Una pica en Flandes, de The Art Teacher, en el espacio Bronzo

Septiembre 25th, 2024

Espacio Bronzo inaugura este viernes, 27 de septiembre, a las 20.00 horas, la exposición Una pica en Flandes, con obra de The Art Teacher, heterónimo del artista plástico Claudio Marrero. La muestra, con la que Bronzo da inicio a la temporada de exposiciones, está disponible para el público hasta el 8 de noviembre en la sala lagunera situada en el 19 de Núñez de la Peña.

Con su característica carga de ironía y su mirada crítica, The Art Teacher presenta en Espacio Bronzo una amplia producción de piezas de muy variada factura en las que combina los métodos y técnicas de la escultura, la instalación y la fotografía. Además, es esencial un conjunto de textos en prosa y poesía que forman parte indisociable de algunas de las obras.

El autor propone una reflexión crítica sobre la historia y la cultura en la que aborda el colonialismo, sus protagonistas, sus acciones y sus efectos en la cultura contemporánea. Se sustenta en una visión de mirada larga hacia los momentos del pasado en que se sentaron las bases del modelo extractivista de las riquezas y los territorios sometidos por las potencias coloniales.

Al mismo tiempo, The Art Teacher aborda cómo la relación establecida entre los pueblos a raíz del vínculo colonial se tradujo en postulados culturales con una profunda carga ideológica, unas veces sutiles y otras más evidentes.

El artista, nacido en Arucas (Gran Canaria) en 1967, abandonó en 1992 los estudios de Arquitectura para incorporarse a Bellas Artes, con la especialidad de Escultura, que concluyó en 1997, y a un Máster en Conservación del Patrimonio Edificado. En 2000 fundó la Academia Crítica y a partir de 2002 ejerció como profesor de Dibujo en Enseñanza Secundaria para posteriormente dirigir el Centro de Educación de Personas Adultas (CEPA) de Güímar, a partir de 2018. En 2024 alcanzó el grado de Catedrático de Dibujo. En 2006 presidió la sección de Arte del Ateneo de La Laguna, una implicación que lo llevó a presidir esta institución cultural desde 2019. En 2008 abrió el Espacio Tres Gardenias en Santa Cruz de Tenerife y dos años después, el The Art Teacher Studio.

Entre sus exposiciones más recientes destacan su participación en las cuatro ediciones de las colectivas Menudencias (El juego, 2021; La locura, 2022; El mar, 2023; El deseo, 2024) de Espacio Bronzo, así como In / Out. Un mapa posible, en el CAAM (Las Palmas de Gran Canaria, 2020); The man who mistook his wife for a hat, en la Galería Saro León (Las Palmas de Gran Canaria, 2018); Brexit begun at Waterloo, en el Perwez Cultural Center, (Perwez, Bélgica 2018); Corruptio Optimi, en Àcid Sulfuric (Barcelona, 2017); Mar, en Dom Omladine (Belgrado, 2010), en Chodovska Galerie (Praga, 2011) y en el Círculo de BB. AA (Santa Cruz de Tenerife, 2011).

Saludos, vayan a verla, desde este lado del ordenador

Nicolás Melini: “Los escritores venezolanos no van a dejar que Maduro les robe este espacio con la literatura”

Septiembre 23rd, 2024

El tiempo pasa a una velocidad de vértigo. Quien se lo iba a decir a Nicolás Melini (Santa Cruz de La Palma, 1969) cuando planteó hace ahora seis años y con la ayuda del también escritor Juan Jesús Armas Marcelo, la idea de un encuentro en Canarias con autores de la otra orilla. Lo que fue sembrado al final fructificó y desde este lunes, 23, hasta el sábado 28 de septiembre, Los Llanos de Aridane volverá a acoger una nueva edición del Festival Hispanoamericano de Escritores. El país invitado este año, tras México y los que conforman Centroamérica, es Venezuela, una tierra que mantiene desde hace siglos una vinculación especial con el archipiélago.

