Archive for Mayo, 2018

Diego Ameixeiras: “Todas las ciudades tienen su cara B, su zona oscura y siniestra”

Miércoles, Mayo 9th, 2018

Diego Ameixeiras (Lausanne, Suiza, 1978) es hijo de emigrantes, lo que explica el lugar de su nacimiento, aunque siendo todavía muy pequeño regresó a la tierra de sus padres donde vivió sus infancia, adolescencia y parte de su juventud en Orense, u Oregón como dicen los naturales de esta ciudad, para dar más tarde el salto a Santiago Compostela.

Escritor gallego que escribe en gallego, Diego Ameixeiras estuvo en la pasada edición de Tenerife Noir para presentar varios de sus libros que han sido traducidos al castellano y que son considerados por la crítica especializada como la nueva esperanza de un género que, como el negro y criminal, parece que finalmente se ha instalado en España.

- Escribe en gallego, ¿no cree que le limita llegar a los lectores que leen en español?
“No, no creo que me limite escribir en gallego además se trata de mi lengua natural porque soy un escritor gallego que ha tenido la posibilidad en sus últimas novelas de ser traducido al castellano por lo que mi literatura sí se ha abierto a otros públicos del resto de España ya que como escritor gallego tengo mis lectores en Galicia”.

- ¿Ha sido usted el traductor de las tres novelas que han sido traducidos al español?
“Las últimas dos novelas fueron traducidas por Isabel Soto mientras que la última ha sido traducida por mi. Lo hice para comprobar cómo es el proceso de hacerlo tú mismo y para poder jugar con los dos idiomas”.

- En estas novelas escritas en gallego, ¿qué piensa que pierde el lector que las lee en español?
“Creo que si se pierde algo es la originalidad del texto pero más allá de eso con una buena traducción se conservan todos los matices del original. Cuando reviso las traducciones de las novelas aprovecho también para corregir algún diálogo aunque las traducciones de Isabel Soto no van en contra del texto sino que garantizan la originalidad del original”.

- Usted antes de ser escritor es periodista, ¿cómo llega al género negro?
- Fue sencillo porque siempre he sido lector de novelas de este género desde que era joven. Me gustaba entonces leer a los clásicos lo que me animó a que en 2014 intentara imitarlos creando un detective que los parodiaba mientras procuraba jugar con el género y al mismo tiempo lo descubría y me convertía en un elector de obras de muchos escritores que desconocía. Como le pasa a la mayoría, llegué a esta literatura a través de la literatura de muchos escritores que desconocía y que me enseñaron que era la mejor manera de ejercer un análisis crítico de la sociedad por la forma que tiene de introducir las emociones y conocer las contradicciones del alma humana. De que se trataba de una literatura que sacaba lo peor que llevamos dentro y que la mejor expresión de cultivar cierta literatura realista, que es lo que más interesa del género aunque mi primera aproximación como lector fue a través de la llamada como novela enigma y más tarde la negra y criminal en sentido estricto que resulta mucho más crítica y social”.

- Los protagonistas de una de las últimas novelas que han sido traducidas al castellano, Conduce rápido, son hermanos…
“Son dos hermanos a los que le surge la posibilidad de hacer un negocio cuando se encuentran casualmente con un fardo de cocaína. Se tratan de pequeños delincuentes, personajes que son también víctimas de la crisis y de la marginalidad. Son casi gente que en un momento determinado se han convertido en víctimas de un sistema económico y social que no les favorece y a mi me interesaba contar la historia de alguien que, en un momento determinado, se ve involucrado más allá de esa vida convencional que podemos llevar todos y que les obliga a traspasar la línea que separa lo legal de lo ilegal y acaban delinquiendo para sobrevivir, que es lo que les sucede a los personajes de la novela y por estas circunstancias, pienso que el lector puede empatizar con ellos porque ante situaciones límites todos, absolutamente todos, respondemos de muchas maneras, incluso cometiendo delitos. No pretendo, en esta novela, juzgar a nadie pero sí que aspiro a comprenderlos como personajes porque esa es una de mis funciones como escritor”.

