Archive for Julio, 2008

Una reflexión sobre El Tanque y los ‘performance’, ¿gatos por liebres?

Jueves, Julio 24th, 2008

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No soy de los que están en contra del espacio cultural El Tanque, de hecho elogio la recuperación de tan fascinante espacio, aunque piense que ha sido muy mal utilizado desde que se inauguró como sala multifuncional. Si a ello sumamos la campaña de desprestigio que periódicamente reaparece en los medios de comunicación para cargarse siempre lo nuevo, creo que El Tanque merece un lugar en el mundo. O al menos en nuestro pequeño y ombliguista universo tinerfeño.

Es una pena, sin embargo, que debido a sus peculiares características el espacio no haya podido (y tampoco sabido) tener una programación medianamente estable, y cuando acoge cualquier tipo de experiencia ésta sea de arte de “vanguardia” entrecomillado. De siempre, el arte de “vanguardia” entrecomillado le ha sonado a los aficionados iniciados y sin iniciar a tomadura de pelo sofisticada. Y en la mayor parte de las ocasiones no les ha faltado razón, para qué engañarnos. Sin embargo, en otras ocasiones, si que se han montado espectáculos atrevidos en sus propuestas, aprovechando las carácterísticas de un espacio que genera en el visitante cierta extraña actitud, como si visitara las entrañas de un templo donde no se adora a ningún dios.

Las veces que he tenido la oportunidad de visitar El Tanque he sentido esas y otras sensaciones, aunque la más inquietante fue una en la que se me invitó a participar en un laberinto donde perdí la noción de salida. En este sentido, El Tanque puede ofrecer numerosas oportunidades a los creadores que aspiran a que su público se mezcle con su obra, a que forme parte del juego de su creación.

Las tripas del recinto acoge ahora hasta el 14 de septiembre una nueva apuesta: Acciones retenidas, donde el paseante curioso podrá ver cuatro performance, que es una forma elegante de llamar al arte en vivo. En nombre del performance como en nombre de otras experiencias artísticas se ha hecho un poco de todo, lo que a unos gusta y a otros tanto irrita. Debo de reconocer que no guardo buenos recuerdos de los performance que he visto hasta ahora. Me parecen, de hecho, cosa de modernos y como cualquier cosa de modernos en la mayor parte de las ocasiones tuve la extraña sensación de que me estaban tomando el pelo, aunque quizá ese era su propósito. De todas formas nunca me ha gustado la gente que va de lista por el mundo, y creo que hay otras formas de provocar que la de venderte como oro algo que no es sino hojalata. O menos. Mucho menos. Esta y otras circunstancias me han hecho desconfiar de sus posibilidades, ya saben, lo he dicho, la de darme tantas veces gato por liebre…

Acciones retenidas, que así se llama la propuesta que ahora acoge El Tanque, no son de todas formas performance en vivo sino en vídeo. Esto puede ser una ventaja, aunque el espectador pierda nociones como las del olor y la proximidad de los cuerpos que hacen ejercicios por aquello de agredir el  espacio del observador, pero es probable que lo agradezcan todos aquellos que se sienten cómodamente en su papel de mirones y no como protagonistas de la acción.

Los responsables de estos cuatro vídeos son Pedro Déniz, Óscar Hernández y Beatriz Lecuona, así como Guillermo Lorenzo y Nacho Ramírez, quienes presentan su personal visión de las performances. Sólo espero, francamente, que sus apuestas estéticas no nos decepcionen. Claro que lo dice alguien que desconfía no del arte conceptual sino del pretendidamente intelectual, que es una forma nada inteligente que tiene el artista de camuflar sus carencias.

El extraño lenguaje de la mariposa…

Miércoles, Julio 23rd, 2008

“Tenemos a los productores (que no inversores) y contamos con un título de sonora repercusión en la historia del cine. Lo anunciamos con una nota de prensa, que facilitamos a algunos medios, y a esperar tranquilamente porque el guijarro terminará por transformarse en una bola de gigantescas proporciones”.

