Archive for Noviembre, 2020

Pilar Álvarez Sierra: “El futuro del libro digital está más cerca del audiolibro que del eBook”

Lunes, Noviembre 30th, 2020

Pilar Álvarez Sierra es la directora literaria de la editorial Alfaguara que hoy pertenece al grupo Penguin Random House. Hace una semanas estuvo en Tenerife para presentar el nuevo curso que emprende La Escuela Literaria, que dirige la escritora Antonia Molinero en La Laguna, donde impartió la conferencia inaugural. Aprovechamos su estancia para hablar con ella sobre el mundo editorial en España, cómo ha afectado la pandemia al sector y cómo hace para leer tanto. Pilar Álvarez dice que tiene una fórmula. “Leo el primer capítulo y el último. También la página 69” y si le interesa se lo lleva a la calle para disfrutar con lo que entonces es solo un manuscrito.

- ¿Qué trabajo realiza una directora literaria?

“El editor es el primer lector de los libros que creemos que deben llegar a los lectores. Funcionamos como un filtro ya que recibimos muchas propuestas y las seleccionamos. El editor literario tiene que entender también qué busca el lector. De alguna manera es como si fuera un nexo entre un libro que busca lector y un lector que busca libro y en ese proceso el editor se encuentra en medio”.

- Y en su caso que fue antes: ¿editor o escritora?

“No sabía que se podía ser editor. Me enteré siendo bastante mayor aunque lo que sí me gustaba era corregir porque siempre he sido la típica pesada del bolígrafo rojo. Desde siempre me ha encantado que lo que se lee esté bien dicho, bien escrito”.

- Comenzó como editora de ensayos.

“La editorial Turner no tenía colección de narrativa y publicaba mucho ensayo aunque prefiera decir mejor no ficción. En Turner se consolidó una colección de libros de Historia y de Música y observamos que parte del talento narrativo no escribía exactamente novela sino relato de viaje con una importante carga autobiográfica. Turner apostó así por publicar La España vacía, de Sergio del Molino que no es un ensayo estrictamente sino un libro muy personal que propone una reflexión y un viaje”.

- La reflexión y el viaje que propone Sergio del Molino está escrita en primera persona.

“El ensayo en primera persona está más cerca de la narración y vivimos unos tiempos donde cada vez más los autores tienden a mezclar géneros. En Turner me ocupaba de los libros de Historia y de los de Ensayo y ahora en Alfaguara de Narrativa, que es una editorial que tiene una gran tradición novelística pero que también incluye en su catálogo a periodistas como Gay Talese y libros como M, el hijo del siglo, de Antonio Scurati que es una biografía muy documentada sobre Mussolini. Con esto quiero decir que hay muchos libros que están al margen y que a mi me gusta esa experimentación”.

- ¿Cómo ha afectado la pandemia de Covid-19 los lanzamientos que tenía previstos Alfaguara este año?

“Mucho aunque en la parte más objetiva estamos muy preocupados por los libreros porque es el eslabón de la cadena que hay que cuidar más. Sobre todo las independientes que son fundamentales dentro del ecosistema de las librerías y porque son las que más sufren esta situación. En cuanto a la editorial Alfaguara la pandemia nos obligó a reducir el catálogo entre un 20 o 30 por ciento. Cancelar no se ha cancelado nada porque entendemos que los libros que queremos publicar se publicarán pero con retraso. Por otra parte, esta situación nos ha obligado a reflexionar sobre la velocidad con la que publicamos con el fin de no agobiar a los libreros con una oferta excesiva por lo que prestamos más atención en cuidar el lanzamiento y sobre todo a publicar menos”.

- ¿Cuántas novedades publicaba Alfaguara antes de la pandemia?

“En un año normal publicamos entre 45 a 50 libros. Este año estimo que serán 31 de los 45 que estaban planeados”.

- ¿Afecta que no se hayan celebrado ferias del libro y que encuentro de editores como el de Frankfurt se produzcan por vía telemática y no presencial?