- Uno de los aspectos más llamativos de Conduce rápido es que muestra el lado oscuro y siniestro de una ciudad aparentemente tan luminosa como Santiago de Compostela.
“Santiago es una ciudad que en apariencia vive en un estado de celebración permanente. Además, de trata de una ciudad monumental muy turística y de un centro cultural, político y religioso en toda regla. Es un símbolo, un gran símbolo que irradia una potencia muy importante que más allá de todo eso la transforma en una ciudad como otra cualquiera con su cara B, con sus barrios, su marginalidad, su delincuencia que no se ha tratado más literariamente porque su vestimenta habitual lo evita aunque si se leen los periódicos uno se da cuenta que es una ciudad con sus dobleces y contradicciones. Ahí está el robo del Códice Calixtino, por ejemplo. O el caso de la niña asesinada presuntamente por sus padres adoptivos, sucesos que ponen de manifiesto que la ciudad está más allá de esa visión de postal que la caracteriza. La literatura lo que hace es hurgar, explorar la cara B que oculta la ciudad monumental, y esto se consigue cultivando un género que no necesita desarrollarse en grandes ciudades portuarias sino en pequeños núcleos urbanos, ciudades de provincias que cuentan también con su cara B, su lado oscuro y siniestro”.

- El mal está muy presente en sus novelas.
“Creo que el mal viene provocado por un elemento humano y que todos podemos llegar a cometer actos malvados. Lo que me permiten el género además de describir un conjunto social es denunciar una sociedad corrupta en la que el mal se ha instalado por todos sitios, entre otros la política y la empresa por lo que si el mal se manifiesta en una persona sin como con poder, y en este último caso sus acciones nos afectan a todos. La novela negra juega con esos elementos”.

- ¿Los pequeños delincuentes que protagonizan Conduce rápido están inspirados en la realidad?
“He conocido a algunos e intento trasladar sus experiencias en la novela aunque los personajes son al final hijos de la ficción, creaciones mías en las que estudio su psicología, cómo se enfrentan al mundo de una forma completamente opuesta a la mía diaria, que me permite trabajar en casa y no salir a a la calle para buscarme la vida. Por eso, y partiendo de un pequeño conocimiento que he tenido con algunas de esos pequeños delincuentes he recreado situaciones que son ficción pero que cuentan con una base real”.

- ¿Hasta que punto pesa el periodismo en su obra?
“Creo que algo pesa pero no sé hasta dónde. Es verdad que a la hora de escribir intento hacerlo lo más claro, breve y conciso posible y que leo mucho periódico y reportajes de compañeros que tratan sobre temas oscuros, al margen de la ley. Respeto y aprecio su trabajo y procuro acercarme a la vida a través de lo que cuentan estos periodistas. En este aspecto, mis novelas le deben mucho a los periódicos y a los periodistas pero no sé cuánto puede diluirse en la forma en que están narradas”.

- ¿Cómo construye a los personajes?
“Intento construirlos lo más verosímil posible y doy mucha importancia a la voz que que cuenta la novela, ya que puede aportar mucho a la historia. Historia que puede ser lo primero que se te ocurre o que te aparezcan los personajes y escribas una historia en torno a ellos como me pasó con los hermanos delincuentes de Conduce rápido”.

- Además de Santiago, otras novelas suyas se desarrollan en Orense…
“Adapto mis novelas en Orense y Santiago porque son mis dos ciudades. Orense en mi ciudad, la que llevo dentro aunque por estudio y trabajo estoy dividido con Santiago, y me gusta jugar con escenarios diferentes en el que Orense representa la ciudad gallega más literaria al contar, entre otras novelas, con La parranda, de Eduardo Campo-Amor. En Santiago pasa algo parecido aunque Orense, emocionalmente, es mi ciudad, la que conozco más a fondo.

