfermedad.

La historia se completa con un documental que lleva la firma del realizador canario Carlos Calato.

Escrita en primera persona durante los últimos cuatro meses de vida de la científica, Amor en paliativos aspira a ser un manual para servir a otras personas que padezcan una enfermedad terminal, a sus parejas, familiares, amigos… Además, es un canto a la comprensión de todos los obstáculos que la sociedad y la administración pública ponen a estas personas, lo que dificulta mucho más sus últimos días de vida.

La idea de publicar la historia de esta pareja surgió del psicólogo clínico Rayco Suárez, que los acompañó en el último tramo de la vida de Thays. Como parte de la terapia individual y de pareja, los animó a escribir su historia y, para ello, se valió del periodista Juan Manuel Pardellas. Amor en paliativos es el resultado de sus respuestas a más de trescientas preguntas formuladas durante cuatro meses, un ejercicio de prospección en sus vidas, sus orígenes, sus pensamientos y su vida en común, muchos de cuyos aspectos ellos dos descubrieron durante este trabajo.

Amor en paliativos es una publicación y producción de Canarias3puntocero Ediciones (una división de la agencia Bara Bara Comunicación). Puede adquirirse en la página web www.barabaracomunicacion.com y físicamente, por el momento, en Dharma Salud (Cabo Blanco, Arona, Tenerife).

Saludos, no hay palabras, desde este lado del ordenador

La Hojarasca, de la cineasta canaria Macu Machín, se estrena en los cines de las islas el 5 de julio

Martes, Junio 18th, 2024

La Hojarasca se estrena el 5 de julio en las salas de exhibición cinematográfica que aún están abiertas en cinco de las islas Canarias, ese archipiélago abandonado de la mano de los dioses. Se trata de un largometraje que dirige Macu Machín y que produce El Viaje Films. Algunas de las proyecciones serán especiales porque contarán con la presencia de la directora, quien mantendrá un coloquio con los asistentes a estas sesiones. La información de los pases y encuentros puede consultarse en la web de la distribuidora Pleamar Films (www.pleamarfilms.com), a la que se irán sumando más cines y pases. El periplo comercial comienza el viernes 5 de julio de la mano de Charlas de cine en Multicines Tenerife.

La Hojarasca se exhibirá también en los Price Prime y TEA Tenerife Espacio de las Artes y en el Yelmo Las Arenas en Las Palmas de Gran Canaria, los Multicines Atlántida en Lanzarote, los Millenium en La Palma y los Cines Odeon en Fuerteventura.
 
La película de Macu Machín cuenta la historia de tres hermanas que se reúnen en La Palma para repartir una herencia familiar. Allí comparten recuerdos y también discuten, haciendo aflorar los viejos conflictos familiares. Pero todo cambia cuando el volcán Tajogaite entra en erupción.

Para la directora, “ha sido una alegría constatar que una historia tan íntima y personal puede tocar la fibra de espectadores de cualquier país y condición. Llevo imaginando en todos estos encuentros cómo sería el recibimiento del público canario en su estreno en salas comerciales, así que estoy muy contenta de que, por fin, ‘La Hojarasca’ se proyecte en tantas islas del Archipiélago. Espero que el público pueda ver en mis protagonistas un trocito de sus vidas y de sus familias, que rían y se emocionen con las heroínas de esta historia, que son las heroínas de mi propia vida, mi madre y mis tías”.
 
La película está protagonizada por la familia de la propia directora, en concreto, por su madre Elsa Machín, y sus tías Carmen Machín y Maura Pérez.
 
En su itinerario por festivales, La Hojarasca, que celebró su estreno mundial en la pasada edición del Festival de Cine de Berlín, recibió en el de Málaga la biznaga de plata a la Mejor Película española y también a la Mejor Dirección en la sección ZonaZine. Obtuvo el premio a la Mejor película española de Documenta Madrid, el premio Richard Leacock al Mejor largometraje del Festival de Las Palmas de Gran Canaria y el Premio a Mejor película canaria de MiradasDoc. Este fin de semana se hizo con el galardón a la mejor dirección en la sección iberoamericana de documentales del Festival de cine de Guadalajara, en México.
 