Medio centenar de escritores, periodistas y editores se reunirán esos días para hablar de su literatura pero también para conversar sobre la inestable situación política y social en la que se encuentra Venezuela y las que parecen cada día más deterioradas relaciones con España. Esta semana se hablará también de la relación Canarias/Venezuela y de libros, muchos libros. Tantos, que una librería de Caracas retransmitirá los actos de este encuentro acercando un poco más dos tierras que llevan tanto tiempo dándose la mano y ayudándose cuando las nubes amenaza tormenta.

- La organización del Festival anunció el año pasado que el país invitado en la edición del 2024 sería España aunque uno dos días después se retractaron para comunicar que sería Venezuela… ¿qué fue lo que pasó?

“Lo reconsideramos porque nos dimos cuenta que este año había varias citas con España y que lo mejor era dedicarlo a Venezuela. Éramos conscientes de lo delicado que era rectificar pero al final creo que ha merecido la pena. El caso es que fuimos valientes al reconocer que nos habíamos equivocado”.

- ¿No temen que la actualidad política y social que vive Venezuela politice demasiado la sexta edición del Festival?

“Pienso que la política forma parte de la vida y conociendo a los escritores venezolanos que asistirán sé que no van a dejar que Maduro les robe este espacio con la literatura. En este sentido, me parece que el Festival es un foro como otro cualquiera con libertad de expresión para que todos digan lo que quieran. Y habrá gente con ganas de decir cosas de Venezuela y otras que no, o piensen que no deben, que ese no es su papel. En todo caso ¿por qué sería un problema que el Festival se politizara? Los escritores estamos para fomentar el sentido crítico y el Festival defiende la libertad de expresión, que la gente opine lo que quiera”.

- ¿Cuáles han sido los criterios para la selección de los escritores invitados?

“Estamos muy bien asesorados y mantenemos una estrecha conexión con Venezuela. Juan Jesús Armas Marcelo y yo conocemos muy bien a los escritores venezolanos y el criterio que nos guió fue el de relevancia y el generacional. Desde la escritora venezolana más joven invitada a los más veteranos como José Balza y escritores que ahora rondan los 60 años de edad y otros más jóvenes para dar una idea de lo que está pasando en la actualidad en la literatura venezolana. Hemos publicado además un libro para ampliar esa foto porque colaboran escritores que por una u otra razón no estarán en el Festival, y algunos son jóvenes y están comenzando”.

- La publicación del libro es una idea novedosa en esta edición, ¿estudian la posibilidad de repetirla en próximos encuentros?

“No, no existe esa idea. En este caso se unieron los factores y me pareció que era pertinente y por eso se puso en marcha y la verdad es que el libro ha quedado muy bien pese a que se hizo en un tiempo récord, apenas tres meses, y eso que fue un trabajo complejo porque se trata de una antología que reúne a muchos escritores. Creo que es una publicación pertinente y la actualidad nos ha ayudado por razones que todos entendemos muy negativas”.

- Una de las críticas que recibe el Festival es la escasa presencia de escritores canarios.

“No sé quién critica eso porque todos los años incluimos autores canarios. Contamos con escritores de las islas en la organización, como son Elsa López, Juancho Armas Marcelo, Anelio Rodríguez Concepción… Elsa López propone todos los años a un escritor joven, en esta edición Katya Vázquez Schröder. También asistirá Ernesto Suárez, al que hemos invitado por su relación con Venezuela y por ser un gran lector de su literatura así como los palmeros Luis Castañeda e Inmaculada Hernández Ortega, a la que queremos visibilizar porque ha estado mucho tiempo en las sombras. Cada año viene gente nueva de las islas y así vamos sumando personas que conocen el Festival y que aprovechan las posibilidades para conectar con escritores de otros territorios”.

- ¿Algunos de los escritores venezolanos que asisten al festival tienen relaciones familiares con Canarias?

“Hay varios escritores venezolanos cuyas familias proceden de Canarias, y varios de La Palma y es que los vínculos entre Venezuela y Canarias vienen desde el siglo XVII. Esta relación Canarias y Venezuela creo que aparecerá en muchos de los debates.