- Orense, a la que también se conoce en algunas de sus obras como Oregón.

- Alguna gente de la ciudad la conoce así, es un nombre que se utiliza informalmente por lo que bautizarla Oregón en esas novelas le daba a la ciudad una categoría un poco mitológica. Eduardo Campo-Amor llamaba a Orense como Áurea, así que he hecho lo que han hecho otros escritores, crear su propio espacio literario, su propia ciudad que yo he rebautizado con un nombre que no es mío ya que está en boca de mucha gente cuando se refiere a Orense pero que me sirve para enmarcar una visión determinada de la ciudad que tengo en la cabeza”.

- Este mes se publica su nueva novela.
“Y en gallego y castellano simultáneamente. Es la primera vez que he tenido esa posibilidad.

- ¿Y el título?
La crueldad de abril”.

- ¿Puede adelantar algo de su historia?
“La acción comienza cuando se descubren dos cadáveres calcinados en una casa abandonada y la investigación que emprende el protagonista más allá de la que dicta la versión oficial ya que parece que hubo un incendio, pero un incendio provocado que acabó con dos sin techo y el relato de sus vidas pasadas. El género negro me sirve para contar una realidad que tenemos delante pero a la que no le prestamos importancia por lo rápido con lo que circulan las noticias en la que, desgraciadamente, consigna muertos de primer y segundo orden.

- La novela negra es la novela realista de nuestro tiempo, defiende el escritor hispano mejicano Paco Ignacio Taibo II.

“Si alguien quiere contar una historia actual con personajes reales y reconocibles de nuestras ciudades saldrá siempre algo negro. La mejor forma de ser realista en literatura actualmente es la novela negra, no la de enigma, sino la negra y criminal que cuenta historias sobre la marginalidad y esa doblez que todos llevamos dentro”.

Saludos, a leer que son dos días, desde este lado del ordenador

Golpes de gracia, una novela de Joxemari Iturralde

Martes, Mayo 8th, 2018

No me atrevería a decir que Golpes de gracia (Malpaso, 2016) sea una novela sobre el boxeo aunque sus protagonistas sí sean boxeadores. Dos púgiles vascos que existieron realmente, Paulino Uzcudun e Isidoro Gaztañaga, y que sirven de material literario para el escritor Joxemari Iturralde, autor de una de esas novelas ¿no ficción? que despiertan pronto el apetito de su lectura.

Los personajes que la inspiran son en gran parte los responsables de esta adicción. Cada uno de ellos representa una forma de entender la realidad no ya de un deporte bronco como es el boxeo sino del País Vasco y su manera de enfrentarse a la vida.

Cada uno de ellos tuvo una existencia de novela. Paulino Uzcudun intimó con algunas de las grandes estrellas de Hollywood de los años veinte, lo que hizo daño a su carrera deportiva. Tras regresar a España y estallar la Guerra Civil, se afilió a Falange y cometió una serie de tropelías que han dejado ingrato recuerdo en su tierra. Como curiosidad, comentar que Paulino Uzcudun participó en uno de los frustrados operativos para rescatar a José Antonio Primo de Rivera, preso en 1936 en la prisión de Alicante.

La vida de Isidoro Gaztañaga es igual de irregular que la de su oponente, Uzcudun. Las mujeres significaron su perdición para que prosperara en un deporte donde mente y cuerpo físico tienen que trabajar al cien por cien… al final, ambos púgiles se decantaron por los vicios, que son más fáciles de cultivar que la férrea e intensa disciplina deportiva.

Escrita sin aspavientos, siguiendo la regla del sujeto-verbo-predicado, Golpes de gracia pone de manifiesto el excelente estado de salud que vive la literatura vasca al proponer historias cuya localidad trasciende hasta hacerse universales. En este caso, recurriendo a dos personajes fascinantes que ascendieron a golpes sobre el cuadrilátero hasta caer al vacío una vez acariciaron las mieles del éxito.