La película se estrenará en salas de la península el 13 de septiembre, informa la productora en una nota informativa.

La Hojarasca es una producción de El Viaje Films y contó con el apoyo del ICAA, el Gobierno de Canarias, los cabildos de Tenerife y de Gran Canaria, así como con la participación de Televisión Canaria. En el equipo técnico destacan, entre otros, la labor de José Alayón y Zhana Yornadova en la dirección de fotografía, así como del compositor canario Jonay Armas como autor de la música, la directora de arte Silvia Navarro o la montadora Emma Tusell, afincada en La Palma, que finalizó el trabajo de edición que habían iniciado Manuel Muñoz Rivas y Ariadna Ribas.

Saludos, muchas ganas de verla, desde este lado del ordenador

Ángel Guerra, Azcona y Juan Manuel de Prada

Miércoles, Junio 12th, 2024

Me encuentro de momento simultaneando varias lecturas que me entran como si fuera una papilla espiritual que llena mi corazón y mi cabeza de cierta tranquilidad. Eso me pasa cuando los libros ante los que me enfrento (porque leer significa un enfrentamiento) resultan gozosos, entretenidos e intelectualmente trabajos que enriquecen un alma que cada día que pasa se siente un poco más vieja.

Releo La lapa, de Ángel Guerra, y sí pero también no… Ya sacaré mis conclusiones cuando cierre esta novela.

Leo con alborozo Los europeos, de Rafael Azcona, que además de ser un excelente guionista (el cine de Luis García Berlanga sería otro si él no hubiera estado detrás) fue también un notable escritor. Había leído de Azcona en el pasado El repelente niño Vicente pero con esta novela que encuentro casualmente en el Rastro de la capital tinerfeña, Rastro que ya no es el que una vez fue, me entran ganas constantes de leer sus páginas para olvidarme de la realidad que me envuelve. Esa realidad pegajosa, como de grasa reseca, que parece que lo impregna todo.

Leyendo Los europeos y lo que significaba el viejo continente para un español con luces y terrible capacidad para reírse de todo y de todos en la España de inicios de los años sesenta del pasado siglo XX, me doy cuenta de una verdad aplastante que solía repetir mi padre no una sino muchas veces. “El problema de este país es que ha pasado mucha hambre”. No acepto, por otra parte, la conclusión a la que llegó Arturo Pérez Reverte a partir de una de sus novelas, y es que el problema de España fue y es (aunque ya no tan monopolizador) el poder que tuvo y tiene vamos a decir la Iglesia católica. No haber dejado entrar las ideas luteranas, pensamiento que mueve ese magnífico libro que es El hereje, de mis siempre admirado Miguel Delibes, y escritor al que descubrí hace apenas unos años y que había detestado cordialmente en mis tiempos de estudiante porque me obligaron a leer Cinco horas con Mario y ya se sabe que para leer cualquier cosa menos que te obliguen.

El caso es que, al margen de Delibes, recuerdo mientras paso las páginas de la novela de Azcona que hace un tiempo llegué no a conocerlo pero sí a compartir mesa y mantel con él. Fue un almuerzo con otros periodistas locales y en el que se encontraban además como invitados Manuel Vicent y Luis Ángel Harguindey aunque de los tres la tropa prestó más atención a las palabras de Rafael Azcona que el resto. Y es que, joder, se trataba de aquel guionista y escritor del que no se conocía nada, se trataba de aquel tipo que había escrito con Luis García Berlanga y Marco Ferreri un puñado de historias que desde el día de su estreno se han convertido en indiscutibles obras maestras de ese cine español que ha ido poco a poco dejando de serlo tras convertirse a un protestantismo que no es de su naturaleza.