“Lo primero es que esas actividades, que cuestan mucho hacerlas y que desde la crisis del 2008 ya se encontraban de capa caída, se estaban recuperando y ahora han vuelto a encontrarse en una mala situación y eso afecta a lo autores porque el hecho que no se celebren ferias deteriora la relación y el contacto del escritor con sus lectores. En cuanto a encuentros de editores como el de Frankfurt genera un enorme vacío porque es allí donde conocemos libros de otros países. De momento se capea el temporal como podemos pero sobre todo afecta mucho a la relación del escritor con el lector, que es lo que cuenta”.

- El editor norteamericano se implica mucho en la novela que va a editar. Tanto que propone al escritor cambios y no solo de personajes. ¿Trabaja usted igual?, ¿y si es así cómo reaccionan los escritores?

“El trabajo conjunto editor y escritor cuando funciona es precioso. A mi, personalmente, me encanta discutir el primer manuscrito con el autor y, según mi experiencia, suele encantarles a los buenos escritores. Les gusta que los asesore la editorial porque cuenta con todo un equipo que da forma a los libros sin necesidad de hacer intervenciones violentas. Si la relación funciona, es de las más creativas que hay”.

- ¿Recibe muchos manuscritos?

“Se reciben una barbaridad que no solo es de los escritores que nos envían sus libros ya que recibimos también de los agentes literarios”.

- ¿Y cuántos se leen?

“Tengo una cifra en la cabeza y es que si publicamos 40 libros significa que he leído 240 libros por lo menos. No creo que un editor pueda hacer más, pero por cada libro que se publica tienes que haber leído seis”.

- ¿Le ha pasado alguna vez rechazar un libro y que ese mismo libro funcionase en otra editorial?

“Me ha pasado las dos cosas pero no con libros que no me gustaran sino que se llevó otro editor porque estuvo más rápido o pagó más por los derechos. En este caso, tengo clavado Instrumental, de James Rhodes, que leí cuando estaba en Turner y que intenté contratarlo pero se adelantó Blackie Books, que hizo un trabajo maravilloso con el autor y con el libro. Con La España vacía me dijeron que un libro sobre el mundo rural no tenía interés alguno pero por un milagro descubrimos que sí había lectores que estaban interesados en los pueblos y en reflexionar sobre la despoblación. Estando en Alfaguara me dio mucha alegría apostar por la primera novela de Manuel Jabois, Malaherba, a quien conocía por haber leído sus libros de no ficción lo que me hizo pensar que ese periodista podía escribir una novela buenísima. Conocí a Manuel Jabois justo cuando éste estaba pensando desarrollar Malaherba que tras publicarse ha sido un éxito enorme”.

- ¿Son importantes para Alfaguara los premios literarios?

“Hay que distinguir entre premio y concurso. Los premios se dan porque le interesa a la editorial y tienen una función importante también para los libreros porque son los que llaman en Norteamérica los Blockbuster, libros que se venden a miles y contribuyen a dinamizar el sector porque llega a un tipo de público que a lo mejor no están tan pendiente de las novedades editoriales. No defiendo ni critico los premios”.

- Alfaguara cuenta de hecho con un premio literario.

“Que da un jurado profesional y que intenta que sea un premio que busque una novela que a su vez busque lectores no solo españoles sino que hablen español. Este año lo recibió Guillermo Arriaga por Salvar el fuego y en 2019 Patricio Pron por Mañana tendremos otros nombres. La idea del premio es que la novela ganadora llegue al enorme mercado en español”.

- Pero Alfaguara tiene su propia división editorial en varios países de latinoamérica.

“Cada casa tiene su programa y lo que compartimos son los grandes autores consolidados. Se cuenta con un programa, Mapa de las lenguas, que presenta en cada país lo más destacado de los demás países con la idea de descubrir autores pero siempre ha sido un diálogo difícil aunque hay momentos, como el boom latinoamericano en los sesenta, que funcionó. Ahora resulta más complicado romper barreras entre diferentes narrativas y países pero en Alfaguara trabajamos en ello”.

-Como editora ¿qué busca en un libro?

“La suerte de mi trabajo es que muchas veces crees que busca una cosa y cuando encuentras lo contrario te das cuenta que lo que querías era lo contrario, como en todo. Siempre he sido muy lectora y fan como editora de los libros con una historia, que empujan a pasar las páginas y que te sacan de ti misma. No soy especialmente partidaria de la autoficción. Del yo, de la narrativa que está pensando sobre sí misma sino de los libros que cuentan una historia, en el que hay vidas, familias por las que pasa el tiempo y las generaciones. Las grandes novelas de Vargas Llosa, Nabokov… Los narradores que crean universos son los que me parecen deslumbrantes”.