Relato pues de perdedores, los dos personajes lo son, lo mejor de esta novela que recoge hechos reales es que Joxemari Iturralde sabe mostrar las contradicciones de sus protagonistas sin recurrir a extraños juegos malabares, a experimentaciones que más que mejorar, habrían liquidado el espíritu de una obra en la que su autor pretende mostrar dos realidades de su tierra.

El libro cuenta con un breve pero interesante prólogo de Ignacio Martínez de Pisón, en el que además de informar sobre el movimiento literario en el que mueve Joxemari Iturralde, da algunas claves sobre el libro en las que se pueden estar a favor o en contra, pero que son indicadores de que el texto que se va a leer va más allá de la sencillez con que está escrito ya que anuncia que se trata de una obra compleja, con numerosos matices que dan consistencia a este interesante retrato de dos hombres que se hicieron famosos en su tiempo gracias a un deporte que consiste en derribar al contrario.

Comenzaba esta reseña con un duda que permanece mientras escribo. Golpes de gracia no es un libro sobre el boxeo pero casi ya que propone el retrato de una pareja de deportistas que nunca se llevaron demasiado bien debajo del cuadrilátero. Lástima que no se enfrentaran encima de él, es más que probable que uno y el otro hubieran cambiado su manera de ver la vida.

Saludos, uno, dos, tres, desde este lado del ordenador

Elio Quiroga inicia el rodaje de La estrategia del pequinés, la novela de Alexis Ravelo

Lunes, Mayo 7th, 2018

Elio Quiroga inicia en mayo y continuará en junio el rodaje de La estrategia del pequinés, la novela de Alexis Ravelo.

La historia se desarrolla en la capital grancanaria y con ella su autor obtuvo el premio Hammett que concede la Semana Negra de Gijón.

La versión cinematográfica estará protagonizada por Kira Miró y Unax Ugalde quienes encarnarán a Cora y Tito el Palmera. El resto de los personajes principales estarán interpretados por Jorge Bosch (El Rubio), Enrique Alcides (Junior), Luis Zahera (Beltrán), Pep Jové (el Gordo), Ismael Fritschi (Larry) y Luifer Rodríguez (Felo).

El guion de la película es de David Muñoz (El espinazo del diablo) y Elio Quiroga; la dirección de producción de Ian Stewart; la de arte de Sergio Hernández y la de fotografía de Juan Antonio Castaño (AEC).

El filme cuenta también con Ángel Fraguela (sonido directo); Beatriz Faura (maquillaje) y Antonella Camponeschi (vestuario), así como de productora asociada a Margaret Nicoll, habitual colaboradora de Quiroga y con Jorge Gimeno Suárez.

Una vez estrenada, La estrategia del pequinés tendrá sus ventas mundiales en exclusiva con la norteamericana Guardian Entertainment, responsable de la distribución a más de treinta territorios de los anteriores largometrajes de ficción de Quiroga, La hora fría y No–Do. La distribución en España correrá a cargo de la empresa Vercine.

Saludos, ganas tenemos ya de verla, desde este lado del ordenador

Hoeizontes circulares, aforismos de Benito Romero

Lunes, Mayo 7th, 2018

Benito Romero es una de las personas más cultas e inteligentes que he conocido en los últimos tiempos. Es ese tipo de individuo con el que puedes tomarte un café y perder el tiempo conversando sobre libros, escritores, películas y descubrir que en muchos de los casos hay coincidencias y en otros, afortunadamente, discrepancias que se diluyen charlando.

Horizontes circulares (Ediciones Trea, 2018) es el segundo libro que publica. Se trata de un conjunto de aforismos que el autor ha distribuido en diferentes capítulos o secciones (Trayecto, Ansia, Territorio, Impresiones y Escombros) que revelan en muchas de las ocasiones agudas reflexiones en las que el escritor no esconde su mirada de filósofo. Un estilo, este de filosofar, que reprime por aquello de no vayan a tomarme por raro pero que potencian varios de los textos que publica en este libro que está llamado a convertirse en una de las grandes revelaciones literarias que este año se han parido desde Canarias, tierra sin paz ni pan.