Les dejo la frase y ya les comentaré lo que me parece esta novela que imagino que protagonizan españoles parecidos a José Luis López Vázquez, Pepe Isbert y Manuel Alexandre, entre otros grandes comediantes:

“- Escrúpulos de pobre, porque a los pobres lo que más les gusta es pagar; debe ser porque pagando se sienten ricos. Pero, hombre, ¡si por miedo a dejar a deber el propio entierro lo pagan por adelantado en El Ocaso! En cambio los ricos no pagan nunca nada”.

Por último, leo y disfruto también con Mil ojos esconde la noche. La ciudad sin luz, de Juan Manuel de Prada, un libro que es un tocho pero que leo como en un suspiro. Ya contaré algo cuando lo termine porque como me pasó con su primera entrega, Las máscaras del héroe, me enseña cosas de las gentes, los intelectuales, escritores, artistas y demás ralea de esta España a la que le falta un no sé qué para dejar de serlo.

Y en esas estamos…

De todas formas, queridos/as, recordad que mañana será otro día.

Los periodistas no tienen sentido del humor

Martes, Junio 11th, 2024

Uno de los problemas que repercute en los periodistas es su escaso, por no decir nulo, sentido del humor. Es verdad que manejan materiales que en muchas ocasiones poca gracia tienen pero también hay otros en los que unas cuantas gotas de humor podían y pueden elevar un texto hasta hacerlo planear con destino a los lectores.

A nadie se le escapa que vivimos malos tiempos no solo para la lírica sino también para el oficio de contar hechos. Que la prensa tradicional, la de papel, desaparece porque ya no hay lectores que compren ejemplares y la publicidad busca otros medios para vender sus productos, pero éste y no otro es el signo de unos tiempos en los que casi parece que el periodista es una especie en extinción, aunque siguen habiendo en las redacciones hombres y mujeres que continúan desempeñando su trabajo contra vientos y mareas.

Se escribe todo esto porque me entero de la existencia de una página creado por dos periodistas argentinos dedicado al cine y a los periodistas. Los informadores argentinos con la complicidad de otros compañeros de oficio, actores y cineastas han elaborado una lista para escoger la que, según ellos, es la mejor película que se ha dedicado al oficio de noticiar y encabeza el listado de más de doscientos largometrajes nada más y nada menos que El ciudadano, que así se conoce en la Argentina Ciudadano Kane y en segundo puesto Todos los hombres del presidente. Le siguen otras producciones norteamericanas como Spotlight: en primera plana y The Post y cerca La dolce vita que es la primera producción no norteamericana que aparece la lista.

El caso es que hasta el filme número 18 no se revela en la nómina ninguna comedia aunque la comedia que ocupa el puesto 18 sea una obra maestra sí o sí como es Primera Plana (Billy Wilder, 1974) que, personalmente, considero la mejor adaptación al cine de la pieza teatral escrita por Ben Hetch y CharlesMacArthur y que descubrí hace ya muchos años en un cine de reestreno de Madrid, sesión en la que no dejé de reír.

Curiosamente, y en el 20, aparece como entre las más votadas Luna nueva (Howard Hawks, 1940), que es un antecedente de Primera plana solo que la pareja de periodistas la forman Cary Granty y Rosalind Russell y no hombres como hace Wilder con sus cómplices Jack Lemmon y Walter Matthaw.

Un poquito más abajo, los votantes escogieron Atrapado en el tiempo como un título de periodistas a tener en cuenta aunque en este filme el oficio más que estudiarlo es el trabajo que realizan día a día los protagonistas.

En el puesto 27 aparece Broadcast News y en el 29 Sucedió una noche, un clásico de Frank Capra en la que Claudette Colbert enseña al mismísimo Clark Gable a hacer auto stop. Le siguen en el 28 y 29 Aprile y Casi famosos, que no son exactamente comedias, aunque algo de risa sí que dan en el mejor sentido de la palabra y en el 34 Anchorman: The Legend of Ron Burgundy, una comedia más al servicio de Will Farrell que otra cosa.