La leyenda de la mariposa vuelve a volar por estas islas abandonadas de la mano de Dios. Suena otra vez el proyecto de rodar un remake de Papillón en mi querida pero tan maltratada Canarias. Y en unos tiempos intranquilos, ola de calor incluida, uno sólo puede pensar en lo mal que nos van a ir las cosas con la dichosa crisis que se avecina o que ya está aquí…

Pero haya paz, que vuelve la leyenda de la mariposa.

Ahhhh, ¡si el gran Steve McQueen levantara la cabeza!… ¡Recordad al maestro Franklin J. Schaffner!… Y hablad de remake cuando el remake sea remake y no un una idea que se agita a un lado y al otro del siempre caprichoso viento de las ideas.

El vocero del nuevo Papillón que se rodará en cuatro de las islas Canarias vuelve a ser Vicente Mora, que debe ser el único director de cine que conozco que es responsable de una película que nunca existió, El día que murió Judy Garland se titula el filme rodado en celuloide espectral que es el único con el que no se fabrican los sueños… Mora asegura en una información que publican varios diarios locales que cuenta con un presupuesto de 90 millones de dólares para su Papillón, y que con brevedad dará a conocer quién dirigirá la nueva versión y qué actores, “de primera categoría y prestigio internacional”, integrarán su reparto.

Mora revela que cuenta con productores que respaldan su proyecto. De hecho, dice que la productora de nueva creación Atlantia Canarias (con sede en las islas) ha adquirido los derechos para producir esta nueva versión (y la de Banco, la segunda parte de las memoria oficiales de la mariposa o Henri Charrière) y que son: Manuel Corbi (al parecer intenta poner en marcha una nueva versión de Ben Hur para la televisión), John Kelly (La Dalia Negra de Brian de Palma) y Branko Lustig (galardonado con dos Oscar por La lista de Schindler de Steven Spielberg y Gladiador de Ridley Scott), todos ellos dispuestos a apoyar el proyecto de recuperar las andanzas carcelarias de Papillón. Eso sí, todavía no puede adelantar quién será el director de la cinta ni sus dos actores protagonistas.

 El nuevo Papillón, no obstante, se rodará en septiembre del año que viene… comenta Mora.

 Nos atrevemos por ello a sugerir candidatos para la nueva versión. E incluso a proponer una nueva versión en toda regla que recuperaría  un subgénero que hizo las delicias de numerosos aficionados al cine casposo en la dácada de los 80 y 90 del siglo pasado. ¡¡¡Un Papillón ambientado en una cárcel de mujeres.!!! Sugerimos varios nombres para la pareja protagonista: Penélope Cruz y Salma Hayek ó Hillary Swank y Kirsten Dunst… Claro que si el presunto remake mantiene fidelidad con la versión original, sugiero que las grandes estrellas sean entonces Leonardo Dicaprio y Javier Bardem o Phillip J. Seymour Hoffman y Robert Downey Jr. Ya puestos, también podrían quedar bien Chuck Norris y Van Damme… 

Por decir nombres que no quede.

En cuanto a las localizaciones, las cuatro islas donde dice que se rodará la nueva versión (La Palma, Tenerife, Gran Canaria y Lanzarote) no se me parecen mucho a la tristemente célebre isla del Diablo. Claro que la magia del cine hace milagros. Aunque, digo yo… ¿no sería menos costosa una producción de este calibre en la mismísima Guayana que es donde transcurre la acción de la novela? En fin…

Lo único que tengo claro (aunque no sé cómo se lo tomarán las cada día más desunidas productoras canarias) es lo que el otro miembro de Atlantia, Roger Corbi (y que recogemos del blog que firma Emmanuel Levi) dice: cuenta con la colaboración del Gobierno de Canarias para construir un estudio de sonido, Atlantia Studios, cuyos terrenos ¿cederá la misma Comunidad Autónoma que nos ha tocado vivir? ¿ o será cosa de la ZEC?

Ustedes dirán… que nosotros seguiremos informando.