- ¿Es un buen momento para la narrativa que se escribe en español?

“Se vende de hecho más narrativa escrita en español que ninguna novela traducida. Este es el momento para que los autores españoles se lancen a lo que se conoce como la gran novela americana, una novela expansiva, con una historia y un desarrollo largo de contar y no quedarse en los testimonios de los pequeños yoes ya que la literatura de los últimos años está pasando por un poco de ombliguismo”.

- ¿Cómo explica entonces el éxito de literaturas de género como la negra?

“El auge de la novela negra en los últimos años está relacionado con que es uno de los pocos géneros que cuentan historias. Creo que hay que volver a enganchar al lector por ahí. La novela, la narrativa pura, tiene ganas de encontrar un espacio que nos está comiendo las series de televisión. Hay que volver a comunicarse más con el lector”.

- Parece que por una vez el papel le está ganando la batalla al libro electrónico.

“Se produjo durante un tiempo un leve declive de los libros de bolsillo que se volvieron a vender durante la pandemia. El libro electrónico que no tiene un porcentaje muy alto en el mercado español se disparó también en ventas durante este periodo aunque nuestros esfuerzos como editorial se están volcando en los audiolibros porque entendemos que el futuro del mercado digital está más cerca del audiolibro que del eBook”.

- ¿Por qué?

“Todos tenemos un teléfono móvil que ya no usamos solo para llamar y recibir llamadas sino también para otras cosas y aquí es donde queremos introducir los audiolibros. Llevamos años intentando introducirlo en el mercado español y parece que está calando en el público ya que puedes escucharlo mientras haces ejercicio, conduces… Termina por engancharte porque es un formato que cuando lo oyes es como si se metiera dentro de tu cerebro o como si leyeras el texto en voz alta para ti. El grupo Random House ha hecho una gran inversión. Cuenta con dos estudios de grabación en Madrid y ha contratado a actores de primera fila para la lectura de los libros así que creo que el futuro del libro digital está más cerca del audio que del eBook”.

- ¿Por qué son tan caros los libros?

“Los libros no son caros, son baratísimos en comparación con otras ofertas culturales. Los editores tenemos la obligación en todo caso de dar un producto perfecto. Es decir, que antes de llegar al lector esté bien corregido, que no lleve erratas y se publique en un papel de buena calidad. El libro en España es una suma de las mejores relaciones de calidad precio del mundo”.

-De los libros que lleva editado hasta la fecha ¿de cuál se siente más orgullosa?

“Estoy muy orgullosa de Hijos del carbón, de Noemi Sabugal, hija y bisnieta de mineros. En este libro, la autora recorre todos los poblados mineros de España y cuenta un poco su vida y como la casa, el bar, el colegio pertenecían a la mina y cómo con la transición a las energías limpias se ha destruido toda una forma de vida y, al mismo tiempo, ha dado la oportunidad de regenerar el territorio. Otro libro del que estoy muy satisfecha es La España vacía porque rompió moldes”.

- Una curiosidad, ¿cuántos libros lee al día?

“Como mínimo intento leer un libro al día. Silvia Querini, que fue la directora literaria de Lumen, me dijo que hay que defender tu tiempo para leer. Y tiene toda la razón”.

- Y otra curiosidad ¿cuál fue el libro que lo inició todo. El primer libro que recuerda que leyó y le cambió la vida?

Mujercitas. Leí la novela durante mi infancia unas treinta veces y resulta emblemática en el tipo de novela que me gusta: una familia, el paso del tiempo, las peripecias que atraviesan. No obstante, el libro que me enseñó a leer como una persona mayor fue Los viajes de Gulliver que mucha gente asocia con literatura infantil pero que a mi me enseñó que hay libros que parecen una cosa y son otra” .