- ¿Qué puesto cree que ocupa la literatura venezolana en las literaturas escritas en español?

“Venezuela se ha convertido en las dos últimas décadas en una literatura con una proyección internacional importante. Nunca hubo un momento tan interesante como el actual, es lo que opinan algunos críticos que he leído y eso de alguna manera lo estamos contando. El Festival puede además ayudar para que se note efectivamente que su proyección internacional es realmente importante”.

- ¿Hay algún escritor venezolano que no viene pero que le hubiera gustado que estuviera en el Festival?

“Israel Centeno, que aceptó pero al final no pudo venir por circunstancias personales”.

- ¿Saben ya a qué país se dedicará la séptima edición?

“No lo sé, es algo que aún no está decidido”.

Saludos, panas del mundo, desde este lado del ordenador

Celebramos por todo lo alto el 17 aniversario de este su blog El Escobillón

Septiembre 20th, 2024

El año próximo, si aún continuamos por este planeta, celebraremos la mayoría de edad de este laboratorio casero a lo doctor Frankenstein.

Nosotros, mientras tanto, recitamos

Pensando que no veía
porque Dios no le miraba
dijo Abel cuando moría
se acabó lo que se daba

Saludos, digo, desde este lado del ordenador

Sophia Hildalgo obtiene el XIV Premio Nacional de Poesía Joven del Ateneo de La Laguna

Septiembre 19th, 2024

El poemario Costilla de bytes, de Sophia Hidalgo, obtiene el XIV Premio Nacional de Poesía Joven del Ateneo de La Laguna. El jurado que decidió el fallo estuvo formado por el escritor y docente Coriolano González Montañez, la periodista y escritora Aida González Rossi y la ganadora de la anterior edición, la poeta y directora de cine Carmen Pedrero, quienes destacaron su calidad literaria, así como la de todas las obras presentadas en una edición “con libros de enorme valor poético”.

Costilla de bytes se trata en palabras de Coriolano González de un libro de riesgo y acierto. Retuerce el verso, la lengua, los conceptos. “Es un libro de denuncia, de rabia, contra el posicionamiento social, contra la tradición. Sophia Hidalgo muestra una madurez sorprendente en este múltiple retorcimiento del concepto poético que la acerca a los textos más actuales. Costilla de bytes es un libro necesario e imprescindible para quienes busquen los caminos de la poesía actual”.

Aida González Rossi destaca la complejidad de un poemario que es “consciente de sí mismo, novedoso y sensible, social y juguetón. Me cautivó su pulcritud, también, y sus referencias transformadas en algo totalmente nuevo» mientras que Carmen Pedrero señala que Costilla de bytes es un poemario diferente, “con alma, que juega y se permite caminos inesperados. Nos va guiando con humor y originalidad por una reflexión profunda sobre los cuerpos y la sexualidad en una generación educada a través de Internet. Creo que la escritora toma riesgos, no se censura, y habla de temas tan contemporáneos como importantes con agilidad y brillantez».

La ganadora Sophia Hidalgo Hernández (Tenerife, Tacoronte, 2001) es escritora y graduada en español: Lengua y Literatura, por la Universidad de La Laguna. Pertenece al equipo directivo de la revista literaria Aguaviva. En 2023 ganó el primer premio en el XIX Concurso Universitario de Relato Breve Día del Libro de la Universidad de La Laguna, con el cuento Alumbramiento y el certamen de creación literaria de los Premios al Arte, celebrado por el Ayuntamiento de Candelaria, con el texto Bajo la alfombra, entre otros.

Algunos de sus textos están publicados en las antologías El Gran Libro de los Pájaros (2023), editado por Blackie Books, y Siete vidas (2023), de mano de la editorial La Gallofa Cartonera, y en las revistas Farándula, de creación e investigación de la Escuela de Actores de Canarias, Casapaís y Nexo, del Instituto de Estudios Hispánicos de Canarias. Sube sus escritos o recita extractos en redes sociales. Su usuario es @sosphia_, tanto en Twitter/X como en Instagram.