Cuenta Bruno Mesa en la contraportada de Horizontes circulares que “una ironía impiadosa y un uso erizado de la paradoja atraviesan este libro y acaso los estructuran”. Y Bruno Mesa sabe de lo que escribe, él mismo publicó hace unos años un libro de aforismos y ensayos con el título de Argumentos en busca de autor.

En Horizontes circulares a mi, personalmente me han gustado por su fina ironía y contundencia lo que Benito Romero recoge en el segmento Impresiones. Desarma encontrarse con frases que dicen cosas grandes con tan pocas palabras:

“INCLUSO SER imbécil no es fácil: requiere de un arte”.

Hace pensar, pensar sobre mucha gente que conoces y que pulula a tu alrededor o quizá seas tú mismo uno de esos artistas que van por la vida de místicos de todo a un euro.

En este libro, escaso en páginas pero rico en contenidos que bascula entre la sonrisa y la lágrima, planea sobre todo un existencialismo que a veces pone los pelos de punta y en otra los puntos sobre las íes. Una obra, ya se ha dicho, sorprendente y necesaria que puede servir de breviario para aguantar las inclemencias de los malos tiempos que nos ha tocado vivir.

En esta colección de aforismos, muchos de los cuales son acerados, directos, como dentelladas de un pit bull, Benito Romero observa su alrededor y con la palabra que se le escapa se ríe, que es la mejor manera de tomarse las cosas en serio, de todo cuanto se mueve a su alrededor:

“LOS INGREDIENTES del perfecto sándwich académico: prólogo, presentación, introducción, estudio preliminar, notas a pie de página, bibliografía y mucha, mucha mayonesa”.

Bruno Mesa dice de Benito Romero que en este libro ha escogido ser “un satírico perplejo y un pensador no domesticado”, y da en el clavo porque entre otras virtudes de este libro se encuentra un escritor que pese a su humildad revela a un pensador de quilates.

Un tipo que lee y que ve y que escribe y que medita y reflexiona. Un tipo, ya ven, que parece que no ha nacido en las islas Canarias.

Saludos, solo sé que no sé nada, desde este lado del ordenador

La editorial canaria Baile del Sol es homenajeada en el 40 Festival Iberoamericano de la Edición, la Poesía y las Artes de Punta Umbría (Huelva)

Domingo, Mayo 6th, 2018

La editorial canaria Baile del Sol recibió este sábado, 5 de mayo, un homenaje en el marco del 40 Festival Iberoamericano de la Edición, la Poesía y las Artes que se celebra en Punta Umbría (Huelva).

Intervinieron en el acto autores de Madrid, Vizcaya, Badajoz, Valencia, Málaga y Huelva como Inma Luna, Eladio Orta, José Blanco, Ángel Calle, Manuel Moya, Antonio Orihuela, Eva Vaz, Uberto Stabile, Rafael Delgado y Eloisa Alba.

Cabe recordar que ya en 2010 y en este mismo encuentro la editorial canaria Baile del Sol recibió el premio Edita, que reconoce la trayectoria y la excelencia editorial en el campo de la edición independiente.

La nostalgia es un puto error

Viernes, Mayo 4th, 2018

Hace tiempo que me arrancaron, porque fue así, me la arrancaron de cuajo, la adolescencia por lo que las películas de héroes Marvel o de la DC me parecen cada día más aburridas. Engendros que pergueña un cine como fue el norteamericano que antaño, tiempo a…, producía grandes películas con talento e inspiración sin recurrir a tipos y tipas recauchutados y villanos sin chispa, tanto, que temblarían ante el mismísimo Blofeld…

Pero es signo de los tiempos, y de los cómics en los que se digieren de otra manera.