En los puestos 37 y 38 aparecen El diablo se viste de Prada y Borat y en el 40 una curiosidad: The French Dispatch. Ya en el 43, una comedia silente a la que el paso del tiempo ni se atreve a arañar como es The Cameraman (Edward Sedgwick, 1928), con Buster Keaton haciendo de las suyas y así sigue este muestrario donde se habla más que de películas que traten sobre el periodismo, de películas donde los periodistas son protagonistas.

Hay otro Capra, Caballero sin espada (1939), se cuela Kika de Pedro Almodóvar porque los designios de los dioses son inescrutables y regresa Primera plana, solo que en la versión de 1931 que dirigió Lewis Milestone con Adolphe Menjou y Pat O’Brien que se coloca en el puesto 66.

Historias de periodistas y romances son Historias de Filadelfia y Vacasiones en Roma, 72 y 73 de la lista, y películas que llevan nombre de ciudad en sus correspondientes títulos y Philomena (76) que a mi como que sí y como que no y otro Capra, y van, en el puesto 80, Juan Nadie. En el 96, La mujer del año, filme de George Stevens que une a Katharina Hepburn con Spencer Tracy y en el 98 y 99 la mejicana La dictadura perfecta y la norteamericana Chicago. Otros títulos son 13 Going on 30, Making a Living, comedia silente del año 1914 que protagoniza Charles Chaplin; Funny Face, Marley & Me, Morning Glory, Nothing Sacred, Camarada X, Los dos rivales, El gran salto y La rubia platino, que es otra de Frank Capra, entre otras aunque no crean que demasiadas sino las justas. Y entre esas justas, un clásico del cine español como es El crimen de la calle de Bordadores, del inmenso Edgar Neville con Manuel de Luna y Mary Delgado. Se añade aunque en un injusto puesto 192, En bandeja de plata, de Billy Wilder. La lista continúa hasta llegar a los 244 títulos. Les animo a que la consulten porque en ella se encuentran películas de las que no tenía ni idea y eso siempre es un aliciente.

Como pasa siempre con este tipo de listado, algunos, probablemente los más cinéfilos, descubrirán títulos que no aparecen y otros que considera menores pero que sin embargo sí que están. Con todo, volvemos al planteamiento inicial y es que comparativamente con otros géneros como el drama, la comedia se hace hueco pero con doloroso empeño en las películas de y sobre periodista. Y ya puestos, y observando películas que se citan pero donde el periodista y el periodismo es secundario, ¿por qué no haber escogido una cinta como Spacehip Troopers? Imagino que fue cosa de ese casi medio millar de elegidos que votaron pero no deja de sorprenderme que no figure en esta curiosidad que sí que pone de manifiesto que en esta cosa del periodismo si algo destaca, ese algo sea precisamente su falta de humor para hablar no del oficio más viejo del mundo pero casi, casi…

Saludos, Kane anda por ahí, desde este lado del ordenador

Otro guantazo a la Cultura en Canarias

Lunes, Junio 10th, 2024

No hace falta ser muy inteligente para saber de dónde vienen las críticas. Esas dichosas fuentes que dicen de todo pero que prefieren mantenerse en riguroso anonimato.

El caso es que si uno compara el actual gobierno de Canarias con el anterior, aquel que fue resultado del que se llamó con cierta cursilería el Pacto de las Flores, saca la conclusión de que si bien a los de antes costaba verlos en sus despachos (que se lo pregunten por ejemplo al anterior presidente del Cabildo insular) el actual si peca de algo es además de inacción de una obsesiva manía por parte de sus consejeros de salir en la foto. En todas las fotos y en cualquier sarao al que se invite a nuestros representantes públicos, gente a la que le sirve cualquier excusa para no ponerse a trabajar pero sí a salir en la foto.