Saludos, enhorabuena, desde este lado del ordenador

José Carlos Acha: “Todo el mundo tiene problemas”

Septiembre 16th, 2024

Ya casi son treinta o al menos los araña para cumplir los años que el popular José Carlos Acha (Santa Cruz de Tenerife, 1963) lleva dedicado a la actividad política. Primero en Coalición Canaria –fue concejal en el Ayuntamiento de la capital tinerfeña entre los años 1999 y 2007– y a partir de 2009 en el Partido Popular, donde fue elegido de nuevo concejal pero del PP entre 2011 y 2019, periodo en el que llegó a dirigir la política cultural del municipio. Desde 2023, José Carlos Acha es consejero de Cultura del Cabildo de Tenerife y como el tiempo pasa como un suspiro, acaba de celebrar estos días un año al frente de esta complejísima responsabilidad.

Trabajo ha tenido. De momento, se ha reunido con representantes del arte y la cultura para conocer sus demandas. También ha lidiado con la guerra mediática que se desató tras conocerse el nombramiento de Sergio Rubira como director de Tenerife Espacio de las Artes TEA aunque la polémica no le alborotó su casi siempre impecable peinado.

Nadie le puede negar a José Carlos Acha cintura política y voluntad para resolver problemas, algunos de los cuales si le vienen de frente, desvía de un taconazo a tierras de penumbra. También que ha entrado con muchas ganas. En todo este tiempo ha intentado corregir lo que no se corrigió en el pasado, algún desaguisado vinculado con la apertura de nuevos espacios culturales como el Baudet, donde operaba la librería del Cabildo que se cerró hace unos años sin que nadie diera explicación alguna y la Sinfónica, que apuesta por sacar de su zona de confort. En esta entrevista cuenta que va a respaldar a las salas de arte y al mismo tiempo plantea si no arreglos sí que algunas líneas de trabajo para reconducir el ecosistema cultural tinerfeño.

- Ya lleva poco más de un año al frente de la Consejería de Cultura del Cabildo de Tenerife. La pregunta es, antes de entrar ¿tenía un programa de actuaciones o ya como consejero de Cultura se ha visto forzado a improvisar sobre la marcha?

“No, teníamos un programa de actuación más o menos encajado. Bueno, encajado… Lo que ocurre es que la realidad se impone y descubres otras historias y te das cuenta de situaciones de las que no tenías conocimiento directo. En ese programa de actuaciones hay cuestiones que se han ido revisando y avanzado en algunos de los casos”.

- ¿Como por ejemplo?

“La exposición permanente de Óscar Domínguez, la Bienal Contemporánea de TEA ¿sabe que se han presentado novecientos trabajos? También desarrollar la parte de exposiciones temporales con artistas canarios contemporáneos. El objetivo es que hayan varias líneas de trabajo que relacionen a Tenerife Espacio de las Artes TEA con la sociedad para que sea accesible a todos. Y luego, como ya hemos dicho, la exposición de Oscar Domínguez”.

- ¿Va a haber otra exposición dedicada a Óscar Domínguez?

“El espacio se mantiene, lo que se va a hacer es renovarlo todos los años proponiendo una visión nueva del artista tinerfeño, abordando un tema novedoso de manera que no vayas dentro de cinco años y veas la misma exposición. Este trabajo lo hará el conservador de la colección TEA, que sabe que hay que renovar la exposición cada año para que no sea siempre la misma. La idea es organizar visitas guiadas a estas exposiciones y exhibir documentales y celebrar jornadas específicas con el objetivo de hacerlo más dinámico. Son aspectos que considero que hay que seguir trabajando”.

- ¿Y en las artes escénicas?

“Hubo un parón y la razón de ese parón, por ejemplo, la encontré después cuando observo que la situación era mucho más grave de lo que pensaba y que tiene su origen en la creación de un programa que estaba separado de la Red de Espacios Escénicos Municipales de Tenerife y que contó con 900.000 euros y estaba destinado a ocho municipios”.