LA ESCUELA LITERARIA

Pilar Ávarez y Antonia Molinero se conocieron cuando estudiaban en Madrid en la Escuela Literaria. La enseñanza que recibieron en este centro hizo que Pilar Álvarez trabaje ahora como directora literaria de Alfaguara Penguin Random House Grupo Editorial y Antonia Molinero que lleve desde hace años al frente en La Laguna de la Escuela Literaria, escuela que ha formado a escritores y escritoras. También poetas y guionistas desde sus inicios. Pilar Ávarez Sierra destaca la atractiva oferta lectiva que ofrece la Escuela Literaria de La Laguna y recuerda que lo más importante para un escritor “es saber escribir pero sobre todo saber contarse” y esto es lo que enseña, reitera, la Escuela que dirige en la actualidad la escritora Antonia Molinero.

FIRMA FOTO: Miguel Ángel Roldán

Saludos, a leer que son dos días, desde este lado del ordenador

‘El último barco, de Domingo Villar, premio Ciudad de Santa Cruz de Novela Criminal, en Tenerife Noir 2020

Sábado, Noviembre 28th, 2020

El último barco (Siruela, 2019), de Domingo Villar, ha sido reconocida con el premio Ciudad de Santa Cruz de Novela Criminal, que entrega Tenerife Noir en su quinta edición, la sexta del galardón. Así reconoce el Festival Atlántico de Género Negro a la mejor novela negra publicada en castellano durante el año previo a la celebración de este encuentro anual en torno al género negro en Tenerife (Islas Canarias).

El premio fue entregado en el mediodía de este sábado, 28 de noviembre, en Muesca, el espacio gastro del Museo de la Naturaleza y la Arqueología (MUNA) de la capital tinerfeña. Al recoger el galardón, el escritor vigués expresó su agradecimiento a Tenerife Noir y al Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife: “no todos tienen la audacia de mojarse respaldando eventos que celebran el arte, que celebran la cultura y que celebran las vidas prestadas, que son los libros”.

El jurado integrado por José Luis Correa, Charo González Herrera, Miguel Ángel Rábade, Javier Rivero Grandoso y Verónica Alemán subraya “la solidez y penetración psicológica de los personajes” y el ambiente y geografía que sirve de fondo a la trama.

Saludos, enhorabuena, desde este lado del ordenador

Tenerife Noir anuncia el fallo del premio Ciudad de Santa Cruz de Novela Criminal este sábado

Viernes, Noviembre 27th, 2020

Tenerife Noir anuncia el fallo del premio Ciudad de Santa Cruz de Novela Criminal de 2020 este sábado, 28 de noviembre, a las 12.00 horas, en Muesca, el espacio gastro del Museo de la Naturaleza y la Arqueología (MUNA) de Santa Cruz de Tenerife. El acto se celebra de forma presencial y abierto al público, debido a las limitaciones establecidas a raíz de la pandemia por la COVID-19. El acceso al espacio gestiona mediante la reserva de plazas a través de la página web del Festival Atlántico de Género Negro Tenerife Noir. http://tenerifenoir.com/ y en sus perfiles en las redes sociales Facebook y Twitter.

Un comité de expertos, después de sucesivos procesos de selección, escogió cuatro novelas editadas en 2019 como las mejores del género escritas el año pasado en castellano, de forma que se convirtieron en las finalistas aspirantes al “único premio de género negro a obra publicada dotado con dinero en España, algo muy valorado por los autores y autoras, que ven reconocido su trabajo ya que es muy difícil vivir de la literatura”, subraya el director y productor de Tenerife Noir, Alejandro Martín.

Claudio Cerdán, autor de Los señores del humo; Esther García Llovet, que firma Sánchez; Susana Hernández, autora de Los miércoles salvajes, y Domingo Villar, por El último barco, conocerán la decisión adoptada por un jurado compuesto por el escritor profesor de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, José Luis Correa; la organizadora del festival Cubelles Noir, Charo González Herrera, especialista en el género negro; los profesores de Filología de la Universidad de La Laguna Miguel Ángel Rábade –además, fundador de la librería MisTério, especializada en género criminal, que tuvo su sede en La Laguna– y Javier Rivero –también director del Seminario Internacional Tenerife Noir de Investigación en el Género Negro de la ULL–, y la periodista Verónica Alemán.