Llevo siguiendo y ocasionalmente sufriendo la acción política del viceconsejero de Cultura y Patrimonio Cultural del Gobierno regional, Horacio Umpiérrez, desde hace mucho tiempo. De hecho, creo que prácticamente debutamos al mismo tiempo en nuestras respectivas profesiones. La suya, la de ser político y la mía la de informar al respetable como buenamente puede, lo que me da cierta autoridad si afirmo que si algo hace bien Umpiérrez es hablar e improvisar para no decir nada.

Cansado y frustrado por los vaivenes que en materia cultural selló el anterior equipo de Cultura, aquel que se prometía progresista pero que acabó escorándose hacia un estalinismo que parece ya marca de la casa de la izquierda, gobierna ahora Canarias fuerzas políticas de derechas que además de apostar por una no política extiende sus nefastos tentáculos al mundo del libro.

Ya dedicaremos en su día una reflexión a la política de publicaciones de la Viceconsejería de Cultura y a algunas extrañas anomalías que hemos detectado en sus colecciones, hoy nuestra pretensión es la de reflexionar lo que informa un artículo que publica Santiago Toste en Diario de Avisos bajo el título de “Presupuesto cero: la crítica situación que atraviesan las bibliotecas públicas del Estado en Canarias” y en el que se nos recuerda que, a veinte días de cumplirse el primer semestre del actual Ejecutivo regional, no se ha dotado “este año a los dos centros de las partidas dirigidas a la adquisición de libros y el desarrollo de actividades”.

Es decir, que tal y como está la cosa, se notifica al usurario que evite acudir a uno de estos dos centros con la misión (ahora imposible) de solicitar una desiderata porque ambas Bibliotecas no tienen presupuesto para la adquisición de ¡¡¡libros!!!

Como usuario de bibliotecas, esta medida no solo me parece un disparate sino también un guantazo a eso que llaman Cultura. La Cultura nunca lo tuvo demasiado fácil en el país canario y si centramos la mirada en islas peor que peor pero eso no explica, y no se explica tampoco porque nadie ha salido a explicarlo, cómo después de haber sido aprobada por el Parlamento canario la Ley 5/2019, de 9 de abril, de la Lectura y de las Bibliotecas de Canarias y precisamente en un gobierno presidido por Fernando Clavijo (2015-2019) como el actual, la dos bibliotecas públicas del Estado no tengan presupuesto para adquirir libros y desarrollar actividades aunque esta política de hacer cosas y en concreto en la de Tenerife, deje mucho que desear al margen de los socorridos clubes de lecturas y encuentros con escritores/as de las islas, naturalmente.

La situación es por lo tanto bastante patética, y pone de manifiesto como se dijo que los libros interesan poco o nada no solo al Gobierno regional sino también a los cabildos (daría para varios tomos el maltrato rutinario que ha recibido el libro y el fomento a la lectura por parte del de Tenerife) mientras los ayuntamientos se lavan las manos porque esto no es problema suyo sino de ellos.

Puestas así las cosas, animaría a nuestros representantes públicos en materia de Cultura a que se tomaran en serio sus responsabilidades y que se pusieran a trabajar de una vez. Que tengan claro que no basta con salir en la foto en una presentación o inauguración sino que se necesita de un proyecto cultural del que hasta ahora se carece.

Así que si los que estaban antes no trabajaban, los que están ahora igual, solo que salen en muchas fotos y quieren hacernos pensar que trabajan. Mientras tanto, vayan olvidándose de solicitar una novedad en las bibliotecas públicas del Estado de las dos provincias canarias. La respuesta de quien les atiende será la misma: “no hay dinero para adquisiciones, vuelva usted mañana por si acaso”.

Saludos, todo sea por salir en la foto, desde este lado del ordenador