El abuelo se nos pone otra vez nostálgico: ¡¡¡Qué viva el Vampus!!!

Martes, Julio 22nd, 2008

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Me apetece ponerme nostálgico. Debe ser cosa de la edad. Ahh, la edad. Si yo les hablara…

¿Qué edad tendría? No lo recuerdo bien, es probable que nueve o quizá diez tiernos añitos… El lugar si que permanece relativamente fresco en mi traicionera memoria: la rambla. La rambla que forma parte de mi vida como la de tantos santacruceros de toda la vida. Me refiero al tramo que va desde el kiosco La Paz hasta la hoy polémica plaza de Toros, que era un territorio donde podía moverme a mis anchas porque mientras mis padres se tomaban un café  yo podía caminar de arriba-abajo mirando los tebeos que colgaban en los carritos.

Eran tiempos, infantes míos, difíciles para un chaval con ganas de leer tebeos. Es verdad que estaban los de toda la vida, incluso los de Pumby que no me hacía puñetera gracia, pero yo aspiraba a otra cosa. Ya por aquellos tiempos me volvían loco las historias de espectros, mucho más que las de los súper héroes de la Marvel que editaba Vértice en aquellas odiosas (aunque hoy se han convertido de culto) ediciones en formato libro. Yo creo que por culpa de Vértice me hice más de los súper héroes de la DC gracias a los tebeos mejicanos de Novaro. Con Superman y su álter ego, Clark Kent, y su novia, Luisa Lane, y su amigo, el fotógrafo Jaime Olsen, y el director del diario El Planeta, Pedro White. Si los colorines eran de Batman, te partías de la risa con Bruno Díaz (¡Bruce Wayne!) y su discípulo Robín, que no era otro que Ricardo Tapia. No puedo olvidar al señor Alfredo su fiel mayordomo… Pero perdonad sobrinitos míos, porque me voy por la tangente…

Hablaba de mis paseos por la rambla, y de cómo contemplaba fascinado las portadas de los tebeos para adultos tipo Vampus, Rufus o Vampirella. El descubrimiento de Vampus fue para este que les escribe un punto y aparte. De hecho, todavía no sé como logré reunir las 40 pesetas que costaba el ejemplar para con manos temblorosas intentar que el kiosquero me lo vendiera. Y digo lo de intentar porque, generalmente, el kiosquero no aceptaba mi dinero porque ¡¡¡era menor de edad!!!

¡¡¡Eso sí que eran otros tiempos!!! Y ahora que lo pienso, parece lógico que saliera tanto tarado entre los compañeros de generación. Era frustrante iniciarte en cualquier cosa: las películas que te gustarían ver eran para mayores de 18 años, los tebeos que querías leer eran para adultos… En casa te mandaban a la cama justo cuando ponían las series que te gustaban… Uno tenía que hacer auténticos malabarismos para ver una película (¡ah mis añorados cines de barrio!), comprar un tebeo (se los pedías casi de rodillas a tu hermano mayor) o ver una serie por la tele, escondiéndote debajo del sofá, por ejemplo, aunque al final cayeras rendido por el sueño y te descubriera la familia por tus ronquidos en plan sensurround.

Pero no sé cómo, sobrinos (es cosa del alzheimer, de verdad), pude hacerme con un Vampus, que no era otra cosa que la versión en español de Creepy de la Warren. Y ví la estrellas.  Más tarde me hice con otras publicaciones de la misma editorial (Garbo), como el Rufus y Vampirella. También con algún Dossier Negro, pero ninguna me llenó tanto como la mítica Vampus.

Las historias se salían, sencillamente. Y ahí descubrí a maestros como John Severin, Joe Orlando, Richard Corben, José Ortiz, Esteban Maroto, Beá, Russ Heath, Álex Niño, ilustrando pesadillas que la mayor parte de las veces las firmaba el gran Archie Goodwin.

Mucho tiempo después, siendo ya un adolescente hecho y derecho, conseguí hacerme con otros números del Vampus en tiendas de viejo, hermanos de amigos a los que ya no les interesaban aquellas revistas y rastros por donde caía siempre buscando. Siempre buscando con la paciencia del mismísimo santo Job.