- ¿Y cuál fue el resultado?

“Pues que la contratación de compañías canarias descendió mucho. Digamos que unos 170.000 euros menos en contratación”.

- ¿En qué consistía este programa?

“Se creó dentro del Auditorio y a través del cual el Auditorio pagaba a los programadores que iban a ferias a ver cosas y a la vuelta le decían al Auditorio ‘quiero que traigas esto’ y ‘esto’ lo pagaba el Auditorio. Se suponía que ese circuito tenía un precio único y que las obras se representarían en esos ocho municipios porque los ocho contaban con un teatro pero luego te encontrabas que en algunos sitios cobraban y en otros no pero sobre todo sobresalía por la diferencia que marcaban con el resto de los municipios que no entraron en ese programa. Hubo muchos ayuntamientos que pedían ‘¿y yo por qué no estoy ahí dentro?’ Otro problema que generó fue el sensible descenso que se produjo en la Red de Espacios Escénicos Municipales de Tenerife ya que se contrataba por otro lado. Fue Réplica, la Asociación de Empresas de Teatro de Canarias, quien nos planteó la solución y quien me mostró la magnitud del problema cuando llegué”.

- ¿Y ya se ha corregido la situación?

“De hecho se adaptaron las cosas buenas que tuvo ese circuito a la Red de Espacios Escénicos Municipales de Tenerife pero fue un problema que no esperaba encontrar cuando llegué a la consejería y del que desconocía su magnitud”.

- Hablemos ahora de infraestructuras.

“Hay dos líneas de trabajo, un plan de infraestructuras culturales que lleva funcionando desde hace mucho tiempo pero que avanza en algunos sitios pero en otros no. Hemos dado un impulso a Candelaria, por ejemplo, a Buenavista del Norte, a Los Silos, a Icod de Los Vinos ya que contaban con infraestructuras que estaban detenidas. Estas infraestructuras se crean en aquellos lugares donde no hay un espacio dedicado a la cultura y solamente desarrollan una programación cultural en las fiestas y con el fin de evitarlo adaptaron infraestructuras del municipio que se encontraban en malas condiciones. El apoyo económico iba para la construcción y para el equipamiento pero en esta cuestión se produjeron muchos atascos. Candelaria, por ejemplo, y desde el Cabildo le hemos pegado un empujón. Hay otras que sí se han desarrollado y de hecho la Sinfónica ya ha ido a tocar a, por poner dos ejemplos, Adeje y La Orotava. Por otro lado, nos dimos cuenta que las redes de salas de arte en los municipios se habían venido abajo aunque quedaban algunos con una sala funcionando y en condiciones en Candelaria y Los Realejos pero hay otros que no. Hemos encargado un estudio que ya se nos ha entregado en el que se detallan cuáles son las condiciones de las salas de arte de cada municipio y qué necesitarían para poderlas mejorar. Y en el próximo presupuesto vamos a ver la forma en la que podemos destinar una parte de los fondos de infraestructuras culturales para arreglar las salas de arte y equiparlas dignamente para que puedan exponer.

Ese es un problema que estaba ahí y que hemos abordado durante este año. Hemos trabajado además con otros sectores, como los coros y bandas municipales. En este trabajo observas cosas pero te faltan datos en algunas así que necesitas conocerlas para averiguar lo que está pasando y abordar el asunto con seriedad”.

- Se ha reunido con distintos colectivos para conocer sus demandas. Ahora anuncia la creación de un espacio para fotografía.

“Nos reunimos con el sector de la fotografía y entendimos la necesidad que tiene de disponer de un espacio en el que puedan desarrollar talleres, impartir conferencias, exposiciones permanentes. Hemos localizado un espacio que solicitamos a Patrimonio del Cabildo y que nos lo ha cedido”.

- ¿Y el Centro de Fotografía?

“No, el Centro de Fotografía va a seguir estando en el TEA. Lo que ocurre es que vamos a usar la Casa Borges-Estévanez para hacer todo lo que no podemos hacer en el TEA de forma permanente. La casona, que lleva ocho años cerrada, se encuentra entre la Facultad de Bellas Artes y el Campus de Guajara”.