Los autores finalistas del premio serán entrevistados por la escritora Yurena González en sendas sesiones el lunes 30 de noviembre y el martes 1 de diciembre, ambos días, a las 18.00 horas. Las entrevistas se emitirán a través de Internet en directo. El enlace para acceder a ellas se localiza en la página en la web del festival: http://tenerifenoir.com/ y en sus perfiles en las redes sociales Facebook y Twitter. En la sesión del lunes 30 de noviembre participan Susana Hernández y Claudio Cerdán, mientras que el martes 1 de diciembre es el turno de Domingo Villar y Esther García Llovet.

Las obras

En Los miércoles salvajes (Editorial Milenio), Susana Hernández abandona a la policía protagonista de su saga anterior y presenta unos nuevos personajes, una pareja profesional de una agencia de seguridad en una trama de mucha actualidad: el funcionamiento de la industria farmacéutica y el tráfico de medicamentos. En un viaje que va desde la periferia de Barcelona hasta Ghana, las personas que lean esta novela observarán el papel de algunas industrias farmacéuticas en dificultar el acceso a los medicamentos a gran parte de la población mundial.

Con un asunto también de gran actualidad, el mundo de las apuestas, Esther García Llovet desarrolla la acción de Sánchez (Anagrama) en un Madrid de suburbios con personajes muy acabados, que no tienen nada que perder

Los señores del humo, de Claudio Cerdán (Ediciones B), bordea el thriller y lo criminal. Sus personajes son “antihéroes”: un investigador sin licencia, un mercenario y un proxeneta que huye de México; la acción se desarrolla en Madrid.

El último barco (Ediciones Siruela) era muy esperado, ya que el autor se hizo esperar diez años desde su anterior novela. Es la tercera entrega protagonizada por el inspector Leo Caldas y el agente Rafael Estévez, una pareja muy peculiar que vive escenas cargadas de humor. La acción se desarrolla en torno a la desaparición de la hija de un influyente médico que presiona a la Policía para su localización. Esta trama permite a Villar desarrollar no solo la escena policiaca, sino la vida en Vigo.

Saludos, que gane el mejor, eso es lo que se dice en estas ocasiones, desde este lado de ordenador

El Ministerio de Cultura subvenciona con 17, 318 euros un proyecto del Clúster Audiovisual de Canarias

Viernes, Noviembre 27th, 2020

El Clúster Audiovisual de Canarias (CLAC) ha obtenido por el proyecto Canarias crece una subvención de 17,318,25 euros dentro de las ayudas que concede la Convocatoria del Ministerio de Cultura y Deportes para la acción y promoción cultural de 2020 (https://cutt.ly/mhsr0VL).

En total, se presentaron 649 proyectos de distintas organizaciones, clústeres, federaciones y entidades sin ánimo de lucro de toda la geografía nacional. De ellas, 582 fueron admitidas a trámite por la Subdirección General de Promoción de Industrias Culturales La Comisión de Valoración analizó cada solicitud, desestimando 450 y aprobando 132. El crédito total disponible en la convocatoria ascendía a 2.039.949,78 euros que se reparten entre los 118 proyectos mejor puntuados por la Comisión, entre ellos, Canarias crece que se hizo con el noveno puesto y una subvención de 17.318,25 euros.

Canarias crece se articula en dos ejes basados en la innovación y en identificar y desarrollar cambios en la cadena de producción para generar un valor añadido para el sector. El primer eje consiste en la activación y promoción de rodajes en remoto en Canarias, partiendo del éxito de la experiencia Canarias streaming film destination, desarrollada en mayo con el apoyo de PROEXCA, y otras iniciativas inmediatamente posteriores. El objetivo del proyecto es difundir internacionalmente los casos de éxito para atraer más rodajes a las Islas en un momento donde la movilidad internacional está muy reducida por el impacto de la COVID-19, así como en mejorar los aspectos técnicos y tecnológicos.

El segundo eje está centrado en el fortalecimiento de las coproducciones internacionales para propiciar un aumento del número de productoras canarias en películas y series con participación en la propiedad intelectual de esas obras. Para ello, se buscará aumentar la selección de proyectos canarios en foros de coproducción, así como en dar a conocer, entre los productores e instituciones canarias, las dinámicas de funcionamiento de los principales fondos de coproducción internacionales de la mano de sus responsables.