Hasta que me hice con  todos los números. Y saben una cosa, ahora que estoy viejo y achacoso no me canso de releer las mismas historietas cuando me encuentro en una de mis habituales bajonas. Y si bien la dichosa edad ya no hace que me sumerja en cada una de sus historias con la pasión con las que me sumergía cuando era un chiquillo, todavía me parecen la mayor parte de ellas sobresalientes aventuras terroríficas…

En fin, queridos míos, no hagan caso de lo que diga el viejo, pero diablos que los del Vampus me enseñaron por lo menos el camino que debía tomar a la hora de iniciarme en los tenebrosos mundos de la fantasía.

Y se acabó, leñe. Otro día rindo pleitesía al maestro Luis Vigil y sus artículos sobre cine que incluía en la revista objeto de mi devoción.

Un artículo nostálgico más de vuestro querido tío… Vampus.   

De la dichosa “gesta” al brazo (in)corrupto de Nelson

Lunes, Julio 21st, 2008

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¿Podría alguien tener a bien explicarme por qué tanto bombo y platillo por la celebración de la “Gesta” del 25 de julio de 1797 en 2008? Porque la verdad, no coincide con el bicentenario de aquellos hechos, lo que multiplica mi confusión ante un gasto desorbitado para conmemorar esta victoria. Victoria que apenas significó un susto para el por aquel entonces contralmirante Nelson, aunque cierto es que se quedó sin brazo.

La Sociedad de Desarrollo del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife ha invertado la friolera de 240.000 euros en los fastos que nos recordarán como aquel día ”un puñado de valientes” derrotaron a las tropas británicas que pretendían saquear ese publecito de pescadores que nunca debió de haber dejado de ser Santa Cruz de Tenerife. La millonaria cifra comienza a quemar ceros desde hoy con un ciclo de conferencias donde volverán a decirnos más o menos lo mismo: “lo valiente que fue el pueblo de Tenerife al rechazar al pérfido enemigo y la fina inteligencia del general español Antonio Gutiérrez para derrotarlo”, ciclo de películas y, atención, atención, una recreación histórica donde un grupo de adultos escenificará la batalla por las calles del viejo y castigado Santa Cruz. 

Estoy seguro que la recreación saldrá bien. Y espero estar ahí para verla en riguroso directo. Lo que nadie me ha explicado todavía es el porqué del gasto. En unos tiempos donde todo el mundo habla de crisis.

Creo que ya va siendo hora de que se hable con total seriedad de una batalla que nos han vendido como “gesta” cuando creo que tiene algo más de jeta que de cualquier otra cosa. Lo del 25 de julio se ha tranformado así en una de las miradas de ombligo más escandalosas de esta isla tan poco orgullosa de sí misma y por lo tanto tan necesitada de cariño. 

Dicen que Pérez Minik decía que dos de los grandes errores de Tenerife fue no dejar entrar a los británicos y sí dejar salir a Franco con destino a la pesadilla de la Guerra (in)Civil. Por lo que sé, no era intención de Nelson la de tomar esta plaza,  sino la de saquearla de cuanto tenía, algo que sus nietos sí suelen hacen cuando caen por esta tierra de vacaciones. 

Lo mejor, sin embargo, de la “gesta” es su final, cuando amigos y enemigos comparten mesa y mantel aunque Nelson se quedó en su barco mirando aquella tierra donde perdió el famoso brazo. No creo que el héroe de Trafalgar fuera consciente de lo que provocó a este lado del Atlántico, tampoco la de ser responsable de encender una llama tan inútil como la que a partir de aquel día no ha cesado de recordarnos la historia oficial de esta isla a la deriva: la de que los de aquí, sí que sabemos ganar.

Y lo peor de todo es que muchos aún se lo creen. Como se creen que tenemos el mejor carnaval del mundo, y los aborígenes más roussenianos del planeta, y los paisajes más bonitos, y la gente más noble y, y, y el ombligo más redondo y perfecto del universo.