- Otro de sus anuncios ha sido la voluntad de reabrir la Librería del Cabildo que se cerró hace ya unos años sin dar explicaciones. En una entrevista comentaba que volverá a estar donde se encontraba, el teatro Baudet, la pregunta es ¿cuándo cree que abrirá?

“Ya está adjudicada la obra para arreglar la cubierta del Baudet y hemos hecho una transferencia de fondos a IDECO para que comience la labor de sacar de un almacén los fondos bibliográficos de la librería porque algunos se encontraban en un estado deplorable. La idea es sacarlos de allí y colocarlos en un almacén en condiciones y empezar a catalogarlos”.

- Pero ¿cuándo?

“Vamos a abrir la librería y ya nos hemos sentado con el sector del libro con el fin de intentar unificar criterios y mejorar las bases de subvención porque nadie estaba de acuerdo con las anteriores. Hemos hecho unas bases mucho más amplias en las que facilitamos el acceso a ferias que se han acordado con el sector. El Cabildo de Tenerife vuelve además a colaborar con la Feria del Libro de Santa Cruz de Tenerife y la Laguna, que tendrá lugar en octubre”.

- Pero no da una respuesta ante la posible apertura de la librería.

“Creo que el año que viene. El problema ahora básicamente es trasladar los libros de almacén para empezar a catalogarlos. Y eso implica, por supuesto, un personal que tiene que estar allí. Y hay personal de IDECO que está vinculado con la librería. A IDECO lo que le pasó es que en el mandato anterior empezaron a quitarle todo lo que manejaba en Cultura pero sigue teniendo en sus manos la librería y sus fondos y la Cueva del Viento, que gestiona también IDECO”.



- Antes repasaba la labor que ha desarrollado en Artes Plásticas, que hasta ahora eran prácticamente ignoradas por las políticas culturales del Cabildo de Tenerife.

“Artes plásticas no existía en Cultura del Cabildo. Se iba a audiovisuales, artes escénicas, un poquito al libro, que lo hemos ampliado en presupuesto, y música y danza pero dentro de las artes escénicas. El libro existía pero estaba como estaba y por eso ahora intentamos arreglarlo y potenciarlo. Más teniendo en cuenta que tenemos un Pialte. Vamos a mejorar las bases, aportando soluciones. Con artes plásticas nos sentamos con las galerías y las asociaciones de artistas que hay en Tenerife y tuvimos una serie de reuniones para ver, entre otros puntos, cómo podíamos potenciar las promociones de nuevos licenciados de bellas artes que salen de la Universidad y de la Escuela Fernando Estévez. La idea es estudiar cómo atraer público a las exposiciones porque no hay público que compre. En estas reuniones se llegó a la conclusión que el elemento que une y que se podía potenciar eran las galerías de arte. Hemos creado una línea que ya está en marcha de 150.000 euros para las galerías y catálogos y asistencia a ferias y promociones de artistas que trabajan en Tenerife. Son las primeras que salen. Ya nos hemos sentado en varias ocasiones con las galerías por lo que habrá que ir mejorando constantemente esas bases pero por lo menos están en marcha y son la conexión ya que no hay muchos coleccionistas pero puede haberlos. ¿Por qué sabemos que puede haberlos? Porque cada vez que se hace Mercarte se vende todo o casi todo”.

- Uno de los puntos calientes de este año de gestión ha sido el nombramiento de Sergio Rubira como director de TEA.

“El TEA no tenía, igual que la Sinfónica, director técnico y se sacaron unas bases y se aprobó el nombramiento de Daniel Broncano que está trabajando en una serie de acciones muy interesantes con la Orquesta y el TEA, que ha dado un poquito de guerra”.

- Más que poquito, yo diría que guerra con todas sus letras.