En este sentido, se están llevando a cabo diferentes acciones en 2020 que culminarán en el primer trimestre de 2021 con la celebración del Programa Crece, un encuentro profesional con diferentes paneles e invitados internacionales.

El Clúster Audiovisual de Canarias es una Agrupación Empresarial Innovadora (AEI) fundada en 2009 y perteneciente al sector de las industrias culturales y creativas canarias. Se trata de uno de los cinco clústeres audiovisuales españoles, con los que trabaja en coordinación. Tal y como establece la legislación europea, las AEI o clústeres son instrumentos importantes por su capacidad para promover la cooperación entre diferentes actores, y por su orientación hacia la generación de negocio y fomento de la competitividad. Actualmente está presidida por el productor José Alayón y cuenta con más de 60 empresas y organizaciones asociadas que vertebran la innovación en la industria audiovisual del Archipiélago.

Saludos, ¿luz al final del túnel?, desde este lado del ordenador

Contra viento y marea: Trasdemar, La Salamandra Ebria y Alisios

Jueves, Noviembre 26th, 2020

En la recta final de un año extraño, basculante, de confinamiento y pandemia y que parece casi sacado de una novela de ciencia ficción, una noticia alentadora en estas tierras apartadas de la mano de los dioses: la aparición de dos revistas literarias y el segundo número en papel de otra de cine que me hace pensar que con la que cae pues que no está todo perdido.

Como dijo Lampert, “los héroes son aquellos que no tienen nada que perder” y visto así como que se me antoja tarea si no de héroes sí de entusiastas la gente que ha hecho posible estos productos culturales, más analíticos que informativos, sobre el devenir literario y cinematográfico de Canarias.

Hace unas semanas se anunciaba en este mismo su blog la aparición en el océano de la red de Trasdemar y ahora lo hacemos de La Salamandra Ebria, esta última cuenta también con su edición en papel que imagino que se podrá adquirir en librerías. Lo señalaría pero es que no se informa de dónde ni cuánto cuesta hacerse con este primer número que espero que no sea el último.

Coincide con La Salamandra Ebria en no indicar dónde puede adquirirse (imagino que en librerías y no sé si kioscos) el segundo número en papel de la revista de cine Alisios, que es un producto de aquí, cien por cien canario, cine por cine canario también que cuenta en sus páginas con un interesante y completo artículo de Jairo López que recorre, como anuncia su subtítulo, las películas de ficción canarias desde la crisis económica al coronavirus.

Pueden acceder a sus contenidos digitales si pinchan en los enlaces aunque en el caso de Alisios los contenidos no están actualizados.

A modo de despedida, recurro a la expresión que utilizaba el protagonista de Adiós al rey, una excelente novela de aventuras de Pierre Schoendoerffer que llevó al cine en una también excelente película John Milius: “suerte, inglés”.

En nuestro caso:

“Suerte, Trasdemar

“Suerte, La Salamandra Ebria

“Suerte, Alisios”.

* En la imagen Max Linder, actor de cine silente francés que probó fortuna en Hollywood y personaje objeto de un sobresaliente documental del cineasta Elio Quiroga con el tìtulo de El misterio del rey del cinema (2014) que no tuvo el recorrido comercial que se merecía.

Saludos, entonces y ahora, desde este lado del ordenador

Un tío con una bolsa en la cabeza, una novela de Alexis Ravelo

Miércoles, Noviembre 25th, 2020

“Que los canarios somos así: compramos todo lo que viene de fuera, solo nos importa lo que se importa”.

(Un tío con una bolsa en la cabeza, Alexis Ravelo. Siruela Policíaca, 2020)

Comenta Alexis Ravelo que Un tío con una bolsa en la cabeza le ha servido de experimento literario. También, añadiría, de mirada fresca a un género que no le hace ascos a lo novedoso. Lo cultivan de hecho en la actualidad dos sobresalientes escritores mexicanos como son Elmer Mendoza, que escribe con un referente literario en la cabeza, James Joyce; y Jorge Moch, que cultiva y rinde tributo al gongorismo en sus barrocas historias de narcotraficantes. Hay otros ejemplos ya que lo experimental tiene cabida en lo negro y criminal para explorar caminos que transitan al filo de la navaja y en donde la forma de contar el relato es tan importante como lo que se cuenta.