Thank you, mr. Nelson

Felicidades, Patricio…

Viernes, Julio 18th, 2008

Pese a que, rayos y truenos, tenga olvidado y hasta cubierto de telarañas (que las he visto yo…) el blog vecino, sirvan estas líneas para felicitar a un amigo, Paticia Ducha, que ha sido premiado por otro amigo, Manuel Darias, como mejor comentarista del año en su ya histórica página dedicada a la historieta en el Diario de Avisos.

Patricio Ducha es responsable de un trabajo épico en favor de los colorines a este lado del Atlántico. A él, además de mantenernos más o menos informado puntualmente sobre tebeos desde el suplemento El Radikal de La Opinión de Tenerife, también es responsable de ser el primer editor (o al menos tengo esa constancia) de una revista de comics en las islas. En su infatigable amor al noveno arte (¿alguien puede decirme cuál es el octavo?) se ha encargado además en sacar a la luz el extraordinario trabajo de un puñado de dibujantes canarios, muchos de los cuales continúan hoy en activo con sus tiras en (también) La Opiníón de Tenerife.

En su currículum comiquero destaca, bribones, la de intentar –desde que asumió tal responsabilidad– hacer posible el Salón del Cómic de Tenerife, un encuentro pequeño y humilde pero tan necesario para los miles de seguidores de la historieta que tiene este archipiélago majareta. Por ello, y por otras tantas cosas que me dejo en el tintero, el premio que le concede el maestro Darias es acertadísimo. Porque cuando alguien escriba la historia del tebeo en estas siete islas perdidas del Atlántico, el amigo Patricio, el buenazo de Ducha, ocupará un capítulo aparte.

Felicidades de todo corazón.

Una interesante biografía sobre el fundador del PSOE y la UGT en Tenerife

Jueves, Julio 17th, 2008

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Cuando Canarias despierte de su habitual aplatanamiento y adopte la costumbre de mirarse el ombligo con el objetivo de encontrar historias que de verdad saquen a relucir la tibia nobleza de este pueblo es más que probable que otro gallo nos cante. Por eso siempre será bienvenida la publicación de un libro que rescata del olvido la memoria de uno de esos canarios que logra que miremos mejor a nuestro vecino, y si ese canario es Manuel Bethencourt del Río, fundador del PSOE y la UGT en Tenerife, la felicitación adquiere proporciones un poco más épicas porque en cierta manera su capacidad de trabajo, honestidad e implicación con los demás fueron las responsables de su triste final.

El también médico y ex senador socialista José Vicente González Bethencourt es autor de su biografía, libro que bajo el título El médico de los pobres inaugura también la colección Memoria histórica de Ediciones Idea.

 El Orfeón La Paz de La Laguna acoge mañana, viernes, la presentación del volumen en un acto que comenzará a las 20.30 horas y en el que el periodista Eliseo Izquierdo ofrecerá un perfil del autor y también del biografiado. El Orfeón La Paz lagunero es el tercer escenario escogido por el autor, José Vicente González para presentar su libro, tras darlo a conocer en el salón noble del Cabildo de Tenerife y también en La Palma.

La visión que traza de Manuel Bethencourt del Río (Teror 1882-Santa Cruz de Tenerife 1944) es la de un hombre de gran relevancia para la época y de sólida formación científica. Tras el golpe militar del 18 de julio de 1936, Bethencourt del Río estuvo preso en las cárceles franquistas desde el 9 de agosto de ese año hasta el 11 de marzo de 1939 en el tristemente célebre barco Adeje de la Prisión Militar Flotante y en la cárcel de Fyffes, en la capital tinerfeña. Al terminar la guerra y obtener la libertad, fue perseguido por sus antecedentes masónicos.

 Tras la publicación de El médico de los pobres, parece ser que Ediciones Idea presentará en septiembre Diario y cartas de la cárcel, de Bethencorut del Río, en la misma colección: Memoria histórica.