Tras dar el gran salto a la grande y pequeña pantalla para disfrute de la chiquillería entre la que se cuela algún padre con serios problemas de madurez y aficionados que recrean con perfección admirable los disfraces de sus ídolos que responden a nombres como Iron Man, Capitán América, Spiderman, Hulk… llegamos a la conclusión de que estamos más solos que nunca. Que mi afición por de antes aburre a mi generación y a las que vienen a continuación porque se han dejado sorber el seso por un alien invisible que solo quiere zombies a su alrededor.

Hulk, X-Men, Iron Man… En mis tiempos, hace ya mucho, muchos años, estos personajes los conocías a través de ediciones que, literalmente los mutilaban en libros, más que revistas, en blanco y negro, y serie televisivas que vistas ya entonces daban más risa que otra cosa.

Yo llegué demasiado pronto al universo de la Marvel y de la DC, y llegué a través de esas ediciones que destrozaban los originales y a través de revistas mejicanas donde ampliaba mi vocabulario.

Por aquel entonces, venía por casa de mis padres una vez al mes un peluquero, Ángel, que tras trasquilar a mi progenitor y a los hermanos mayores, dedicaba la danza de las tijeras sobre mi cabeza.

Me gustaba el sonido de las cuchillas al cortar mi melena pero me disgustaba enormemente observar cómo el pelo caía sobre el suelo en aquellos tiempos en los que todavía disfrutaba de pelambre sobre la cabeza.

El caso es que por ser el último en ser pelado y probablemente por ser el más chico de los hermanos, Ángel me prestaba uno de aquellos cómic Vértice que reproducían aventuras de La Patrulla X (X-Men); Los cuatro fantásticos, La Masa (The Hulk);Iron Man (El hombre de hierro), Spiderman y el sargento Furia, quien antes de coronel fue sargento y blanco como la leche, no como el de las películas, que es negro como el carbón.

Le devolvía las historietas cuando pasaba un mes y tocaba de nuevo aquel pelado que nos dejaba la cabeza rasurada, casi como una bola de billar.

Al cabo de los años Ángel dejó de venir por casa porque se montó su propia peluquería de caballeros en una de las calles del barrio de la Salud. Peluquería a la que íbamos religiosamente un sábado de cada mes

Ya no leía cómics de la Marvel, por lo que la espera se hacía demasiaaado larga mientras revisabas los Hola, Garbo y Diez minutos que te ofrecía a modo de entretenimiento. Más tarde llegaría el Pronto y algún periódico local pero esto último no lo tengo tan claro. Si es claro como ela agua que Ángel conversaba con los parroquianos de lo que se suele conversar en una peluquería de caballeros: fútbol.

Los nuevos héroes le daban ahora patadas a un balón y cobraban por ello, no se dedicaban a salvar el mundo desinteresadamente como la Patrulla X o el mismo sargento Furia, que combatía con su comando de estrafalarios soldados contra nazis de expresiones desencajadas…

Recordé a Ángel mientras veía el otro día ese engendro que responde al nombre de Los vengadores. Infinity War. Y eso que la vi en un cine que es cine de verdad, aunque las butacas resulten algo incómodas para culos inquietos como el mío.

Que a la media hora de tanta pelea me distancié de la película fueron mis nada habituales visitas al baño. Dos, que así las conté, sin miedo a que me perdiera el hilo de una historia absurda, escrita por un chimpancé, con todos mis respetos por los chimpancés, y aburrida como ella sola.

Sí, sí, me consta que gusta a los niños pero eso no quiere decir nada. Yo a esa edad me tragaba como si nada Godzilla que hoy me resultan películas indigestas. Claro que, probablemente, será cosas de la edad, dirá alguno, y tendrá razón aunque nadie me quita de la cabeza de que, efectivamente y como dijo aquél, la nostalgia es un puto error.

Saludos, ¡acaba con todos ellos, Thanos!, desde este lado del ordenador