Perdone usted que no me levante
Domingo, Febrero 7th, 2010“La política es el arte de buscar problemas, encontrarlos, hacer un diagnóstico falso y aplicar después los remedios equivocados.” (Groucho Marx)
La Opinión de Tenerife publica hoy, domingo, 6 de febrero, una interesante entrevista con el viceconsejero de Cultura del Gobierno de Canarias, Alberto Delgado. Les invito a que la lean (basta con pinchar el enlace), ya que quien les escribe confiesa que algunas de sus respuestas le han dejado descolocado y más frío que un iceberg a la deriva. Algo previsible, no obstante, porque a medida que pasa el tiempo no termino por visualizar ni entender a nuestro actual responsable en la materia.
¿ENTONCES…?
Está claro que vivimos en época de vacas flacas. Y cuando digo lo de vacas flacas me refiero en especial a eso que llaman Cultura porque siempre es el primer área que sufre recorte en sus presupuestos por aquello de la contención del gasto. Lo que sí llama de forma notable la atención es que, entre otras cosas, Alberto Delgado confiese en esta misma entrevista con una ingenuidad que desarma, que se enteró de la suspensión de Mueca “por la prensa” para acto seguido limpiarse las manos de tan espinoso asunto añadiendo que nadie del Mueca habló con él.
Todavía.
“No se han dado este tipo de movimientos y yo tampoco puedo salir a la palestra como si fuera el abanderado de los defensores de la cultura”, comenta.
Y yo pienso, porque últimamente no hago otra cosa que la de pensar, que esa es precisamente una de las muchas acciones que se espera de usted precisamente por el cargo que ocupa: ser el primer “abanderado” de la famélica legión de los que son defensores de la cultura. Sobre todo cuando tiene muy claro (como lo tenemos muy claro quienes nos preocupamos por estos temas sin responsabilidad ni influencia política alguna) que Mueca “si este año se deja de hacer, no estoy tan seguro de que se pueda recuperar el próximo año.” (La negrita es nuestra).
Y PESE A TODO
En contra de lo que puedan pensar algunos, y pese a sobresalientes desaciertos como la de permitir todavía que en las ya tristemente famosas (des)comisiones de nuestro audiovisual figuren miembros –ahora sin voto pero sí con voz– de la Acepa (cuando muchos de los proyectos presentados a esas (des)comisiones son de gente de esa misma asociación), la gestión de Delgado no ha sido todo lo mala que algunos pudieran pensar. Es más, creo que ha sido lo suficientemente buena para que, culturalmente hablando, los efectos de la dichosa crisis no hayan resultado demoledores en las islas.
Todavía.
El actual viceconsejero tiene madera, además, de mediador. Papel que debe continuar explotando en unos días tan poco aciagos como son los actuales. Ello implica que sí debe de abanderar a los defensores de la cultura sin salirse de su sitio. Y al mismo tiempo, el de garantizar que está ahí, no encerrado como muchos sospechaban en una extraña torre de marfil.
¿SINIESTRAS LISTAS NEGRAS?
Se le pregunta al Viceconsejero en la entrevista si es verdad eso de que en su departamento existan listas negras de artistas y creadores críticos. Y Alberto Delgado responde una vez más con argumentos digamos que ingenuos porque, destaco del texto, “lo primero que me dijo Paulino Rivero (al ser designado en el cargo) es que hay que atender a todo el mundo. Eso es también lo que a mí me pide cuerpo”.
Y pone como ejemplo al escritor canario Luis León Barreto, al parecer una de las voces discordantes, porque pese a sus arremetidas: “sus libros están en Madrid y algunas de las obras traducidas son suyas” gracias al Gobierno de Canarias; así como a todos aquellos que si bien han presentado proyectos como no salen adelante, se han dedicado a alimentar con rencor el mito de la caza de brujas.
Y no, que no veo yo al señor Delgado todavía como una especie de siniestro senador McCarthy.
El Viceconsejero habla: “Todos creemos que nuestro proyecto es el mejor, pero claro, el problema es cuando hay tres ideas mejores a la tuya. Entonces es cuando se habla de listas negras. Si es que muchas veces traemos hasta profesionales de fuera de Canarias para que valoren los proyectos, con el fin de que no se puedan crear suspicacias. Y aún así se hablan de listas negras”.
Y finaliza el buen hombre: “Yo puedo hacer una lista muy grande de gente crítica con este Gobierno actual y que sin embargo están participando con nosotros en proyectos conjuntos. Cuando quieras podemos hacer esa lista. Hay personas que nos han criticado mucho incluso a través de los medios de comunicación y que han recibido nuestro apoyo en algunos proyectos.”
Lo que me hace plantear, y lo escribo de veras con la humildad del sencillo aprendiz:
¿Podría confeccionarnos esa lista un día de estos y presentarla en oficiosa rueda de prensa?
Uy, mucho me temo que no.
Saludos, sin que se me borre de la cabeza la gloriosa imagen de Juana de Arco, desde este lado del ordenador.