“La verdad es que ha dado guerra pero cada vez que sale esta plaza surge una polémica. Pasó la vez anterior, así que la verdad es que nosotros estamos tranquilos porque las bases se ajustan a la normativa y tienen que pasar por el Cabildo y no solo por el filtro de los servicios jurídicos de TEA. Recursos Humanos del Cabildo revisa las bases y es la que nos dice ‘Esto está bien o esto está mal’ y si está mal, no sale”.

- La polémica no es por las bases sino por algunos miembros del jurado que son, al parecer, amigos del actual director.

“Desde el principio se dijo que hubo oscurantismo con el jurado. Y nosotros no, no hay oscurantismo. El jurado estuvo formado por una persona de la Facultad de Bellas Artes, del Círculo de Bellas Artes, del Ateneo de La Laguna y dos personas que trabajan en dos museos de la península. Las críticas empezaron diciendo que ocultábamos el jurado cuando al final el jurado no ha podido ser más transparente. Incluso la secretaria del jurado no era de TEA ni del Servicio de Cultura sino de Recursos Humanos del Cabildo de Tenerife. En cuanto a que hubieran dos personas que conocían a uno de los concursantes, estamos hablando de un sector muy concreto y si llevas trabajando en él veinte años es normal que conozcas a mucha gente y gente que te vas a encontrar. Seguro. Así que los otros que se presentaron, si hubiesen salido, iban a encontrarse en la misma situación: ‘es que estuvo con no sé quién analizando tal proyecto’, ‘es que estuvo ayudando en no sé cuánto´. Y es que son muy pocos los que pueden acceder a esta responsabilidad porque se trata de un sector muy especializado así que siempre, siempre, vas a encontrarte con un conocido porque han estado trabajando unos o con otros. Además, el jurado estuvo formado por cinco personas y todos votan. Y por unanimidad entendieron que el proyecto de Sergio Rubira era el mejor”.

- ¿Al final contará con un Director Insular de Cultura?

“Tengo un nombre pero me ha dicho que espere hasta septiembre porque tiene que solucionar antes algunos asuntos. Si no los solucionara, trataré de tirar para adelante aunque se necesita una persona de apoyo y que entienda de Cultura. No puede ser cualquiera”.

- ¿En las reuniones sectoriales que ha mantenido se ha tropezado con algún colectivo más exigente que otro?

“Todo el mundo tiene problemas. Todo el mundo necesita que hable con ellos pero es lógico porque durante mucho tiempo no hubo una interlocución fluida con el Cabildo de Tenerife”.

- Al principio me comentó que cuando llegó se encontró con una serie de cuestiones que se habían resuelto pero otras muchas que no. Me gustaría que explicara qué cuestiones fueron las que no estaban resueltas.

“Entre otras, la librería del Cabildo, por ejemplo. E incluso una especie de cultura extrañísima de ‘no vamos a comprar libros, no vamos a imprimir libros’ que es una tendencia que tenemos que cambiar”.

Saludos, viva Svejk, desde este lado del ordenador

Historia del esoterismo en España, un completo y ambicioso trabajo del investigador David Suárez

Septiembre 10th, 2024

David Suárez irrumpió hace unos años en la república de las letras con Rosacruces, historia y personajes, un trabajo sobre los hombres más significativos que han pertenecido a esta organización. Su consulta permitía que el lector descubriera el pasado como Rosacruz de relevantes personajes del mundo del arte, las letras, la música e incluso la política con espíritu divulgador.

Con la publicación de su segundo libro, Misterios y mitos del pasado, David Suárez dio un significativo paso adelante ya que ahora proponía un ensayo más ambicioso y complejo, resumir los grandes misterios que rodean a la humanidad y que el investigador tinerfeño exponía con cercanía.

La aproximación a los mitos repasaba muchos de los que han ido forjando las culturas y las religiones de distintas civilizaciones a lo largo del tiempo y su lectura aclaraba las cosas a la vez que facilitaba información contrastada a los aficionados a estos temas, que son legión.