Un tío con una bolsa en la cabeza pese a su carácter –se trata de un largo monólogo interior que emprende un tío que lleva, precisamente, una bolsa en la cabeza– pasa la prueba y con nota ya que no olvida –casi siempre– que tiene que convencer a quien se sumerja en ella.

El experimento resultante es apto así para toda clase de públicos. Comprensible para toda clase de lectores. Los que leen como para los que leen ocasionalmente.

La acción se desarrolla en San Expósito, una ciudad que son muchas ciudades, y en esta geografía más de personajes que de territorios, confluyen dos situaciones narrativas que circulan paralelas. En la primera, Alexis Ravelo nos introduce en la cabeza del protagonista, Gabrielo, un hombre hecho así mismo que se metió en política para medrar en aguas infestadas de tiburones. En este tramo, vamos conociendo cómo se abrió camino en la jungla de la política y los cadáveres que dejó a lo largo del camino, entre ellos los de su padre y hermano. También el de su primera esposa e, involuntariamente, el del hijo que tuvieron en común. Quizá sea esta parte, la íntima, la personal, el retrato de familia que hace de Gabrielo lo mejor de una novela donde suceden muchas cosas pero a una velocidad de vértigo que debe ser la misma que padece Gabrielo, que es el tío con una bolsa en la cabeza. A Gabrielo se le acaba el aire y el tiempo. Tiempo que aprovecha para hacer un examen de conciencia de una vida pasada que no juzga aunque sea responsable de la situación en la que se encuentra ahora: con una bolsa en la cabeza.

El otro camino, el otro tramo que va paralelo al que ya hemos comentado, consiste en describir el mecanismo que pone en marcha Gabrielo para descubrir quién pudo haber planeado el asalto. La lista de hombres y mujeres que lo odian, unos con civilizada cordialidad y otros con honestidad, es larga, lo que invita a que como lector se intente, con las pruebas que se van diseminando a lo largo de las páginas, a sospechar de unos y de otros y otras… A averiguar, con las herramientas que se dispone, la identidad no ya de los agresores –por lo que dice el tío con la bolsa en la cabeza dos macarras profesionales– sino de quién diseñó la operación para quitarlo de en medio.

El pilar de la novela lo sostiene no obstante la biografía del personaje. Su infancia y adolescencia, cómo entró en la política de la mano del que será su jefe dentro y fuera del partido. Su matrimonio, la separación; la relación que mantiene con una espectacular mulata. Los vaivenes de la política. Éxitos electorales y fracasos que desembocan en traiciones.

Todo esto y algo más explicado por el hombre que está a punto de morir de asfixia, la agonía de un personaje que determina el itinerario de una novela que, pese a que no llegue a las 240 páginas, logra que el lector siga con atención los coletazos finales de su protagonista que no es trigo limpio.

Un tío con una bolsa en la cabeza se desarrolla fuera del hábitat literario de Alexis Ravelo pero se mueve con comodidad en un territorio que cuando transita en sus otras novelas asocia con corrupción de altos vuelos, de tipos que no son para nada los granujas sin suerte que protagonizan anteriores obras del mismo autor.

Un tío con una bolsa en la cabeza
cuenta con otras constantes que han hecho de Alexis Ravelo un escritor al que merece seguirse con atención: brotan como flores sin marchitar palabros del habla canaria y se permite juegos de palabras como el de la cita que encabeza estas líneas. A su manera, insiste también en ajustar cuentas contra los poderosos. Si Eladio Monroy, esa especie de animal con conciencia de clase es un azote para multimillonarios y corruptos, Gabrielo es un corrupto que pertenece a la tribu de los corruptos solo que se ha cavado su propia tumba por una ambición desbocada.

En este aspecto, la novela queda como un punto y aparte (en una novela que curiosamente carece de puntos y aparte) en la trayectoria literaria de un escritor que busca alternativas para reinventarse y reiventar un género que no se agota porque cuenta historias.

En este proceso y con esta novela Alexis Ravelo demuestra con sus luces pero también con sus sombras que puede jugar con un género que en España él mismo contribuyó a poner patas arriba en un pasado que sigue pareciéndome que fue ayer.

Saludos, el bien más preciado…, desde este lado del ordenador