De alguna manera, la escritura de estos dos libros parece que le han servido al investigador para acometer la redacción de la que por ahora es su obra más ambiciosa, un libro de más de seiscientas páginas con el que resume la historia de lo esotérico en este país. De ahí el título, Historia del esoterismo en España (Almuzara, 2024), que sin pretender ser un trabajo definitivo, casi lo es ya que la profusión de datos, los temas que abarca y la erudición del autor dan solidez a una obra que reclamaba su publicación porque prácticamente aborda los hitos que han ido marcando el calendario de lo esotérico en este país.

En algunas de sus páginas aparece además Canarias, entre otras comunidades que vertebran España, aunque lo más destacable de la obra sean los elementos que, según el autor, han ido marcando el relato esotérico así como algunos de sus protagonistas más representativos.

Tal y como indica su título, La historia del esoterismo en España es pura y llanamente eso: una historia, por lo que se advierte a los que esperan encontrar respuestas a preguntas que no tienen hasta este momento solución, que dejen de lado la obra porque lo que hace David Suárez es historia. Contar la crónica de unos misterios que tienen su origen muchos siglos atrás, cuando se rendía culto a Cibeles, Isis y Mitra en la Antigüedad Clásica hasta “los cabalistas, sufíes, alquimistas, magos, masones, rosacruces, teósofos, martinistas y otras agrupaciones de este tipo”, explica el autor en la contraportada del libro.

Los mejores capítulos de la obra los he encontrado precisamente en aquellos en los que Suárez propone una especie de arqueología, de rastreo de lo que conocemos de estas materias y que nos vienen del pasado. Los menos, quizá porque están demasiado explotados, los que dedica a organizaciones como los rosacruces y la masonería, donde sintetiza la información que se dispone pero en los que apenas aporta novedades al iniciado.

Al contrario, uno de los aciertos del libro es que además de texto, éste está trufado de imágenes, alguna de ellas muy significativas aunque carece de un índice onomástico que hubiera servido de complemento para quien además de leerlo, desee usarlo como herramienta de consulta. De hecho, me da la sensación que esta obra, colosal por sus dimensiones, nació más con este espíritu, el de servir de consulta a los investigadores aunque no olvida su carácter divulgador, que transmite no solo por la forma en cómo está escrito, sencilla y coloquial, sino por sus objetivos. Entre otros, explicar que pese a que el catolicismo y su manera de ver el mundo ha sido fundamental en la forja del carácter español, este es un país que siempre abrazó lo oculto.

Historia del esoterismo en España está estructurado en varios capítulos, en los primeros de ellos el autor cuenta y aclara conceptos e ideas que rodean este territorio hasta ahora poco explotado en la literatura esotérica española.

Cabe destacar que cada capítulo se ocupa de un asunto determinado, como son las escuelas de misterios, en los que explora y revela algunos de los “secretos” que rodean a los famosos Misterios de Eleusis así como otros cultos que llegaron a España, dándose el caso que comunidades enteras adoraran a Cibeles, por ejemplo.

La obra no olvida repasar el cristianismo y la gnosis en la vieja y sufrida España así como aborda el estudio de la Cábala en Sefarad, en la que aparecen nombres como los de Moisés de León y hace un seguimiento al misticismo sufí y la orden del Temple, donde dedica un pequeño pero atractivo resumen a la historia que vincula a la Virgen de Candelaria con estos caballeros que fueron en nombre de la fe a conquistar Tierra Santa.

El libro estudia con rigor y amenidad la alquimia y la masonería en uno de los capítulos más extensos del libro. También aparecen la sociedad Teosófica, Rosacruz y otras organizaciones iniciáticas como la Orden de Tebas, las inquietante Nueva Acrópolis y Ordo Templis Orientis, entre otras, proyectando luz donde antes solo había si no oscuridad sí que penumbra en torno a estos temas.

Pero destacaría sobre todo de este libro no solo su carácter pionero, de ser el primero que lo hace, sino el esfuerzo y la labor silenciosa que ha llevado su autor, David Suárez, para recopilar y más tarde desmenuzar lo que se conoce de la singularísima pero también atractiva historia de lo esotérico en España.

Saludos, ¿desea saber más?, desde este lado del ordenador